Aunque parezca que durante los últimos meses el protagonismo de la gama Mini se lo han llevado los modelos más grandes y menos “Mini” de la historia, el Countryman y recientemente el tres puertas Paceman, no nos olvidemos de la existencia de una bien nutrida oferta de modelos pasionales, deportivos y – si me lo permiten – de capricho, de biplazas Mini. Las siglas JCW nos dan acceso a un trío en el que cada cual es más agresivo e interesante que el anterior: Mini John Cooper Works Coupé, Mini John Cooper Works Roadster y por último el recién presentado Mini John Cooper Works GP.
El corazón de todos ellos sigue siendo el motor 1.6 twin-scroll Turbo del Grupo BMW y algo más de 210 CV de potencia, dependiendo del modelo que se trate. A pesar de que el nexo en común son sus dos plazas, cada uno tiene su razón de ser, desde el coupé más estilizado y llamativo de todos, hasta el Mini prácticamente de carreras y circuito homologado para la calle, pasando por supuesto por un descapotable de techo de lona. Un dato muy interesante, los tres practican el 0 a 100 km/h en una décima de diferencia: 6.3-6.4 segundos.
De serie los tres son manuales, aunque tanto el Coupé como el Roadster pueden optar a un cambio automático por aproximadamente 3.000€ más.
Mini John Cooper Works Coupé: un pequeño deportivo desde 33.400€
Del trío que os presentamos el Mini Coupé es el más económico de todos y el primero que abandonó el diseño tradicional del Mini con carrocería compacta y sin voladizo posterior, para optar al estilizado diseño de un coupé de los de toda la vida. Se caracteriza sobre todo por su línea de techo extremadamente baja con un voladizo trasero y sendos spoiler, uno sobre la tapa del maletero y otro en la caída del techo, que le confieren un diseño de “visera” muy peculiar.
Mini trata de satisfacer con este modelo a aquellos que buscan un deportivo pequeño, sin necesitar más de dos plazas, y con un espacio de carga bastante decente. Sin ir más lejos el voladizo posterior no da acceso al espacio de carga por una tapa tradicional sino un gran portón, similar a los Mini Cooper convencionales.
Mini John Cooper Works Roadster: descapotable y biplaza desde 35.650€
En un intento, tal vez, de demostrar al mundo que ellos también pueden tener su propio Miata, o al menos un pequeño deportivo descapotable que en ciertos aspectos (y no todos) pueda seguir la filosofía del Mazda MX-5, el Mini Roadster se convirtió en la alternativa de dos plazas al Mini Cabrio. No deja de ser un Mini Coupé que ha sustituido su techo fijo por uno de lona manual que se puede plegar sin bajarnos del habitáculo. No obstante es todo un acierto optar por este antes que por un Mini Cabrio, cuyas plazas traseras son muy escasas y poco prácticas.
En estos tiempos un techo descapotable manual parece poco menos que un anacronismo, aunque la ventaja está en la ausencia de un dispositivo de apertura y cierre automático con el consecuente peso añadido y la limitación del espacio que supone. Gracias a ello el Mini Roadster, salvo por la presencia de una tapa de maletero con una boca muy estrecha, no ha perdido demasiado espacio respecto al Mini Coupé.
Mini John Cooper Works GP: un deportivo de carreras para el día a día
Dado que ha sido el último en presentarse, a día de hoy desconocemos exactamente su precio, pero si tenemos en cuenta su exclusividad (sólo se venderán 2.000 unidades) y que el Mini John Cooper Works básico ya cuesta 31.700€, no nos quepa la menor duda de que será el más caro del trío y con diferencia. A diferencia del resto, este modelo tendrá una tirada limitada que lo convierte casi de pleno en un clásico recién salido de la fábrica.
Su carrocería de silueta compacta, hace que sea menos atractivo visualmente que el Mini Coupé y el Mini Cabrio, pero esta carencia la suple un kit de carrocería muy deportivo y agresivo y adhesivos de serie por toda la carrocería propios de un deportivo de carreras.
Al renunciar a sus plazas traseras y haberse instalado una barra que refuerza la rigidez del chasis, probablemente este Mini sea el que pueda presumir en esta comparativa de un mayor maletero puesto que el vano existente para alojar carga es de un volumen considerable. Cuenta con una bandeja vertical que separa la carga de los ocupantes. En ese sentido y pese a su concepción deportiva y únicas dos plazas, se podría decir que es el más práctico de los tres.
Fuente: Mini
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