El lado más exótico del Wörthersee – lo cual ya es mucho decir con el Golf GTI de 500 CV presente – lo ofrecerá una suerte de coupé pick-up diseñado sobre lo que anteriormente debería haber sido un práctico Volkswagen Amarok.
En este caso este super-Amarok se habría conformado con aproximadamente 268 CV de potencia, procedentes de un motor diésel V6 de 3.0 litros, lo cual no está nada mal. Aunque sea un prototipo, personalmente me recuerda mucho a los famosos Ute australianos, esos turismos de tipo pick-up que bajo el capó esconden motores descomunales de seis y ocho cilindros. De hecho en Australia aún se comercializa el Holden SS V Z-Series Ute con motor 6.0 V8 de 362 CV de potencia. En Volkswagen no se han vuelto locos y no parece que vayan a lanzar un turismo de estas características, ni tampoco un modelo R o una versión R-Line de su famosa camioneta.
Diésel pero potente, Volkswagen habría amortizado un motor del grupo diferente al 2.0 TDI de cuatro cilindros con el cual se comercializa el Volkswagen Amarok en Europa. De hecho, el motor, es la parte más razonable de esta preparación y no nos extrañaría que la gama Amarok acogiese de buena gama una opción más potente como esta. El 3.0 V6 TDI lo utiliza, entre otros, el Volkswagen Touareg.
Entrega 600 Nm de par máximo y con su inmensa carrocería ensanchada y rebajada y sus llantas de 22 pulgadas, hace el 0 a 100 km/h en 7,9 segundos gracias al cambio DSG de 8 relaciones que lleva asociado. Sus prestaciones pueden no parecer interesantes si tenemos en cuenta que el nuevo Volkswagen Golf GTI realiza el sprint en 6,6 segundos. Pero si consideramos que, salvo terapia de adelgazamiento, este coche pesará más de dos toneladas, lo cierto es que la cifra no está nada mal.
Fuente: Volkswagen vía Carscoop
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