Parece que a los Lamborghini Murcielago no les gustan demasiado las motos. O, más concretamente, a este Lamborghini Murcielago no le gustaban demasiado las motos BMW de este concesionario, ubicado en Mariano Comense, en la provincia de Como (Italia). O quizás es que este Lambo era más ducatista y no soportaba ver cómo la competencia alemana le disputaba ventas a sus queridas criaturas de Borgo-Panigale.
Dejándonos de bromas e hipótesis totalmente ficticias e irreales, lo cierto es que recientemente se produjo este curioso accidente en la localidad italiana, de la que Paolo Tognoli dio testimonio fotográfico en estas fotografías publicadas por los compañeros de autoblog.it. Como os podéis imaginar, los principales protagonistas fueron el Lamborghini Murciélago implicado y buena parte de la exposición de Valli Motorrad, concesionario de motocicletas BMW.
No hay mucha información al respecto del accidente, pero al parecer y según el testigo fotográfico, el conductor del Lamborghini Murciélago circulaba a elevada velocidad, cuando de repente perdió el control del superdeportivo, con tan mala fortuna que fue a embestir contra toda la exposición exterior del concesionario de motos y su escaparate.
No sólo hubo que lamentar cuantiosos daños materiales, ya que casi todas las motos quedaron destrozadas y también el Lambo sufrió daños, sino que además dos personas que estaban en ese momento mirando la exposición de motos en el exterior resultaron heridas. Imaginad el panorama: estás plácidamente mirando una moto en la exposición fuera del concesionario cuando de repente un toro desbocado viene hacia ti a gran velocidad. Da miedo, mucho miedo, sólo de pensarlo.
Afortunadamente estas dos personas no revisten heridas de gravedad. No hubo más heridos, aunque sí, como decimos, cuantiosos daños materiales. Un incidente con máquinas italianas y alemanas de por medio, como si fuese un irónico y desgraciado reflejo de la historia civil y deportiva de ambos países. Aunque, en esta ocasión, la culpa debemos de otorgársela en exclusiva al conductor del Murciélago.
Fuente: autoblog.it
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