Tras desgranar los detalles de diseño, calidades y ergonomía del Jeep Grand Cherokee en la primera parte de la prueba, seguidos de un análisis del comportamiento en campo y asfalto en la segunda, nos hemos encontrado con un coche cómodo, amplio y confortable, que sorprende en ciudad pero prefiere los trayectos en línea recta en carretera y las dificultades no extremas en campo.
Veamos ahora cuales son sus cartas en lo que a equipamiento se refiere, para cerrar la prueba con los precios del Jeep Grand Cherokee 3.0 CRD Limited y poder compararlo con diferentes rivales de su segmento. Para terminar, intentaremos identificar el público objetivo de nuestro vehículo en un resumen final. Vamos allá, pues, con las últimas conclusiones.
Equipamiento y precios del Jeep Grand Cherokee 3.0 CRD Limited
La verdad es que el equipamiento del Grand Cherokee es realmente completo y es aquí donde más fuerte pisa este coloso americano. En la versión Limited, que es la intermedia de la gama, cuenta con una lista tan larga de elementos de confort que resulta difícil recopilar todos y cada uno de ellos. Vamos a intentarlo.
De serie por lo que respecta a sonido y conectividad, tenemos el sistema multimedia Uconnect Tunes con radio CD/DVD/MP3, disco duro de 30 GB y pantalla táctil de 6,5 conectado a 9 altavoces con subwoofer y amplificador de 506W. Tiene conectividad por Bluetooth para teléfono que incluye streaming de música, así como toma auxiliar y USB.
Como elementos de confort, tenemos tapicería de cuero, entrada y arranque sin llave, clima bizona, sensor de lluvia y luces, cuatro asientos calefactables, regulación eléctrica integral de volante y asientos delanteros (con dos memorias en el conductor), sensores de aparcamiento delanteros y traseros y cámara de visión trasera. Los faros delanteros son Bixenon con ajuste automático en altura con función Smartbeam.
Como elementos de seguridad, incorpora llantas de aluminio de 18”, control de tracción y estabilidad, asistente de arrancada en cuestas, control de balanceo del remolque (sea lo que sea eso), control de descensos, todos los airbags del mundo y monitorización de la presión de los neumáticos.
El sistema de tracción es el denominado Quadra-track II, el sistema de gestión de la tracción se llama Select-Terrain y en la unidad probada contábamos con la opción del fantástico techo solar panorámico practicable (1.649€) y el motor era la versión de 241 CV (+3.434€ con respecto a la versión de 190 CV).
Con todo ello, el precio del Jeep Grand Cherokee 3.0 CRD Limited 241 CV que hemos probado durante la última semana asciende a 60.906€ teniendo también en cuenta el coste del color azul marino metalizado (+957€) que le sentaba realmente bien, por cierto. Se hace difícil echar en falta algún elemento más en la larga lista, salvo tal vez el navegador, la suspensión neumática y el sistema de tracción Quadra Drive II del acabado Overland.
Posibles rivales del Jeep Grand Cherokee 3.0 CRD Limited
Una vez analizado a fondo el vehículo, nos queda identificar sus posibles rivales en el mercado para intentar situarlo frente a la competencia. Antes de probarlo tenía algunas dudas, pero ahora tengo bastante claro que los rivales del Jeep hay que buscarlos, dentro del segmento de todoterrenos premium, entre aquellos más orientados al asfalto y al confort que al uso extremo fuera de él.
La razón es que tanto el aspecto externo con cromados frágiles y estética de lujo, como los interiores en madera y cuero combinados con sus talante rutero y su competencia sin brillantez off-road me hacen pensar en el Grand Cherokee como un compañero de viajes confortables, pero no como el vehículo al que subirse con los pies llenos de barro para cruzar un caudaloso río o desafiar pendientes extremas en tres ruedas. Para eso ya está el Wrangler, en todo caso.
Por el dinero que cuesta nuestra unidad de pruebas, esos 60.906€ mencionados anteriormente, deberíamos encontrar en el mercado una abundante oferta de vehículos de similares dimensiones y características, pero resulta que no es tan fácil como parece.
Comenzando por el Mercedes Clase M 250 BlueTEC 4MATIC, vemos que ese importe nos da acceso al modelo más básico de la gama, pero tendremos que gastarnos bastantes miles de euros más para igualarlo en equipamiento con el Jeep. El Mercedes, que parte de un precio idéntico al del Jeep antes de empezar a marcar opciones, ofrece el techo solar por 2.539€, y los asientos calefactados delante y detrás por otros 1.000€ más, por poner sólo dos ejemplos.
El BMW X5 xDrive 3.0d parte ya de los 63.100 € antes de empezar a hablar de los múltiples accesorios (regulación eléctrica de asientos delanteros 1.356€, faros de xenon 1.121€ y un larguísimo etcétera) que lo igualarían al equipamiento del Jeep, a la misma velocidad que lo alejarían de él en precio.
