El Skoda Superb se ha renovado. Desde la firma checa han introducido leves cambios en el aspecto, en el acabado interior, en las motorizaciones… de la berlina de representación de Skoda. Cambios que pudimos conocer de primera mano en nuestra prueba del Skoda Superb 2013… ahora es el momento de disfrutar de esos cambios… desde la perspectiva más “radical” de la gama: el Skoda Superb VR6.
Probada la alternativa más racional, la más comercial de todas las mecánicas con el análisis del TDI 140 cv, toca ponernos al volante de la versión más prestacional del Superb. Bajo su capó, 6 cilindros en V… bajo el acelerador 260 caballos… tras nosotros, una melodía que escuchada desde fuera dista mucho de la mundana melodía del 4 cilindros TDI del Superb de 140 cv.
¿Listos para conocer al Skoda Superb Combi VR6?
Una discreta apariencia tras la que se esconde el Skoda Superb VR6
Es la hora de comer. Estamos en Viena, es la presentación del Skoda Superb 2013 y acabamos de dejar aparcado al Skoda Superb TDI de 140 caballos. Entrego las llaves y veo que en la lista de coches aparece un Skoda Superb con la denominación VR6… denominación que inmediatamente hace que aparezca por mi cabeza un Volkswagen Golf VR6 MKIII… un Volkswagen Corrado VR6… una denominación que me traslada automáticamente a las calles de los 90… que me hace recordar un vídeo de producto del Corrado que tuvieron que ver mis compañeros de profesión 23 años atrás…
Nostalgia aparte, volviendo al 2013, pido según estoy entregando las llaves del TDI las llaves del VR6… aunque tenga que esperar a comer para poder montarme… me dicen que creen que no va a ser posible… que no está disponible… por suerte no desisto y tras la comida uno de los miembros del equipo de Skoda me dice que hay un Superb Combi VR6 disponible… perfecto, la mecánica más “deportiva” de la gama bajo una carrocería familiar… no sé que tendrán… pero últimamente los modelos familiares con carácter me gustan más que la respectiva alternativa compacta o berlina (creo que el Ford Focus ST Sportbreak me dejó marcado).
Con las llaves del Skoda Superb VR6 en la mano vuelvo al parking donde minutos atrás, antes de comer, dejaba al Superb diésel… me acompaña hasta el coche un segundo miembro del equipo de Skoda… que cuando ve en el llavero la unidad que voy a conducir me dice en un chapurreado castellano “oooh bomba, ¡bombastic!”. Buena forma de definir al VR6.
Una Superb Combi en un tono chocolate ante nosotros. Sin duda, podemos adjudicarle ya el adjetivo de discreto. Parece que no cambia absolutamente nada respecto a otras alternativas menos potentes. Hasta que te vas a la zaga… y allí están las 4 salidas de escape en una disposición de 2+2, flanqueando los laterales del paragolpes, cromadas, sutiles, sencillas… definiendo a la perfección este coche.
Junto a las 4 salidas de escape también nos encontramos una insignia de “4X4” con la equis en rojo. Más allá de esto nos encontramos exactamente con el mismo diseño que luce cualquier otra alternativa mecánica. Un repaso rápido a los cambios que ya detallamos en la toma de contacto con el Superb 2013: una nueva parrilla, luces diurnas, un nuevo aspecto para las ópticas, nuevas llantas, nuevos tonos de pintura y opciones de equipamiento, además de añadir Start&Stop y sistemas de recuperación de energía a las mecánicas de la gama.
Aunque a simple vista pasen desapercibidos, el VR6 cuenta con otros cambios respecto a otras alternativas de la gama Superb Combi. Su distancia respecto al suelo es 1 mm menor que el resto, quedándose a 140 mm del asfalto y las vías, tanto la delantera como la trasera, también varían. Sus neumáticos son mayores, confiando de serie en unas llantas de 17 pulgadas con unas medidas de 225/45 y bueno… un daño colateral de los 6 cilindros… su peso también varía… llegando (conductor de 75 kg incluido) a los 1.726 kg.
6 cilindros y 260 caballos entregados a las 4 ruedas
Con una estética que no varía nada respecto al de cualquier otra mecánica con el mismo acabado, salvo el mencionado detalles de los escapes, el Skoda Superb VR6 guarda todo su encanto bajo el capó en forma de bloque V6 de 3.6 litros, inyección directa y atmosférico, bloque, del que se sacan 260 caballos a 6.000 rpm, del que se consigue exprimir un par de 350 Nm entre las 2.500 y las 5.000 rpm. Los 260 caballos del bloque de 6 cilindros se entregan a las 4 ruedas, Haldex mediante, contando además con una transmisión DSG de 6 velocidades.
