Ha nacido un best-seller y su nombre es Renault Captur. No es un turismo utilitario, ni tampoco un SUV, sería difícil que lo encasillásemos también como un monovolumen al uso, aunque en cierta medida se nutre de valores de estos tres segmentos. Renault España se ha mostrado reticente a darnos su previsión de ventas para nuestro país, aunque creen firmemente que tienen producto para superar al Nissan Juke (7.519 ventas en España en 2012), lo que situaría al Captur como uno de los modelos más vendidos de Renault y acechando peligrosamente al Renault Clio, con el que comparte algo más que unos rasgos estéticos.
Precisamente con un diseño atractivo para el cliente, que se ha dejado guiar por la moda de estos turismos con aspecto de SUV también conocidos como crossover, un diseño práctico en el que ha primado la habitabilidad y el espacio y un precio contenido, pienso que el Renault Captur se podría convertir en muchos casos en alternativa al Renault Clio, incluso robarle ventas. No obstante, en un periodo como este, tan delicado para la industria del automóvil, lo más importante es vender coches y si Renault logra que el cliente típico de un utilitario y el de un pequeño crossover se queden en casa ya habrá logrado su objetivo y una importante victoria.
Por primera vez lo hemos conducido en las carreteras francesas y hemos hablado con los responsables de la marca para conocer con más detalle al nuevo Renault Captur.
¿Qué diferencia a un Renault Captur y un Renault Clio?
Dicho lo cual llegó el momento de determinar qué es y qué no es un Renault Captur y sobre todo que lo diferencia de un Renault Clio. Tiene aspecto de SUV, pero evidentemente sus cualidades camperas están muy limitadas y no contará con tracción a las cuatro ruedas ni como opción, no obstante y aunque no tuviésemos ocasión de salirnos de la carretera para comprobarlo, confío en que no iría nada mal en pistas sin asfaltar (más adelante os diré por qué). Pero en general lo más importante de su enfoque SUV es su estética, condimentada con detalles tan curiosos como el diseño bicolor de la carrocería.
Pero la gran ventaja del Renault Captur frente a un Clio llega precisamente a bordo. Tenemos un habitáculo muy espacioso, con una altura considerable, un puesto de conducción elevado para quien guste de ello, un maletero con el tamaño justo que aumenta considerablemente su volumen gracias a una banqueta posterior regulable longitudinalmente. Por si no fuera poco pienso que el diseño del salpicadero está muy logrado y detalles como la pantalla del navegador y el equipo R-Link se han integrado mucho mejor en lo práctico y en lo visual.
En su dinamismo en carretera, un Clio y un Captur no serán comparables, pero como también veremos a continuación el Captur es mucho más versátil.
Un buen motivo por el cual muchos clientes se decantarán por el Renault Captur, es su estética. Podremos recurrir a opciones discretas, con un único tono de carrocería y colores sobrios como el Gris Casiopea que ilustra este artículo, o bitono con un aspecto tan llamativo como el Naranja Arizona o el Azul Pacífico (375 euros adicionales) con tres opciones de color para el techo, blanco, negro o naranja. El acabado bitono únicamente estará disponible para el acabado tope de gama, denominado Zen, lo que supondrá un desembolso más importante que el anunciado en las campañas publicitarias “desde 15.200 euros”.
Tuve ocasión de hablar con el Director de la fábrica de Valladolid y me contó que se sentían especialmente orgullosos de la solución empleada para realizar el acabado en dos tonos. El vehículo primero se pinta por completo en el color principal de la carrocería, tras lo cual se coloca manualmente un adhesivo temporal en la junta que separa el techo (puesto que carrocería y techo están soldadas y son la misma pieza) y después se pinta el techo haciendo que el límite entre un color y otro quede perfectamente marcado y sin imperfecciones.
Renault también nos confirmo que si bien no estén obsesionados con ello, si que existe cierta prioridad para mejorar la calidad percibida por el cliente. Por esa razón es clave que se cuiden detalles como los ajustes de las piezas o la separación entre los dos tonos de la carrocería.
Por 100 euros podremos optar a los decorados especiales de llantas en 17”, con el interior de los radios en gris, naranja y negro. Por otros 100 euros al detallado de color exterior. Y por 300 euros a tres temas diferentes de adhesivos para el techo y el portón trasero. A bordo también se agradece la posibilidad de optar a dos temáticas de acabado, oscuro con salpicadero y revestimientos en negro, y claro con revestimientos grises, sin que este último suponga un desembolso adicional. Existe un amplio catálogo de tapizados muy coloridos y también la posibilidad de configurar las molduras de plástico en tres tonos, naranja, verde y azul, por 100 euros adicionales.
