El BMW Isetta fue un microcoche urbano producido por BMW durante los años 50, una simpática anécdota en la historia de un fabricante entregado a la dinámica y las altas prestaciones desde su nacimiento. Curiosamente, su origen fue Italia, y tras fabricarse en España, la licencia terminó en manos de BMW. De serie, este “coche huevo” llevaba un pequeño motor monocilíndrico de 247 cc, que desarrollaba 12 CV, suficientes para mover su peso de solamente 350 kg. Podía llevar a dos pasajeros en su interior.
En 1998 Hot Wheels lanzó su famoso modelo Whatta Drag, una versión dragster del pequeño Isetta, equipado con un gigantesco motor que propulsaba una única rueda trasera. En 2005, Bruce Weiner – dueño del curioso Weiner Microcar Museum – encargó a Evermoor Engineering la construcción de un Whatta Drag real, como estrella de su museo. Por si no había quedado claro, estamos hablando de Estados Unidos. El BMW Isetta Whatta Drag es real, y en apenas dos semanas será subastado por RM Auctions.
Hemos visto preparaciones radicales para vehículos BMW, que duplican o triplican la potencia de serie, pero nunca algo tan desmesurado como este Isetta. Aunque la carrocería sigue siendo la misma con la que el Isetta nació, se le ha acoplado un subchasis de factura artesanal al microcoche, sobre el que se ha montado un gigantesco motor big-block Chevy 502, diseñado para el drag-racing. Con sus ocho litros de cilindrada, genera unos increíbles 730 CV.
El Whatta Drag es 60 veces más potente que la máquina que emplea de base. Toda la caballería pasa a la rueda trasera mediante una caja de cambios manual de dos relaciones, diseñada especialmente para esta máquina. La rueda trasera monta un neumático Sumitomo HTRZ II, preparado para el drag racing. Las ruedas delanteras llevan neumáticos BF Goodrich G-Force y en su interior un sistema de frenado manufacturado por AP Racing.
Todo el brazo trasero lleva un enorme alerón, más alto que el propio coche. Esta máquina desproporcionada se subastará el día 16 de febrero, por un precio que podría llegar a alcanzar los 75.000€. Ahora bien, la propia descripción de la subasta dice que no es un coche que se deba usar, ni en carretera ni en circuito. El tremendo par motor puede convertirlo en una máquina incontrolable si se conduce de manera agresiva. Es por ello que recomiendan usar el BMW Isetta Whatta Drag sólo para shows o la mera contemplación.
Fuente: autoevolution
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