Déjà vú: esa fue mi sensación la primera vez que lo vi en directo en el pasado Salón de Ginebra. Pero después de habernos puesto por primera vez al volante del nuevo Audi A3 podemos constatar que tras su cara tan familiar subyacen muchísimas novedades y no pocas tecnologías con un único fin, revalidar el éxito logrado a lo largo de más de tres lustros y sobreponerse al surgimiento de fuertes rivales que están llamados a arrebatar el trono de este compacto premium. ¿Lo conseguirán?
2.8 millones de ventas en este tiempo y haber copado una quinta parte de las ventas globales de Audi, son razones suficientes para considerar que el Audi A3 es uno de los modelos más importantes, si no el que más, de la marca de Ingolstadt. En agosto se lanzará el modelo de tres puertas, en menos de un año el de cinco – más conocido como Sportback – y a finales de 2013 habrá sitio para un prometedor sedán que pretende amortizar aún más si cabe una nueva e impronunciable plataforma (Modularer Querbaukasten-MQB) que representa el futuro más cercano del Grupo Volkswagen.
Aún no disponemos de un listado de precios oficiales, pero os podemos adelantar de que en España la versión más básica del Audi A3 (que no estará mal equipada) partirá de los 22.500€.
Tras esta “cara conocida” se esconden muchas novedades
Un vistazo exterior a este nuevo Audi A3 nos revela que en Audi no están para revoluciones. La parrilla ha crecido, la mirada se ha afilado gracias a la nueva iluminación diurna con diodos LED. La oferta de llantas de aleación de entre 16 y 18” es toda una declaración de intenciones. Sus dimensiones permanecen prácticamente intactas, aunque es 12 mm más ancho; la batalla ha crecido 23 mm y el voladizo anterior es ahora más corto buscando un mejor aprovechamiento del espacio y estabilidad.
Bajo esta fachada se esconde la ya mencionada plataforma común de nueva factura y un trabajo de ingeniería que ha requerido un mejor aprovechamiento del aluminio y los aceros de alta resistencia, ambos destinados a mejorar la rigidez, especialmente en puntos críticos de la carrocería y aligerar el conjunto. Con esto y con la nueva generación de motores el ahorro de peso total puede llegar a los 80 kilogramos en algunos casos. No es una diferencia palpable, pero sí sustancial para lograr unos consumos bastante ajustados y una conducción más satisfactoria en combinación de otros factores. Sobre la báscula el nuevo Audi A3 está más cerca de la primera generación que de su directo predecesor, lo cual ya es mucho decir, teniendo en cuenta lo que se ha mejorado en materia de seguridad y equipamiento en 15 años.
Especial mención para el kit de carrocería S-Line, con detalles tan atractivos visualmente como el diseño del frontal con defensas más afiladas y un enrejillado de tipo panel de abeja muy parecido al de los modelos más deportivos de la marca.
Un habitáculo sencillo para el Audi A3, pero elegante y tecnológico
Un interior de contrastes. Entre el diseño sencillo destaca la pantalla del nuevo equipo multimedia MMI que automáticamente se despliega sobre el salpicadero. Los aireadores del sistema de climatización redondos, con marco cromado y un sistema de rejillas que regula la orientación y la energía de la ventilación, aportan algo de deportividad. El centro de mandos del conductor se basa en los controles localizados en un volante muy minimalista y una acertada consola central con un control giratorio de superficie táctil para manejar casi todas las funciones del vehículo, la navegación y el equipo de sonido, a nuestro antojo.
El aporte de distinción o un toque elegante o deportivo llegará de la mano de extras opcionales o niveles de acabado o equipamiento más avanzados: franja central del salpicadero con acabado “3D” o cromado, cobertura de piel en las puertas y la mitad inferior del salpicadero. Las posibilidades son muchas, pero la calidad existente desde la gama inferior Attraction ya es apreciable.
Calidad de materiales, diseño de asientos y buen aislamiento acústico
De serie el nuevo Audi A3 incluye asientos de tela y opcionalmente unos de corte más deportivo con mayor sujeción lateral. Curiosamente estos cuentan con ajustes manuales y eléctricos en la zona lumbar. En todos los casos los asientos cuentan con memoria, es decir, que al plegarlos para acceder a las plazas traseras y volver a desplegarlos estos recuperan su posición inicial. El paquete S-Line incluye asientos mixtos de tela y piel muy agradables, y opcionalmente también existe la posibilidad de asientos completamente tapizados en piel.
