Carlsson, el preparador, queda bajo control chino. Un 70% de las acciones de este preparador especializado en las flechas plateadas de Mercedes, a pesar de habernos dejado también algún trabajo sobre Citroën, han ido a parar a Zhongsheng Group Holdings, que a pesar de pueda no sonaros a muchos, es una importante firma de concesionarios en China.
Esta unión, de la que desconocemos condiciones, si Carlsson pasará a producir o montar algunas de sus piezas y modelos en este país o si además de la inyección económica supondrá ampliar la red de distribución en China de sus preparaciones, no llega sola, y además de plasmar el acuerdo sobre papel, Carlsson ha dedicado una nueva edición especial a China con el Carlsson C25 LE, una versión preparada del anterior Mercedes SL 65 AMG.
Limitada a sólo 7 unidades, Carlsson ha presentado al C25 LE, una revisión especial para China de aquella preparación que la firma alemana nos mostró hace ya dos años en el Salón de Ginebra y que tenía, y tiene, como base al Mercedes SL 65 AMG. En esta ocasión, frente al presentado en Ginebra, se produce un hecho curioso con su mecánica.
En Ginebra el C25 se mostró con el V12 de 5.5 litros bajo el capó, llevado desde los 517 caballos de origen a los 753 caballos y un par limitado a 1.150 Nm. Cifras capaces de llevar las cerca de 2 toneladas de peso de este Mercedes hasta los 100 km/h en sólo 3.7 segundos.
En esta ocasión, Carlsson ha llevado a cabo una maniobra que me ha resultado cuanto menos curiosa. Según la fuente, el preparador ha dado a estas 7 unidades del C25 LE destinadas a china un nuevo motor. En lugar del V12 de 5.5 litros, se ha puesto en el vano del SL un V8 de 418 caballos. Pero si la rebaja de cilindros y de caballos ha sido considerable, también hay que nombrar la dieta a la que se ha sometido, rebajando el peso total en 180 kg gracias al uso de la fibra de carbono.
No hemos mencionado su kit de carrocería, al que por otro lado ya conocíamos del Salón de Ginebra. Una amenazante mirada frontal acompañada por luces diurnas verticales, un nuevo capó y paragolpes, una imponente toma lateral tras las aletas delanteras, e importantes cambios en su zaga con los cambios en el paragolpes con las cuatro salidas de escape integradas o el alerón tipo lip. Todo un GT de atlético porte derivado del Mercedes SL.
Además se incorpora un nuevo sistema de escape y cada cliente podrá personalizar su edición especial hasta el más mínimo detalle, todo ello por un precio de unos 510.000 euros.
Fuente: Autoblog.nl
En Diariomotor: Carlsson C25, revelado antes de Ginebra