Nuestros austriacos favoritos han presentado en el EICMA de Milán su nueva KTM 1290 Super Duke R. Se trata de una moto tipo “streetfighter”, una auténtica depredadora situada en la cúspide de la cadena alimenticia de las motocicletas. Aunque sólo es un prototipo, se trata de un moto con visos de entrar en producción. Una moto que hace palidecer a las deportivas japonesas de alta gama, que deja en ridículo a las Ducati Monster y que se ríe en la cara de su hermana, la KTM RC8. Es precisamente de la KTM RC8 1190 de donde toma su motor V-Twin de casi 1,2 litros.
Sólo que eleva la cilindrada hasta casi 1,3 litros. Su potencia se aleja de los 175 CV de la RC8, y se acerca peligrosamente a los 200 CV. Es uno de los bicilíndricos más potentes que se han visto en una moto. No obstante, lo que más llama la atención es el carácter deliberadamente bestia de esta máquina. Casi todos los elementos están derivados de la competición, su exclusivo sistema de suspensión con horquilla invertida hasta el sistema de escape Akrapovic con dos tubos de escape asimétricos, pasando por sus llantas ultraligeras.
El equipo de frenado se deriva también de los circuitos, y está firmado por Brembo. Cuenta con un sistema de control de tracción y ABS, pero ya sabemos que una moto como esta es para llevar sin dichos controles, por lo que son 100% desconectables. Ahora bien, no creo que sea conveniente jugar con fuego en el caso de esta Super Duke, porque puede morder, y mucho. La facilidad que tiene para quemar rueda y un peso en vacío que se promete inferior a los 150 kg hacen de esta moto una máquina sólo apta para motoristas avanzados.
Es más, sólo hay que escuchar su rugido y comprobar sus prestaciones en el vídeo que ha publicado KTM. Pone los pelos de punta, en el mejor sentido de la expresión. Esta máquina va acompañada de una imagen muy característica, ese estilo supermoto agresivo que KTM ha completado con una tonalidad bicolor, con la presencia destacada del clásico color naranja. El chasis de acero va rodeado de multitud de pieza de fibra de carbono. No se me ocurren más adjetivos, ¿qué más se puede pedir de esta máquina?
Una última cosa, subid el volumen antes de ver el vídeo. Hacedme caso.
Fuente: autoevolution
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