Habiendo analizado ya con más detenimiento las novedades del nuevo Renault Clio por dentro y por fuera en la primera parte de este nuestro análisis tras una prueba de conducción por las carreteras de la Toscana, llega el momento de detenernos en el aspecto dinámico y en el funcionamiento de los dos motores más potentes que se comercializarán de inicio con el lanzamiento del nuevo Renault Clio 2012.
En nuestra prueba tuvimos ocasión de probar dos motores, el Renault Clio TCe 90 de gasolina (en amarillo en nuestras fotos) y el Renault Clio dCi 90 diésel (en rojo en nuestras fotos). Ambos estaban dotados de cambio manual de cinco velocidades y el nivel de acabado y equipamiento tope de gama, que en España será Dynamique y Expression respectivamente. También incluían de serie sistema de parada y arranque Start&Stop y algunas medidas de ahorro como el botón eco.
Dinamismo del nuevo Renault Clio: dirección, chasis y frenos
A falta de una comparativa con mayor detenimiento, la primera impresión de este nuevo Renault Clio nos confirma que su chasis sigue manteniendo un punto de rigidez y aplomo superior al de otros utilitarios. En este caso cuenta con unos amortiguadores que tienden a ser algo secos y duros, pero no tanto como en su predecesor, y al menos aparentemente absorbe mejor las irregularidades del asfalto.
La dirección filtra cada vez más la información, algo cada vez más común en cada nueva generación de un utilitario o compacto que se presenta, pero en apariencia el manejo del volante es más directo gracias a una mejora de la desmultiplicación del giro de la dirección. En lo que a capacidad de giro en espacios estrechos el Renault Clio 2012 no ha mejorado respecto a la versión de cinco puertas de su predecesor, con unas cifras prácticamente idénticas y un diámetro de giro entre aceras y muros de 10,6 y 11 metros respectivamente.
El equipo de frenos, al menos de los modelos de hasta 90 CV de potencia que se comercializarán de inicio con el lanzamiento del Renault Clio, se basa en discos delanteros de 258 milímetros y tambores traseros. A mi parecer su funcionamiento es óptimo y la frenada tiene suficiente fuerza y constancia para un turismo de su tamaño y potencia, además ni las ruedas se bloquean en exceso ni el ABS es un molesto invitado que aparece continuamente cuando menos te lo esperas. Renault justifica los tambores traseros por ser compatibles con el ESP y el asistente de arranque en pendientes, tener un coste menor y ser más que suficientes para frenar un utilitario que roza la tonelada; tres razones con las que estoy totalmente de acuerdo.
Energy dCi 90 S&S: probamos el diésel más potente
El motor de gasóleo más potente, de momento, será el Energy dCi 90 S&S basado en el bloque de 1.461 cm3 que por méritos propios se ha convertido en uno de los más importantes de la gama pequeña y compacta de Renault. La elección de este motor debería responder única y exclusivamente a la necesidad de recorrer muchos kilómetros anualmente, puesto que sus consumos teóricos no difieren en más de un litro respecto a la alternativa de gasolina (aunque la variación en las reales será considerablemente mayor) y las prestaciones de este último no se resienten excesivamente en tanto el modelo de gasolina es 62 kilogramos más ligero.
Lo mejor del dCi 90 está en un consumo homologado de 3,6 litros/100 kilómetros. Nuestra prueba transcurrió durante la mayor parte del tiempo en autovía y carreteras convencionales, con un breve lapso de tiempo de conducción urbana, hasta cubrir aproximadamente 100 kilómetros con unos consumos que oscilaron entre los 5 y los 6 litros/100 kilómetros. Durante todo el trayecto se mantuvo activado el botón eco.
El botón eco nos ayuda a ahorrar combustible
El botón eco presente en nuestra unidad de prueba, estaba escondido entre el asiento del conductor y el acompañante, y aunque no muestra un cambio sustancial – aunque haberlo haylo – en el recorrido del acelerador ni aparentemente en las prestaciones sí permite un ahorro teórico de hasta un 10% de combustible gracias a pingües ajustes de la electrónica que optimizan la entrega de potencia del motor y a un uso más razonable del equipo de climatización. El avisador visual que nos indica el momento óptimo para aumentar de marcha también adelanta su aparición.
Energy TCe 90 S&S: un tricilíndrico muy pequeño pero efectivo
Si el funcionamiento del diésel era óptimo, dentro de lo esperado, el TCe 90 es el que más nos ha gustado por las ventajas de este diminuto motor de 898 cm3 y tres cilindros capaz de obtener unos consumos en ciclo mixto homologado de 4,5 litros/100 kilómetros. Como referencia el 1.2 16 válvulas de 75 CV atmosférico, que es el motor de acceso a la gama Clio, homologa 5,5 litros/100 kilómetros. El TCe 90 es muy recomendable por consumos y por el mero hecho de que su papel en situaciones críticas que requieren de ciertas dosis de aceleración y recuperación, es más que aceptable.
En cuanto a suavidad evidentemente gana respecto al diésel y no pierde tanto respecto a cualquier motor de gasolina de cuatro cilindros. La rumurosidad y la presencia de vibraciones y ruidos indeseables a baja carga está presente pero no llega a ser muy molesta, ni tampoco es muy ruidoso cuando el cuentavueltas se acerca a la zona roja del marcador. En general los defectos de un tres cilindros se aprecian pero en ningún caso son lo suficientemente importantes y notables como para empañar el buen dato del consumo y unas prestaciones que no difieren excesivamente respecto a las del diésel de igual potencia (tarda sólo 5 décimas más en cubrir el 0 a 100 km/h que el dCi de 90 CV).
La otra alternativa existente de gasolina es un 1.2 16 válvulas de 75 CV atmosférico, vetusto y anticuado al lado de este eficiente tres cilindros pero con la ventaja añadida de que 900€ (a igualdad de equipamiento) lo separan del Energy TCe de 90 CV. Salvo ajuste máximo del presupuesto o búsqueda de una versión con un equipamiento muy básico (Aunthentique), la opción del TCe de 90 CV siempre me parece más recomendable y versátil por sus bajos consumos y lo bien que resuelve tanto situaciones de conducción urbana como de carretera y autovía y autopista.
Conclusión
En Tecmovia te desvelamos como funciona el sistema de navegación y multimedia R-Link y su tienda de aplicaciones.
Lo que más nos ha gustado del Renault Clio es su diseño exterior, que más allá de gustos y preferencias personales ha ganado en calidad gracias al diseño de las defensas, el difusor trasero o los bajos con una protección de plástico y cromados. También nos ha gustado mucho su diseño interior práctico y moderno, desenfadado e incluso juvenil.
A nivel dinámico no hay una evolución sustancial salvo en lo que respecta a los motores, con mejoras que hacen de los diésel dos bloques muy austeros y ahorradores y sobre todo la introducción del motor tricilíndrico TCe 90.
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