El tuning tiene también un hueco en el Salón de Ginebra. Aunque va a costar despegarnos de los stand de Ferrari, McLaren y Lamborghini. Carlsson es el último preparador en anunciar su presencia en el próximo Salón de Ginebra y lo hace con el Carlsson CK63 RSR… ¿qué se esconde tras ese nombre? Un Mercedes CLS 63 AMG de 700 caballos… y 1.000 Nm.
Carlsson se une así a algunos de los preparadores que ya han anunciado alguna de sus creaciones para el Salón de Ginebra. Alpina nos ha prometido ya al Alpina B3 Biturbo. Fab Design al Emperor II. E incluso Carlsson ya nos anunció hace un par de semanas al Carlsson SLK 340. La ración de tuning está servida en el Salón de Ginebra.
El Mercedes CLS 63 AMG recibe un discreto cambio a nivel estético y un considerable extra de potencia y par. Bajo una estética que bien podría ser de origen, introduciendo unas nuevas llantas en 19 y 20 pulgadas y un splitter delantero en fibra de carbono, mientras que la zaga queda a merced de un alerón eléctrico, los cambios principales aparecen bajo su carrocería.
Y es que bajo el capó de este Mercedes CLS 63 AMG nos encontramos el V8 de 5.5 litros sí, que pasa de los 525 caballos que entrega originalmente a los 700 caballos que promete Carlsson, aumentando de paso su par en unos 300 Nm “de nada”, pasando de los 700 Nm de serie a los 1.000 Nm que entrega ahora.
¿El proceso para conseguir semejante aumento? Un nuevo intercooler, una mejora de la refrigeración, electrónica y un mejor sistema de escape (de paso añadiendo una válvula de control de sonido). Además de paso se ha puesto a punto la suspensión, regulable en 10 posiciones y hasta 30 mm más bajo que de serie, aumentando también las anchura del tren delantero en 25 mm.
Según Carlsson el CK63 RSR es capaz de alcanzar los 100 km/h en 3.9 segundos, los 200 km/h en poco más de 11 segundos y una velocidad máxima de 340 km/h… y todo ello con el par limitado electrónicamente para no romper la caja de cambios.
Fuente: Carlsson
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