ESPACIOS
ELÉCTRICOS
PUBLICIDAD
Cerrar CERRAR
Híbridos

9 MIN

Peugeot 3008 hybrid4 a prueba (II)

Segunda parte de la prueba del Peugeot 3008 Hybrid4 y, sin desmerecer ni la pasada parte ni la próxima y última, y desde mi punto de vista, la más interesante , ya que toca conocer cómo se desenvuelve dinámicamente el 3008 con el sistema híbrido. Su diseño, es ya un habitual de nuestras calles, el 3008 no se ha vendido mal y en el sólo encontramos cambios significativos en su peso, bastante más lastrado, y en su maletero, más pequeño, ahora, toca ver cómo funciona el sistema híbrido y qué tal se comporta dinámicamente este modelo.

¿Qué consumos nos dejará el sistema. híbrido en ciudad? ¿Fuera de ella será útil? ¿Cómo afecta a la dinámica la distribución de estos dos motores? Toca ponernos al volante, giramos la llave con el selector del cambio en N y arrancamos y sí, lo hacemos en absoluto silencio, nada de ruido del bloque diésel gracias a su sistema híbrido. Empezamos bien.


Sobre el salpicadero, la pantalla en la que aparece la información sobre la música o el navegador cuenta ahora también con la posibilidad de mostrar en un cuidado gráfico el funcionamiento del sistema híbrido. Selecciono esta visión para familiarizarme con las fases que experimenta el 3008 en marcha, los cambios entre el motor eléctrico y el de combustión, los momentos en los que ambos motores se ponen en marcha para ofrecernos toda la potencia, cuando se recargan sus baterías…

Pero antes, de la práctica, la teoría: un 2.0 de 163 caballos y un motor eléctrico de 37 caballos

El Peugeot 3008 Hybrid4 cuenta con un sistema híbrido formado por un bloque diésel y uno eléctrico. El diésel es un 4 cilindros de 2.0 litros que declara una potencia de 163 caballos con un par de 300 Nm entregado a 1.750 rpm. El motor eléctrico, desde el eje trasero y apoyado por unas baterías de Ni-MH firmadas por Sanyo, entrega 37 caballos, lo que nos deja con un total de 200 caballos. Además, este último, cuenta con un par de 200 Nm.

Hablando de cifras oficiales nos encontramos con una velocidad máxima de 191 km/h, con un 0 a 100 km/h de 9.2 segundos. Los consumos declarados, son, para el de llantas de 16 pulgadas de 3.9 l/100 km en urbano, 3.7 en extraurbano y 3.8 en mixto. Para el equipado con llantas de 18 pulgadas 4.3 l/100 km, 4 l/100 km y 4.1 l/100 km respectivamente. Las emisiones de CO2 son de 99 g/km para el de 16” y de 108 g/km para el de 18”. La capacidad de su depósito de combustible es de 57 litros.

En ciudad: el sitio perfecto para sacarle el máximo rendimiento al sistema híbrido

Ahora sí, con el coche en silencio, donde nos habíamos quedado tras haber reseteado los parciales, tras arrancarlo, con el freno pisado, bajamos la palanca del cambio CMP a D (seguro que más de uno ya, con sólo leer CMP está deseando saber qué tal se ha portado). Nos ponemos en marcha. Primeros metros, todo en silencio, parece que vamos flotando mientras el gráfico del cuadro nos muestra como el eje trasero es el que se está ocupando del movimiento.

Primeros metros que se extienden a el primer kilómetro, seguimos en silencio, estoy en ciudad, típico recado matutino y todavía no he gastado nada en gasolina. Así da gusto ir a comprar. En ciudad es donde más vamos a notar las bondades de este sistema, como era de esperar. No será el único sitio, pero eso será más adelante.

El motor de combustión se pone en marcha para recargar la batería, a ratos se desconecta dejando sólo al eléctrico que me acompaña en salidas de semáforo. Circulamos en modo auto, modo en el que arranca automáticamente el 3008 y que se encarga de gestionar sólo la entrada en funcionamiento del motor diésel y el eléctrico. Una importante peculiaridad de este sistema híbrido. En cada cambio de marcha, el motor eléctrico se encarga de mantener el empuje del vehículo, por lo que los típicos cabeceos del cambio CMP de PSA desaparecen por completo. Me gusta.

Al igual que ocurre con un eléctrico puro, como el Peugeot iOn que probé hace ya un tiempo, al soltar el acelerador nos encontramos con una importante retención, fenómeno que nos indica que estamos recargando las baterías, como así lo indica la esfera de la izquierda del cuadro, un indicador, en porcentaje, de la potencia del motor que estamos usando, cuando estamos recargando las baterías o cuando estamos llevando a cabo una circulación ECO. No, no hay cuentarevoluciones. En este coche, tampoco lo eché en falta. Contamos también con sistema Start&Stop.

Dejamos por unas líneas de hablar sobre su mecánica ¿cómo es circular en núcleo urbano con el 3008? La posición de conducción es alta. Como vimos en la primera parte, es cómodo (a pesar de cierta dureza del respaldo), espacioso, estamos lejos del acompañante. Los mandos quedan a una buena distancia. Sobre el tacto de los pedales o la dirección un tacto normal, quizá algo pesada la dirección, pero nada destacable. Sus dimensiones no son las de un utilitario, pero tampoco es algo descabellado y que nos vaya a imposibilitar buscar sitio por el centro, además, estamos acompañados por los sensores de aparcamiento. Buena visibilidad general en sus espejos. Su suspensión si que me transmitió un tarado demasiado duro para un vehículo con cierta orientación familiar, transmitiendo un buen rebote en caso de badén o bache no evitado, minipunto negativo en este sentido.