En cuanto a prestaciones, el Superb VR6 marca un 0 a 100 km/h en 6.5 segundos, con una velocidad máxima de 250 km/h. Su consumo combinado acorde al número de cilindros y a su condición de atmosférico, “conformándose” con 9.3 l/100 km… pero ¿sabéis que opino al respecto? Qué si necesita 10 litros… no se los neguemos… no perdamos otro bloque atmosférico.
En marcha: una suave pero enérgica entrega
No disponemos de mucho tiempo… mi compañero de presentación (Enrique Naranjo) y yo tenemos que volver al aeropuerto de Viena para regresar a Madrid. Así que allá vamos con el V6 FSI.
Primeros metros, hundo el pie en el acelerador y la respuesta de los 6 cilindros no tarda nada en empujarme desde el parking a la carretera. La respuesta es realmente buena, realmente inmediata y suficiente para estar en unos pocos segundos a ritmos por encima de la legalidad. Pero lo mejor de todo, más allá de prestaciones, es su forma de reaccionar.
El V6 nos lleva a regímenes a los que por desgracia o por evolución, cada día es más difícil llegar… pero nos lleva sin brusquedad alguna, con una entrega rápida pero suave, muy suave… benditos 6 cilindros. La transición entre marchas mucho más delicada, mucho más imperceptible que en el TDI… os podéis imaginar que las comparaciones son odiosas.
No me da tiempo a exigirle demasiado a su tracción, pero en un par de salidas rápidas, incluso alguna con el eje trasero sobre asfalto suelto y el delantero sobre un buen firme, no transmite o por lo menos, no llega, pérdida de tracción alguna, aunque como digo, no hubo tampoco oportunidad de exigirle demasiado a su tracción total.
En autopista de nuevo la sensación de absoluto confort que experimenté con el TDI 140 cv… el silencio es la nota predominante, acompañando el trayecto en esta ocasión por un habitáculo que en lugar del acabado negro lucía combinación beige. Una perfecta mezcla entre el tono oscuro de su exterior, el beige de su habitáculo y el V6 en el vano motor.
Sin duda el Superb VR6 busca no desde luego un enfoque deportivo, sino el confort, el concepto de Superb, elevado al máximo exponente… al nivel al que un bloque de 4 cilindros no llega, al carácter más sofisticado, más noble aún. Suave, pero rápido, aunque sin exaltaciones innecesarias, sin que los ocupantes noten nada. Sin duda sus ventas serán residuales si las comparamos con el TDI de 140 caballos del que te hablaba la semana pasada… pero es necesario, por el bien de la automoción, que sigan existiendo mecánicas así en las gamas de modelos como el Superb.
Skoda Superb VR6: desde 39.480 euros
El Skoda Superb VR6 se ofrece tanto en carrocería berlina como en la opción familiar con el Skoda superb VR6 Combi. Se ofrece en dos niveles de acabado, Elegance o bajo la edición Laurin&Klement, que toma los nombres de los fundadores de la marca para ofrecer un acabado superior con detalles como las llantas de 18 pulgadas, los logos específicos, nuevos colores para el habitáculo…
La gama del Skoda Superb VR6 queda conformada de la siguiente manera:
- Skoda Superb 3.6 V6 FSI 260 cv DSG 4×4 Elegance 39.480 euros
- Skoda Superb Combi 3.6 V6 FSI 260 cv DSG 4×4 Elegance 40.490 euros
- Skoda Superb 3.6 V6 FSI 260 cv DSG 4×4 L&K 42.030 euros
- Skoda Superb Combi 3.6 V6 FSI 260 cv DSG 4×4 L&K 43.40 euros
Bajo los cristales de los edificios de oficias y hoteles que rodean al aeropuerto de Viena, me despido del Skoda Superb 2013… y en especial de este VR6… no he mencionado nada sobre su sonido… y es que si bien en el habitáculo notas por supuesto ciertas notas que con el 4 cilindros no se notaban… Skoda tampoco ha buscado el placer auditivo de los ocupantes a base de dejarles escuchar el V6… sino todo lo contrario, buscando el máximo silencio posible en marcha. Eso sí, mientras me alejaba del VR6 un miembro del equipo de Skoda, aparcando el coche, acarició con un poco más de empeño el acelerador… y que os voy a decir… benditos V6 atmosféricos.
No te pierdas el resto de nuestra toma de contacto con el Skoda Superb 2013
Si te perdiste la primera parte de la prueba no dudes en echarle un vistazo para conocer todos los cambios introducidos en el Skoda Superb 2013 y su gama. Novedades en su estética, en el acabado interior, en sus mecánicas… además de la prueba del Skoda Superb Combi 2.0 TDI de 140 caballos.
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