A un amigo le podría decir que no entiendo que una marca siga vendiendo vehículos aún teniendo una gama anticuada y muy cara. Por mi responsabilidad, probablemente no podría decirlo desde este medio, y si lo hiciera tendría que confiar en estar en lo cierto y aportar suficientes razones que avalasen tal opinión. Por tanto me resulta cuanto menos sorprendente que el responsable de Mitsubishi en Australia haya declarado que no entiende por qué la gente compra sus vehículos si “son anticuados y los precios demasiado elevados”. En fin, lo que según el refranero español podría definirse como “sacar los pies del tiesto”, hacer unas declaraciones inoportunas dada su posición.
La gama de vehículos australiana es similar a la de nuestro país, con la diferencia de que allí cuentan con modelos específicos que no se comercializan en Europa. Mitsubishi iniciaba su importación a España en 1986 y se constituía como marca (con capital mayoritario de Mitsubishi Motors) en 1992. A lo largo de estos años, como todas las marcas, ha vivido altibajos. Pero llegados a este punto me hago la siguiente pregunta respecto a la marca en nuestro país, ¿tiene Mitsubishi una gama anticuada? ¿qué le espera en un futuro próximo?
Mitsubishi Lancer, Colt y Mirage: presente y futuro
A día de hoy es difícil ser competitivo en un mercado sin un compacto de referencia. Aparentemente el Mitsubishi Lancer Sportback debería cumplir ese papel, pero sigue viéndose un tanto limitado por una gama con pocas opciones y únicamente una mecánica diésel y una competencia feroz moderna con un abanico superior de opciones. A su favor tiene la imagen de marca del Lancer EVO que inteligentemente trató de extender Mitsubishi a lo largo de toda su gama, con detalles estéticos muy atractivos como la parrilla frontal.
Por debajo, el Mitsubishi Colt también cesa su producción para dar paso a un nuevo utilitario global que ya se ha presentado como Mitsubishi Mirage, primo hermano del Nissan Micra, dado que la marca también ha aunado fuerzas con Nissan en un intento más por mejorar su competitividad.
Mitsubishi ASX y nuevo Outlander: la esperanza del todocamino
A día de hoy el modelo de la marca que copa un mayor volumen de ventas en España es el Mitsubishi ASX. Sin ir más lejos por cada cuatro Mitsubishi comercializados en lo que llevamos de año, tres eran un Mitsubishi ASX. Es un acierto que Mitsubishi haya tomado presencia en un segmento al alza en Europa como este, aprovechándose además de la imagen y el prestigio que han ganado a lo largo de las últimas décadas por vehículos todoterreno tan importantes como el Montero, o sin ir más lejos el Mitsubishi Outlander.
Hablando precisamente de este último, el Mitsubishi Outlander ya está listo para una nueva generación presentada este mismo año que pretende destacar sobre todo por la eficiencia de una nueva generación de motores con emisiones por debajo de los 130 g/km de CO2 y una nueva imagen de marca que aparentemente abandona el estilo de parilla deportivo impuesto para emular al desaparecido Mitsubishi Lancer EVO.
La chispa de Mitsubishi es el futuro del vehículo eléctrico
Aunque no fuera el momento ni el lugar, tal vez las desafortunadas declaraciones del responsable de Mitsubishi en Australia no estuvieran tan desencaminadas de la realidad. En estos momentos Mitsubishi está inmersa en un proceso de reestructuración de su estrategia internacional, que pasa básicamente por la comercialización de modelos globales y el fin de la producción de modelos que tan sólo se distribuyen en algunos mercados concretos, el impulso de los vehículos eléctricos e híbridos y la reorganización de su actividad industrial (recientemente se confirmaba el fin de la producción en Europa).
Al Mitsubishi i-MIEV ya en los concesionarios, y que durante el tiempo en que se mantuvieron en producción fue compartido con Citroën C-Zero y Peugeot iOn, se unirá el “más difícil todavía”, un Mitsubishi Outlander Plug-In que contará con una autonomía eléctrica de 50 kilómetros.
Fuente: Autoevolution
En Diariomotor: Mitsubishi dejará de fabricar en Europa | Mitsubishi reestructura su estrategia global