A bordo se han ganado algunos centímetros para lograr una mayor comodidad en las plazas delanteras y espacio suficiente para tres pasajeros adultos en las traseras, aunque el asiento central sigue siendo un tanto incómodo sobre todo si optamos a una ventanilla (es opcional) que nos permite comunicar con el maletero para, por ejemplo, portar unos esquíes. El espacio de carga del maletero es de 365 litros y 1.100 litros abatiendo los asientos posteriores en dos piezas.
A priori ya sabemos que la gama de motores ha ganado en refinamiento gracias a su nueva ingeniería, pero a mi parecer el responsable directo del bajo nivel de ruidos que se filtran al habitáculo, ya sea del motor o del contacto de los neumáticos con el asfalto, es el trabajo de aislamiento acústico practicado en la carrocería.
Un avanzado equipo multimedia retráctil sobre el salpicadero
Una de las novedades más interesantes es lo que Audi denomina infotainment móvil. Accionamos el contacto, desde un botón en la consola central, y automáticamente se despliega una pantalla de 7” que se maneja desde una interfaz giratoria y táctil muy práctica y accesible para el conductor con el brazo relajado sobre el reposabrazos. Los cuatro botones que rodean este selector giratorio nos ayudan a movernos por el menú.
Otra novedad curiosa para un modelo de su segmento es la superficie táctil del selector, que nos permite entre otras cosas “dibujar” las letras sobre el touchpad para seleccionar un destino en el navegador, con la ventaja añadida de que no tendremos que desviar la mirada de la carretera. Para este fin también podremos utilizar el sistema de reconocimiento de voz.
Dentro de lo que la marca denomina Audi connect se engloba un universo de posibilidades haciendo uso de una conexión a internet portátil. Servicios como el análisis de la información de tráfico en directo, búsquedas en Google, navegación con cartografía sobre imágenes de satélite reales de Google Earth, conexión a redes sociales como Facebook o Twitter, conocer los eventos programados en la ciudad que nos encontramos o incluso a corto-medio plazo avanzados sistemas de interconexión car-to-car. La mayoría de estos sistemas se irán incorporando y mejorando poco a poco, gracias a la escalabilidad de que goza este dispositivo permanentemente conectado a internet.
Un gran abanico de ayudas a la conducción
En lo tecnológico, no sólo es novedoso el sistema MMI sino también la extensa oferta de ayudas a la conducción disponible. Como en otros modelos superiores de la gama Audi, el A3 dispone de control de crucero adaptativo que acelera o frena para adaptarse a la velocidad pre-seleccionada según lo que haga el vehículo que nos precede, incluso si este se detiene por completo y trabajando solidariamente con el sistema de parada y arranque automático.
El sistema Audi side assist nos advierte de la presencia de vehículos en el denominado ángulo muerto gracias a unos LED estratégicamente situados en los retrovisores exteriores. Según Audi este sistema controla lo que sucede hasta 70 metros detrás de nuestra posición. El Audi active lane assist evita que nos salgamos involuntariamente del carril interviniendo activamente sobre la dirección electromecánica para corregir el rumbo. Este sistema detecta también las señales de tráfico y nos advierte en el equipo multimedia de los límites de velocidad, en combinación de la base de datos del navegador, y la prohibición de adelantar.
La ayuda básica al aparcamiento se compone de una red de sensores ultrasónicos que rodean el vehículo y detectan con eficacia la posición de obstáculos como paredes, columnas y bolardos que delimitan la carretera. Adicionalmente podemos contar con el sistema Audi parking system plus que además incluye cámara posterior y un asistente de aparcamiento automático que nos permitirá efectuar un estacionamiento en hueco que sea al menos 0.8 metros más largo que el Audi A3.
Y como más vale prevenir que curar, el sistema Audi pre sense advierte al conductor si detecta que su grado de concentración ha disminuido, o si se avecina la amenaza de una colisión. En el caso de que la colisión sea inminente automáticamente fuerza una breve frenada que provoca un tirón y alerta a todos los sistemas de emergencia, de forma que en cuanto el conductor accione el freno este ejerza la máxima fuerza de frenada posible.
Mucho que decir y aún no os hemos contado lo más importante: nuestras impresiones al volante del nuevo Audi A3. ¿Nos acompañarán mañana en nuestra próxima entrega de la prueba que tuvimos ocasión de realizar con la presentación del Audi A3 en Mallorca?
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