Bastante útil la posibilidad de circular sólo en modo eléctrico, un ahorro considerable en los trayectos urbanos más cotidianos. La compra, ir a buscar a los niños al colegio… trayectos que siendo cuidadosos con la forma de pisar el acelerador, pueden costarnos 0 euros de combustible. Pero además, no podemos pasar por alto el grado de confort añadido que supone circular sin ningún ruido ni vibración. Si fuera un V8 sería un motivo de queja, siendo un bloque de 4 cilindros diésel, un agradable alivio. Salimos de la ciudad, tras conseguir consumos ligeramente por encima de los 4l/100 km e incluso en trayectos cortos, no representativos por su brevedad, he llegado a recorrer distancias de unos 10 km marcando 2.6 l/100 km en el ordenador de abordo, exprimiendo al máximo el modo eléctrico y buscando la recarga constante de las batería y lo dicho, son sólo 10 km, no es representativo. Hora de afrontar la autovía.

Fuera de ciudad: perdemos la circulación 100% eléctrica, pero ganamos en seguridad con la tracción total

A medida que me voy incorporando, subiendo la velocidad, el motor eléctrico me abandona. Peugeot anuncia que es capaz de alcanzar los 60 km/h en modo eléctrico. Yo me quedé en 50 km/h, pero siendo más dulces aún con el acelerador se pueden conseguir. Aceleramos para incorporarnos y mientras el motor de combustión tira de nosotros, el eléctrico vuelve a hacer acto de presencia para darnos un empujón extra, acto que podemos forzar con el modo sport, donde notaremos una entrega más contundente desde los dos ejes.

Alcanzamos los 120 km/h. Lo veo en el head up display. Ponemos el control de crucero. A esta velocidad el motor eléctrico se desacopla por suponer más un lastre que una ventaja, por lo que ya no tenemos apoyo eléctrico. Una buena insonorización, asientos que ahora acusan algo más la dureza de su respaldo, no hay demasiados ruidos aerodinámicos…

Dejamos la autovía atrás, cogemos un desvío y vamos a esa carretera de curvas que tan bien nos conocemos ¿pensabais que el motor eléctrico sólo era una ventaja en ciudad? Pues principalmente sí, pero también supone contar con tracción a las cuatro ruedas. Asfalto a un lado, abordo una ligera subida en tierra y se nota el apoyo extra del eléctrico. Eso sí, no busquéis trialeras excesivas, los bajos están llenos de cromados y seguro que no queréis llevar el coche lleno de arañazos. La idea es contar con un ligero apoyo en caso de inclemencias metereológicas, no de suplir a un todoterreno.

Dejando a un lado su faceta offroad, la tracción a las 4 ruedas supone un considerable elemento de seguridad. He probado a buscarle las cosquillas mucho a este 3008, a forzarlo hasta el límite en curvas, a intentar sacarlo de la trayectoria, de perder el morro en mitad de una curva mientras derrapan las ruedas… y nada, una estabilidad y un comportamiento ejemplar el de este Peugeot. Aquí es donde me di cuenta de que quizá no hay que decantarse por el 3008 hybrid4 por el ahorro, sino por la seguridad, sobre todo si vivimos en climas fríos y de lluvia habitual.

Si en ciudad habíamos notado bastante el apoyo del motor eléctrico, en autovía quizá nos veamos algo lastrados por el peso extra. Con velocidades mantenidas y climatizador puesto en ciertas ocasiones el consumo en autovía es de6 l/100 km. En mixto, durante la semana que ha estado conmigo, me ha dejado con un 5.6 l/100 km. Teniendo en cuenta que son 1.700 kg de coche no me parece una cifra descabellada.

Toca aparcar el 3008 Hybrid4 y ponernos a analizar el equipamiento, su precio, rivales y sobre todo, sacar conclusiones, pero eso, será en la tercera y última parte de la prueba, así que no os vayáis muy lejos.

En Diariomotor: Peugeot 3008 Hybrid4 a prueba (I)| Peugeot 3008 Hybrid4, el primer híbrido diésel a partir de 33.800€

Vídeo destacado del Peugeot 3008

Imagen para el vídeo destacado del Peugeot 3008 Botón de play

Dame tu opinión sobre este artículo

Ni fu, ni fa
Me ha gustado
¡Muy bueno!

Mario Herraiz

Apasionado del motor, llevo sobre ruedas desde que a los 14 años me monté encima de una moto. Después llegaron los coches, la afición por la fotografía y más tarde el periodismo y con ello la posibilidad de convertir mi pasión en trabajo. Seguir leyendo...

Logo de la marca peugeot

Peugeot 3008

  37.160 €

El Peugeot 3008 es un crossover compacto que está disponible en una única carrocería de 5 puertas y 5 plazas. Tiene un maletero grande y presume de una alta calidad de realización

Ficha 3008
Solicita tu oferta
Cargando...