Con una temperatura sobre el asfalto algo más suave que ayer, la tercera carrera del calendario de este año comenzaba a disputarse con la incógnita por responder de qué estrategia sería la más adecuada, toda vez que de los diez primeros puestos en parrilla, siete habían apostado por consumir cuanto antes los compuestos blandos de Pirelli (distintivo amarillo), mientras que Jenson Button, Sebastian Vettel y Nico Hulkenberg, en la 8ª, 9ª y 10ª plaza respectivamente, iban a realizar un primer stint largo con medios (gomas distintivo blanco).
Mark Webber, quien fuera penalizado en calificación a salir último porque en el depósito de su RB9 no había combustible suficiente como para responder a la inspección de la FIA, partía definitivamente desde el pit lane montando también neumáticos blandos —Red Bull aplicaba el mismo criterio con el australiano que el utilizado con Sebastian Vettel en Abu Dhabi el año pasado, de manera que el monoplaza del aussie era retocado de arriba a abajo fuera de la normativa del paque cerrado—.
Así las cosas, la 10ª edición del Gran Premio de China se iniciaba con Lewis Hamilton liderando la salida y con los Ferrari de Fernando Alonso y Felipe Massa a la cola del W04 del británico, al haberse beneficiado de la pésima arrancada protagonizada por Kimi Raikkonen (clasificado 2º en parrilla). Los primeros giros transcurrían sin apenas alteraciones hasta que Esteban Gutiérrez (Williams) golpeaba la trasera del Sahara Force India de Adrian Sutil, dando lugar al temprano abandono de ambos momentos antes de que el asturiano de la de Maranello y su compañero, dieran buena cuenta de Hamilton al final de la recta de tribunas.
A partir de ese instante y con el de Oviedo en cabeza, todo discurría con tranquilidad hasta que comenzaban los primeros pasos por garajes y Hulkenberg, Vettel y Button (en este orden ya), aprovechando su primer stint largo lideraban la carrera.
Sin embargo y contra todo pronóstico, las vueltas 14 a 16 iban a resultar muy intensas en acontecimientos. Primero Mark Webber rompía su alerón delantero en colisión con Jean-Éric Vergne, incidente a resultas del cual, tras el necesario paso por boxes del australiano de la de Milton Keynes, éste se veía obligado a abandonar después de perder la rueda trasera derecha de su vehículo en la vuelta siguiente. Y segundo, Kimi Raikkonen golpeaba la trasera del MP4/28 de Sergio Pérez, dañando la nose de su E21 y comprometiendo así sus posibilidades de luchar por la victoria.
En el giro 21, la sorpresa la daba Nico Rosberg al retirarse debido a un problema surgido en la suspensión de su W04, dejando a Lewis Hamilton como único representante de Mercedes AMG en pista. El británico de Brackley luchaba en esos momentos en 3ª posición, detrás de Fernando Alonso, quien a su vez disputaba la primera plaza a un Jenson Button que estaba sacando astillas a la estrategia que Woking había diseñado para su vehículo.
Sebastian Vettel, muy incómodo todo el Gran Premio, seguía mostrando giro a giro que no se conformaba con tramitar la prueba. El alemán quería alcanzar la cabeza para ganar unos segundos vitales de cara al temido y previsible último stint con blandos, y seguía plantando cara a la difícil situación que tenía ante sí, con una actitud encomiable que a punto ha estado de grangearle sabrosos resultados. Pero no adelantemos acontecimientos.
A partir de la vuelta 29, Fernando Alonso, cómodamente instalado en cabeza se postulaba ya como ganador, y para la 43, momento en que el asturiano vuelve a adelantar al tricampeón alemán, el interés de la carrera sobre el trazado de Shanghai se centra en ver si la estrategia de Red Bull y McLaren para Sebastian Vettel y Jenson Button, respectivamente, iba a resultar suficiente como para doblegar en los últimos giros a Kimi Raikkonen y Lewis Hamilton, quienes ocupaban virtualmente la 2ª y 3ª plaza de la prueba.
El de Frome entra a cambiar neumáticos al final de la 49. Quedan 6 para la conclusión y durante las primeras vueltas con blandos parece incluso que el británico va a ser capaz de dar caza a su ex compañero (Hamilton), pero las gomas de su MP4/28 ceden pronto y el de McLaren se limita a gestionar su 5ª plaza. El de Heppenheim se mete a garajes en la 51, y sale como una exhalación, pero a pesar de llegar a inquietar gravemente a Hamilton en el último giro, éste defiende con uñas y dientes su 3º puesto.
La carrera culmina con cinco campeones del mundo en las primeras 5 posiciones. Fernando Alonso vencía con holgura. Kimi Raikkonen, con una aerodinámica muy comprometida en su E21 después del golpe con Checo Pérez, se conformaba con ser 2º. Lewis Hamilton, como decíamos, conseguía llevar su W04 a la 3ª plaza. Tras él, Sebastian Vettel, que se quedaba a un palmo de tocar podio, y a la cola del RB9 del alemán, Jenson Button, a quien seguirían ya a bastante distancia, un deslucidísimo Felipe Massa y un Daniel Ricciardo que lograba los primeros puntos de la temporada para Toro Rosso. En la 8ª posición, Paul Di Resta. En la 9ª, Romain Grosjean. Y cerrando la tabla de puntos, Nico Hulkenberg.
Una vez terminada la prueba, la FIA, como de costumbre, nos ha entretenido con las consabidas investigaciones que quedan abiertas, hasta que con bastante posterioridad hemos sabido por fin que Esteban Gutiérrez era sancionado con 5 plazas en parrilla para el próximo Gran Premio de Bahrein por ser considerado responsable del accidente que ha protagonizado con Adrian sutil en los primeros giros de la carrera. Así mismo, Mark Webber recibe una sanción de 3 puestos en la parrilla del cuarto Gran Premio de la temporada, y Red Bull era sancionada con 5.000 Euros por el incidente de la rueda en el coche número 2. El resto de investigados por activar el DRS con banderas amarillas desplegadas en pista, quedaban sin sanción.
Las claves:
—El excesivo protagonismo de las Pirelli.
—Los errores de Red Bull durante todo el fin de semana.
—La pésima salida de Kimi Raikkonen.
Lo mejor:
—Fernando Alonso y su gestión de la carrera.
—Nico Hulkenberg.
—Jules Bianchi, liderando de nuevo a Marussia frente a Caterham.
Lo peor:
—Los compuestos blandos de Pirelli, totalmente inadecuados para Shanghai.
—Felipe Massa.
—Red Bull por su gestión del monoplaza número 2.
Fuente: Formula1.com / Statsf1.com
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