¿Qué podemos considerar un coche rápido? Antaño era cualquiera que hiciese el 0 a 100 km/h en menos de 10 segundos y superase los 200 km/h, hoy en día tendríamos que considerar a cualquier coche que haga el 0 a 100 en menos de cinco segundos. Hoy por hoy, incluso algunos coches diesel lo consiguen, sin ir más lejos, el BMW M550d. No obstante, cualquier vehículo con semejantes credenciales es caro, y supera con holgura los 60.000€ de precio.
Si queremos máquinas realmente rápidas, que bajen de los 4 segundos en el 0 a 100 km/h y demuelan nuestro cuello cada vez que hundamos el pie derecho, hay que prepararse para pagar más de 100.000€ en máquinas superdeportivas como un Audi R8 V10 o un Mercedes E 63 AMG S-Model. No obstante, ¿es necesario pagar semejantes fortunas por estos vehículos? ¿Podemos recibir las mismas sensaciones por el mismo precio de un compacto nuevo?
Sí, es posible y os vamos a mostrar una lista de vehículos en los que vivir emociones realmente fuertes por una tercera parte del coste de un superdeportivo. Nuestro límite son 30.000€. Ahora bien, vamos a hacer una pequeña trampa, y lo cierto es que no nos ceñiremos a las cuatro ruedas ni a la legalidad en carretera. Por supuesto, olvidémonos de consideraciones prácticas, costes de mantenimiento o comentarios de vuestra pareja…
¿Nos acompañáis?
1. Un Porsche 996 Turbo de segunda mano
¿Alguna vez soñaste con tener un Porsche 911? Si eres un entusiasta del automóvil la respuesta debería ser sí. Aunque la generación 996 ha sido una de las menos apreciadas de la saga, de ella han salido impresionantes máquinas como el 996 Turbo. Fue el primer 911 Turbo en equipar tracción integral. Además, su motor 3.6 bóxer refrigerado por agua entregaba la increíble cifra de 420 CV, siendo en su momento uno de los Porsche más potentes jamás fabricados, con permiso de los 959 y homologaciones de calle de LeMans.
Acelera de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos y tiene todo el confort y lujo que podemos esperar de un “nueveonce”. Y sí, es posible conseguir una unidad de segunda mano por menos de 30.000€. Una búsqueda en Internet arroja varios resultados, aunque con kilometrajes que en todos los casos superan los 150.000 km, y algunos los 200.000 km. Con un buen cuidado en un taller especializado y un libro de revisiones al día no deberían dar demasiados problemas, pero recordemos que el mantenimiento de un Porsche veterano no es precisamente barato.
2. Caterham Supersport
Por un precio de arranque de 21.995 libras esterlinas podemos adquirir un fantástico Caterham Supersport. Herederos del legado del Lotus Seven – el coche que Colin Chapman diseñó y tomó como base para la filosofía de Lotus -, son vehículos diseñados con únicamente la función en mente. Una carrocería tubular, un estrecho habitáculo estrictamente biplaza y un equipamiento de lo más básico. Ni siquiera tendremos dirección asistida, ni en opción. Pero no nos va a hacer falta, ya que su peso es de apenas 520 kg.
Con únicamente la dinámica en mente, su setup es agresivo, deportivo hasta la médula y divertido a más no poder. No es un vehículo apto para todos los públicos y su practicidad es nula: es una compra impulsiva e irracional. ¿Pero quién puede negarse a un Supersport? Su motor es un 1.6 Ford “Sigma” con 140 CV de potencia, que le permite acelerar en 4,9 segundos hasta los 100 km/h, gracias a una caja de cambios manual de cinco marchas de relaciones cerradas. La guinda: el autoblocante mecánico es de serie.
3. Palatov D4
¿Qué demonios es un Palatov? No, no es un caza ruso de la época soviética, ni un postre típico de Ucrania. No sabríamos definirlo muy bien, pero nos acercaríamos si lo llamásemos “kart crecido” o “coche de carreras en miniatura”. Realmente es ambas cosas, pero está fabricado en Estados Unidos, y no en Rusia. Esta máquina de sólo 2,63 metros de longitud y 1,10 metros de altura está construida en torno a un chasis tubular, pesa 363 kg y en sus entrañas late un motor de motocicleta de origen Suzuki, con 600 o 1.000 cc.
Con semejante peso y potencia sus prestaciones son de órdago, y diseñado con el circuito en mente, es capaz de humillar a máquinas mucho más caras, entre otros motivos gracias a sus slicks o su caja de cambios secuencial. Su carrocería de material compuesto ha sido diseñada en el túnel de viento y su fondo es completamente plano. Tiene pinta de ser un coche divertidísimo para unas tandas de domingo, y cuesta sólo 29.410$. Para los valientes, Palatov ofrece también en el D4 un motor turbo de la Suzuki GSX-R 1000 con 300 CV y tracción total permanente.
4. Honda CBR1000RR
Y decimos adiós a los coches brevemente, porque nos vamos a mi querido mundo de las dos ruedas. Entiendo que una moto no puede ofrecer las misma seguridad que un coche y que muchos puede que ni tengáis el carnet A, necesario para llevar una máquina como la Honda CBR1000RR. Alabada como una de las mejores motos superdeportivas del momento, es una dignísima heredera de la CBR900RR Fireblade, que ya ha cumplido los 20 años. Ha sido renovada en 2012, con una parte ciclo diseñada con la precisión y las sensaciones en mente.
Su motor de 999 cc desarrolla unos alucinantes 178 CV a 12.000 rpm y su peso en orden de marcha es de exactamente 200 kg. Aunque no se publican datos de aceleración de motocicletas, con una buena caja de cambios de seis relaciones, una superdeportiva como esta CBR1000RR puede acelerar hasta los 100 km/h en menos de cuatro segundos y humillar a muchos superdeportivos. Hay que tener buenas manos, experiencia y cabeza, pero un torbellino de sensaciones inigualable está a tu alcance por sólo 16.119€.
5. Un Mazda MX-5 LS V8 de Flyin’ Miata
¿Quieres tener un coche que no levante sospecha alguna entre tus vecinos, pero que al mismo tiempo sea una bestia de anormalmente baja relación peso/potencia? Coincidimos en que el Mazda MX-5 NB es un roadster dinámico y bonito, pero no especialmente potente. Aunque no hace falta mucha potencia para divertirse con un Miata, queremos sensaciones extremas. Y Flyin’ Miata es capaz de dárnoslas, con su conversión a motor GM LS V8, posiblemente una de las más populares del mundo de los MX-5, por un precio final de apenas 35.670$.
La gama de motores va desde un modesto LS1 V8 de 300 CV, a un potente LS3 E-Rod con actualización de potencia a 480 CV. Todo ello, acompañado de diferenciales de altas prestaciones, cajas de cambio reforzadas y un chasis modificado. No obstante nada cambia en la estética exterior, inofensiva como de costumbre. Se ofrecen los MX-5 completos, o podemos llevar a su taller estadounidense nuestro Miata, que también puede ser una versión NA. Desde luego, pasaremos desapercibidos… hasta que giremos el contacto y se desate la tormenta.
Esta es nuestra selección, sin consideraciones prácticas y totalmente subjetiva. Ahora os toca aportar vuestro grano de arena en comentarios, ¿qué máquinas incluiríais en esta lista?
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