En definitiva el Renault Captur será tan atractivo visualmente como tu presupuesto te lo permita. Aunque también es cierto que existe la posibilidad de dar un toque muy exclusivo y personal sin necesidad de invertir demasiado dinero.
Centrándonos en la practicidad, este Renault Captur también nos ha sorprendido por la abundancia de huecos portaobjetos en los voluminosos bolsillos de las puertas, un porta-gafas sobre el salpicadero, los receptáculos habituales para las llaves y el móvil y botellas de agua en el túnel central, y sobre todo su gigantesca guantera. La guantera ha sido diseñada sin una puerta al uso sino un inmenso cajón con un volumen de 11 litros y un espacio superior al de cualquier otra guantera que recuerde en estos momentos.
Por ejemplo cabía una caja grande de pañuelos y varias botellas de agua de medio litro. Aunque no lo probamos, intuimos que un bolso de pequeño tamaño también entraría perfectamente en su interior. El tirador de apertura y su construcción hacen que pueda parecer un tanto frágil, pero probablemente sea una de las soluciones más prácticas de cuantas hayamos visto últimamente.
La banqueta posterior deslizante para adaptar el volumen del maletero
Otra de las ideas brillantes que Renault ha tenido para el Captur ha sido la incorporación de una banqueta posterior deslizante. Se trata de una solución similar a la que tradicionalmente ha empleado el Renault Twingo. La base de la banqueta posterior se desliza accionada por un tirador situado debajo de esta, aunque lo hace de una sola pieza de forma que las tres plazas se adelantan o retrasan a la vez en la misma longitud. Los respaldos no pueden adaptar su inclinación, pero sí plegarse por completo en dos piezas para aumentar el volumen de carga hasta el máximo posible de 1.235 litros.
El maletero puede crecer desde los 377 litros de volumen original hasta los 455 litros, es decir, el volumen del espacio de carga de un Renault Koleos. El espacio para las piernas que queda libre con los asientos en su posición más adelantada es escaso para pasajeros adultos, salvo que los asientos de conductor y acompañante vayan muy adelantados.
Pero tal problema no existiría en el caso de que los ocupantes fueran niños pequeños y aún menos si estos van amarrados en una sillita especial adaptada a su edad. Pensemos en el caso práctico de una familia con dos niños pequeños que bien podrían aprovecharse del espacio máximo de carga del maletero para llevar el equipaje o el carrito del bebé.
Tapicerías desenfundables para facilitar su limpieza
Aún hay más, pensando también en las familias Renault ha dispuesto de tapicerías desenfundables por 350 euros adicionales. Estas se basan en un sistema de cremalleras con el que basta desmontar la cobertura de los asientos delanteros y traseros para poder introducirlo en la lavadora y que la tapicería quede como nueva en unos minutos. No probé a desmontar los tapizados, pero aparentemente es un proceso sencillo y rápido, puesto que las cremalleras son visibles y la zona desmontable tan solo cubre las piezas que están en contacto con nuestro cuerpo y la ropa.
La marca también nos habló de otra opción interesante, sustituir de forma económica los tapizados cuando estos se desgasten, por ejemplo para mejorar su valor residual y facilitar su venta de segunda mano. Si su precio se mantiene en 350 euros no parece que sea en definitiva una solución económica, pero sí bastante más que la sustitución completa de los asientos.
Como el Renault Clio, el Captur puede optar en su versión tope de gama Zen al equipo de conectividad, multimedia y navegación, R-Link. Por 590 euros podemos incorporar un sistema con multitud de aplicaciones de diversa índole, desde la búsqueda de negocios hasta la identificación de radares de Coyote. Incluso pude probar un Sudoku o un lector de noticias que nos informa en todo momento de los fichajes y los rumores que se producen en el fútbol internacional.
Otra función interesante del Renault Clio, que normalmente no suele estar disponibles en coches de este segmento y sí en modelos de gama alta, es el análisis de la calidad del aire exterior. El sistema de climatización identifica agentes contaminantes, por ejemplo cuando la concentración de gases de la combustión es muy alta en un túnel o un garaje, y en tal caso activa la recirculación de aire del habitáculo.
Aguarden a la siguiente parte de esta presentación y prueba por las carreteras del País Vasco francés, en la que por fin hablaremos de dinámica y motores.
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