Mansory prepara una avalancha de novedades para el Salón de Ginebra, pero todo el protagonismo se lo llevará el vehículo que aparece en vuestras pantallas. Llamado Mansory Cabronado Carbonado, es la preparación para el Lamborghini Aventador más brutal lanzada hasta la fecha. Vamos a ir al grano, la potencia de su motor. Los 700 CV de fábrica que tiene su motor 6.5 V12 parecían insuficientes para Mansory, que ha decidido casi duplicar la potencia del propulsor. ¿Por qué? ¿Por qué no?, pensarían…
Con la preparación, la potencia del colosal Aventador crece hasta los 1.250 CV, más caballos que el Bugatti Veyron Super Sport. Se ha tenido que abandonar la aspiración atmosférica en favor de dos turbocompresores en paralelo, cuya instalación ha tenido que incluir una modificación de todos los componentes internos del motor, instalándose nuevos pistones forjados, un cigüeñal nuevo y nuevos árboles de levas. Curiosamente, han tenido que limitar el par máximo a sólo 690 Nm, suponemos que para evitar daños a la caja de cambios.
Es capaz de acelerar hasta los 100 km/h en sólo 2,6 segundos y su velocidad máxima se ha limitado a unos “inofensivos” 380 km/h. Las nuevas llantas son de 20 pulgadas en el eje delantero y de 21 pulgadas en el eje trasero, envueltas en neumáticos Pirelli P Zero, de medidas 255/30 ZR20 y 345/25 ZR21, respectivamente. En cuanto al resto del coche, la carrocería ha sido ensanchada en 40 milímetros y las entradas de aire abundan aún más que en la versión de serie. ¿Habíamos mencionado que toda la carrocería es de fibra de carbono?
Por eso se llama Carbonado, porque nos encontramos este caro material hasta en la sopa. Dejando a un lado que nos pueda gustar más o menos, la carrocería parece esconder un avión de espionaje, caro, agresivo e inadvertido por el radar enemigo. En el interior nos encontramos un cuero con patrón de diamante, combinado en colores blanco y negro, además de más fibra de carbono. Al parecer, Mansory sólamente va a producir 6 unidades del Carbonado, a un precio desconocido, pero que superará las seis cifras sin duda alguna.
No es el Lamborghini Veneno, pero es casi tan exclusivo. Para los millonarios que no han podido hacerse con una de las tres unidades del Veneno puede ser un buen antídoto.
Fuente: Carscoop
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