Es verdad que tanto el Mercedes como el BMW pesan 200 kg menos que el Jeep, cuentan con cambios mucho más modernos y mejoran sus consumos. En el caso del BMW, las prestaciones también son superiores y en el caso del Mercedes, con sólo 204 CV en su versión básica de 4 cilindros y comparable en precio, se queda atrás en el apartado prestacional. En cualquiera de los dos modelos, los acabados y calidades son superiores, pero habría que desembolsar no menos de 10.000€ adicionales en extras para ponerlos a un nivel comparable de equipamiento. Después de jugar un buen rato con sus configuradores web, creo que me estoy quedando incluso corto.
Otro modelo que merece la pena considerar, aunque la lista no pretende ser exhaustiva, es el Audi Q7 Advance 3.0 TDI quattro tiptronic, de 204 CV, cuyo precio arranca en los 58.310€. Con la misma filosofía que sus compatriotas de Mercedes y BMW, la simple selección de asientos de cuero calefactados incrementa la factura en más de 4.000€, cualquier color metalizado vale 1.205€ y los asientos delanteros eléctricos con memoria en el conductor suman otros 1.675€. Este es sólo el comienzo de una larga lista que nos llevaría bastante más allá de los 70.000€ en menos de lo que se tarda en decir “Jeep”… y con casi 40 CV menos.
Cambiando de marca nuevamente, podemos pensar en un Volkswagen Touareg V6 TDI con 204 CV, 200 kg menos que el Jeep, consumos inferiores y prestaciones también inferiores. En este caso, existe actualmente una edición especial denominada Unlimited que por 56.600€ trae un equipamiento bastante completo. Tal vez no incorpore todos y cada uno de los elementos del Jeep y sea casi un segundo más lento en aceleración de 0 – 100 km/h, pero sus calidades son claramente mejores y probablemente sería el rival más a considerar ahora mismo.
Las versiones de potencia similar al Jeep en Mercedes, Audi y Volkswagen se van de precio antes de empezar a equiparlos, como le pasa al BMW, aunque este no ofrece ya nada inferior a 240 CV diésel. Todo ello deja al Jeep bastante solo en un punto del mercado en el que sus rivales alemanes prefieren no competir, probablemente en una inteligente decisión orientada a mantener intactos sus márgenes.
Descarto otros rivales mucho más camperos como el Toyota Land-Cruiser o el Land Rover Discovery porque su enfoque es bastante más agresivo fuera de la carretera y entiendo que los usuarios potenciales de estos vehículos son diferentes. Dicho esto, también es cierto que entrarían más fácilmente en el rango de precios comparable que cualquiera de los modelos anteriores y subirían por las pendientes con las que el Jeep no pudo casi con toda seguridad. Su comparación, en cualquier caso, sería más justa frente a un Grand Cherokee Overland, mejor armado para los retos más difíciles.
Por último, un Volvo XC90 se quedaría también algo fuera de juego en esta comparativa, aunque sólo sea porque su motor diésel más potente alcanza los 200 CV justos y lleva en el mercado desde tiempo inmemorial. Por tamaño y precio, sí podría competir, pero las diferencias entre ambos son tan acusadas, empezando por su estilo, que me cuesta imaginar un posible comprador que dude entre uno y otro.
Resumen y conclusiones
Hemos pasado una semana con nuestro Jeep Grand Cherokee 3.0 CRD Limited de 241 CV, en la que hemos recorrido casi 1.000 km y afrontado todo tipo de situaciones climatológicas y orográficas. Tras esta completa experiencia, el análisis de sus características principales y de sus rivales directos, estamos en condiciones de sintetizar lo que ofrece este vehículo y deducir el tipo de clientes a los que podría encajar su oferta.
En síntesis, se trata de un rutero muy amplio, muy confortable, muy bien equipado, muy potente y con un precio realmente competitivo frente a sus rivales europeos, que tienen que renunciar a 40 CV, a todo su equipamiento o ambas cosas para igualarlo en precio. Con todo esto en la mano, si la estética y la filosofía del modelo nos encaja, no parece una mala opción después de todo, habida cuenta de que es bastante compatible con el uso off-road no extremo y su uso en ciudad es bastante agradable, aunque costoso.
En el lado negativo, también ha quedado claro que acabados y materiales están un escalón por debajo de sus rivales europeos, que la dinámica en curva (especialmente sobre mojado) no es precisamente su punto fuerte y que el convertidor de par de tan sólo cinco marchas estropea bastante un motor al que convierte en más tragón y ruidoso de la cuenta, al combinarse también con una masa desplazada de auténtico peso pesado.
La decisión de compra, por tanto, estaría entre la fantástica combinación de tamaño, imagen, prestaciones, equipamiento y precio que el Jeep ofrece o alternativas mejor rematadas, más modernas, dinámicas y eficientes pero que palidecen en prestaciones y precio frente a su rival americano.
Lo mejor
Amplitud y confort
Equipamiento más que completo
Precio muy competitivo
A mejorar
Caja de cambios fuera de época
Detalles de calidad y acabados
Comportamiento en curva
En Diariomotor: Jeep Grand Cherokee
