El Renault Clio 2013 estuvo muy bien representado en el Salón de París 2012, con toda su artillería. Tanto la tradicional versión de cinco puertas del utilitario francés, como la versión deportiva Renault Sport o la familiar Grand Tour estuvieron presentes en el evento parisino para mostrar una completa gama desde el inicio. Debido a que la versión de cinco puertas ya era conocida con anterioridad, quizás el mayor protagonismo se lo llevó la variante RS o la carrocería Grand Tour, pero todas ellas tuvieron su hueco.
El Renault Clio 2013 estrena nueva generación y únicamente se venderá con carrocería de cinco puertas. Adiós a la versión de tres puertas presente en el modelo hasta ahora, aunque hay que decir en su favor que las puertas traseras están muy bien integradas y el tirador de apertura de las mismas está integrado en el marco de la puerta trasera, de forma semioculta, que nos puede recordar a un tres puertas tradicional. Esta solución también se adopta en el Clio Grand Tour, que cuenta con personalidad propia en su parte posterior y más maletero, mientras que el Renault Clio RS destaca, sobre todo, por su estética deportiva y su nuevo motor turboalimentado.
Renault Clio 2013, primeras impresiones en vivo desde París
Como nos cuenta nuestro compañero Juanma Nuevo, que ha podido conocer en profundidad el nuevo Renault Clio en París, esta nueva generación del utilitario francés cuenta con una estética agradable, atractiva y moderna, asumiendo mayores riesgos en el aspecto estético que otros modelos. Aunque ya no sea algo especialmente original, el detalle de los tiradores traseros camuflados en las puertas son también aquí una solución muy interesante, haciendo que la carrocería de tres puertas no se vaya a echar especialmente en falta, a la vez que la funcionalidad y fácil acceso continúan intactos.
Volviendo a su exterior, en su parte delantera destacan sus ópticas y su pronunciada parrilla, presidida por el rombo (de generoso tamaño). Destacan también las luces diurnas LED a ambos lados de la citada parrilla, mientras que en la parte posterior la forma que dibuja la luneta trasera destaca por sí misma. Cobran protagonismo las molduras laterales inferiores en plástico, siguiendo la tendencia iniciada en el actual Mégane. Otro aspecto llamativo es que cuenta con múltiples posibilidades de personalización tanto de interior como exterior para seguir atrayendo a clientes jóvenes, con variadas combinaciones en colores o en diseños de llantas, por ejemplo.
En lo relativo al interior, aquí también hay novedades. La habitabilidad de las plazas traseras sigue sin ser de lo más destacado y no parece haber mejorado especialmente, aunque el maletero sí ha crecido ligeramente y ofrece un volumen notable para su segmento, con formas muy aprovechables, aunque su acceso para colocar objetos es ligeramente elevado con respecto a su parte baja. Volviendo al habitáculo, hay un claro paso atrás en los materiales empleados, principalmente en los que cubren el salpicadero.
Detalles como plásticos blandos o de tacto agradable brillan por su ausencia en el nuevo Clio, aunque esto es tónica habitual en el segmento polivalente. Las versiones que llevan inserciones metálicas en volante y diversas partes del habitáculo, otorgan un toque de modernidad, pero no colaboran en eliminar esa sensación de baja calidad, que se acrecienta cuándo nos fijamos en que la palanca de cambios y gran parte de la botonería llevan usandose en la marca desde hace prácticamente una década. Ésto último sucede en casi todas las marcas, pero no vienen en conjunto con el resto de defectos.
Por otro lado, las combinaciones de colores ayudan a dar una impresión más positiva y alegre en su interior, combinando volante, salidas de aireación, base para la palanca de cambios y hasta las molduras de las puertas en el color escogido (por ejemplo, en negro brillante o en rojo, como podéis ver en las imágenes). La consola central está presidida por una gran pantalla multimedia que puede hacer las funciones de navegador, mientras que la instrumentación apuesta también por la modernidad, combinando las clásicas agujas a ambos lados y, en el centro, instrumentación digital para el velocímetro.
Renault Clio RS y Renault Clio Grand Tour, las otras dos caras de la moneda
Por último, damos un pequeño repaso a las dos caras opuestas de la moneda: más deportividad o más funcionalidad, características por las que apuestan, respectivamente, el Renault Clio RS y el Renault Clio Grand Tour. El primero es la nueva creación de Renault Sport, y en términos mecánicos hay un gran cambio con respecto a la generación saliente. Además de que el Clio RS 2013 sólo se venderá con carrocería de cinco puertas (el anterior sólo estaba disponible con la de tres), la apuesta por la turboalimentación es un hecho.
El nuevo Clio RS cuenta con motor 1.6 Turbo, con los mismos 200 CV de la generación anterior, pero carácter bien distinto por su propia naturaleza. Además, trabajará en conjunción con un cambio automático EDC de doble embrague, con el objetivo de reducir consumos sin perder placer de conducción o eficacia. Tampoco falta el chasis Cup, más radical, o la estética diferenciada con respecto al resto de la gama, tanto en exterior (llantas de aleación en 17” o 18”, difusor trasero) como en interior.
El Renault Clio Grand Tour busca contentar en otros aspectos, como en la funcionalidad o polivalencia, gracias a su mayor maletero. En cotas interiores apenas hay diferencias con respecto a un Clio normal, pero sí las hay en su parte trasera, gracias a esta carrocería familiar, con un maletero de mayor tamaño (430 litros) gracias a sus superiores dimensiones (4,26 metros de longitud) y una estética diferenciada y bien resuelta en su parte posterior. Aquí el maletero es más protagonista, gracias a su mayor facilidad de carga (suelo plano y boca rebajada).
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