Hoy mismo se ha presentado el nuevo Chevrolet SS. Se trata de la primera berlina deportiva de Chevrolet con motor V8 y tracción trasera desde la muerte del Chevrolet Impala SS en el año 1996. Como ya sabemos, es una versión del Holden Commodore SS V con otro logotipo, por lo que no vamos a encontrarnos grandes novedades, aunque sí tenemos finalmente detalles de su motorización y prestaciones. El Chevrolet SS emplea la plataforma Zeta de General Motors, empleada por los Holden Commodore y también por el Chevrolet Camaro.
En cuanto a su aspecto, no se puede negar su origen australiano en las líneas, especialmente en su perfil lateral. El conjunto óptico recuerda poderosamente a algunos Opel, con un aspecto similar al Opel Astra Sedán en la zaga. Los paragolpes cuentan con agresivas entradas de aire, molduras en plástico negro satinado y luces diurnas LED. En el interior del coche nos encontramos un habitáculo de calidad, con envolventes asientos de cuero deportivos. Estos asientos llevan el logotipo “SS” bordado en el respaldo.
La instrumentación me recuerda mucho a la del Chevrolet Camaro y el salpicadero cuenta con detalles de calidad, está forrada en cuero y bien terminada. En el plano de la seguridad activa os remitimos a nuestro artículo sobre el Holden Commodore VF para descubrir todo el equipamiento que puede llevar: aviso de vehículo en punto muerto, cámara de visión trasero, aviso de cambio de carril… Por supuesto, del Commodore también hereda una dirección asistida eléctrica, aunque eso sí, pensada con el rendimiento deportivo en mente.
Y ahora vamos a resolver la incógnita que todos teníamos. ¿Qué hay bajo el capó del Chevrolet SS? Todos pensábamos en el 6.2 LS V8 de 450 CV del nuevo Corvette Stingray, pero parece ser que no. Finalmente encontramos un 6.2 LS3 V8 con una potencia de 415 CV, menos de lo esperado. Con todo, es un motor con más de 600 Nm de par motor máximo y permitirá al Chevrolet SS acelerar de 0 a 100 km/h en menos de cinco segundos. Este motor va asociado a una caja de cambios automática de seis relaciones, por el momento sin opción a cambio manual.
La tracción es exclusivamente trasera y no habrá versiones de tracción total. La dinámica no se complicará con controles de estabilidad ajustables o sofisticados controles de tracción, es una berlina deportiva americana “a la antigua”, asequible, honesta, ruda y sin “moderneces”. El equipo de frenado está compuesto por frenos Brembo con discos ventilados de 355 mm y pinzas de cuatro pistones. La suspensión es independiente en ambos ejes y los neumáticos tienen medidas 275/35ZR19 en el eje trasero y 245/40ZR19 en el eje delantero.
Por supuesto, no supondrá un rival para los BMW M5, Mercedes E 63 AMG o Audi RS6, puede que ni siquiera para los Audi S6 o los Mercedes E 500, pero debemos recordar que se trata de otro concepto de deportividad, más pensada para las carreteras estadounidenses. Más que berlina deportiva, es una berlina potente con ciertas aspiraciones dinámicas. En todo caso, nos alegramos que General Motors haga un pequeño homenaje al difunto Pontiac G8 – basado en la misma plataforma – y se aproxime a las ofertas de su interesante filial australiana.
No se espera que el Chevrolet SS se venda en Europa.
Fuente: Chevrolet
En Diariomotor: Holden Commodore VF, se presenta el hermano mellizo del nuevo Chevrolet SS | Chevrolet confirma que ofrecería una berlina V8 de tracción trasera en 2013: llega el SS