Aunque parezca que Estados Unidos es un país que odia al automóvil diésel, no es cierto. Ha habido bastantes vehículos diésel, aunque siempre han estado oprimidos por las duras normativas anticontaminación, que son actualmente más duras que la Euro6 para vehículos diésel. No obstante, los catalizadores selectivos y soluciones como inyectar urea sobre los gases de escape – los llamados motores Clean Diesel – son cada vez más abundantes, dando una segunda oportunidad al diésel en EE.UU.
Durante los seis primeros meses de 2012 los estadounidenses han adquirido 61.214 coches diésel, cifra que no incluye los pick-up heavy-duty como los Ford F-250. Es una gota en el océano de un mercado que ha movido más de 5 millones de coches en la primera mitad del año, pero representa un incremento del 27,5% sobre las mismas cifras del año pasado. Y se espera que los crecimientos sean cada vez mayores: no sería descabellado rozar 150.000 vehículos diésel vendidos en Estados Unidos para fin de año.
Para poner las cifras en perspectiva, durante los 20 últimos meses las ventas de vehículos diésel se han incrementado a razón de doble dígito interanual. En modelos como el Audi A3 las ventas del TDI Clean Diesel suponen el 65% de todos los A3 vendidos en Estados Unidos. Coches de gran volumen como el Volkswagen Passat venden un 20% de sus unidades con motor diésel y más de un tercio de los BMW X5 y Audi Q7 llevan una mecánica de ciclo Diesel en sus entrañas.
Las razones por el aumento de la preferencia por el diésel son claras: los coches de gasóleo ya no son pesadas máquinas con humeantes y vibrantes motores. Ahora son suaves, tienen prestaciones que en ocasiones superan a los de gasolina y tienen un consumo de combustible bajo. Las restrictivas normativas de consumo medio de combustible hace que incluso fabricantes como Chevrolet vayan a incorporar un motor diésel a un vehículo superventas como es el Cruze.
No sólo Chevrolet se lo plantea, el Grupo Chrysler venderá un Grand Cherokee Ecodiesel, Ford ofrecerá una Transit diésel el año que viene y Cadillac también venderá el nuevo ATS con mecánica de gasóleo. Mazda, Mercedes, Volkswagen y Audi reforzarán su oferta y Land Rover, Jaguar, Mini o Kia están pensando en unirse a este rentable club. Aunque por el momento los turismos diésel son sólo el 0,2% del mercado, para 2018 Pike Research estima que dicha cifra será del 12,4%.
Fuente: Autoblog
En Diariomotor: ¿Por qué apenas hay turismos diésel en Estados Unidos?