La primera jornada de entrenamientos libres para el Gran Premio de Gran bretaña ha estado marcada por una meteorología adversa durante la primera sesión, y en la segunda, por la prueba de la nueva propuesta de neumáticos duros que traía a Silverstone Pirelli.
En este orden de cosas, aunque resulte lamentable reconocerlo (como aficionado que soy y me siento), resulta penoso admitir que todo un día de trabajo previo a una carrera se circunscriba a cuidar gomas por la mañana, y a probar las novedades en compuestos por la tarde, pero toca hacer la correspondiente crónica y sin saber muy bien dónde meterme, tengo que decir que si Dios no lo remedia con el afloramiento de alguna noticia que se me haya escapado, hoy hemos asistido a uno de esos días en los que lo más reseñable ha sido la nonagésima impericia mostrada por Felipe Massa sobre suelo mojado o semimojado. Bastante triste en todo caso.
Por la mañana, como relataba antes, la necesidad de proteger el nuevo «oro negro» ha derivado en una situación bastante grotesca, en la cual, de los 22 monoplazas en liza, para sorpresa de los allí presentes, tan sólo 11 se han atrevido a malgastar su tiempo en dar algunas vueltas al mítico circuito de Silverstone, lo que ha originado que el mejor tiempo lo haya conseguido Daniel Ricciardo, sobre Toro Rosso, mientras el grueso de la parrilla esperaba a que la pista mejorara.
Por la tarde la temperatura del asfalto era anormalmente fría, 19º centígrados, y lógicamente se ha sufrido de falta de temperatura en los neumáticos, lo que ha llevado a Felipe Massa a estamparse contra las protecciones para diversión de los que se quedan con la fina película que envuelve la realidad, en vez de intentar entender que cuando se arriesga sobre una pista fría con neumáticos duros, lo normal es que ocurran cosas como la que le ha pasado al paulista.
Pero en fin, la situación en la segunda sesión de entrenamientos ha estado más movidita, aunque como decíamos al comienzo, la necesidad de probar las nuevas gomas de la italiana hacen difícil establecer un rango sobre el que apoyarse para mañana. Primero porque se ha corrido poco con medios y duros convencionales (los que se usarán durante el Gran Premio), y segundo, porque la pista no estaba para muchas florituras, por no decir, que Pirelli se ha pasado de precavida.
En líneas generales, la segunda sesión de entrenamientos no arroja datos que nos puedan servir para mañana durante la calificación (previsión de nublado), ni mucho menos para el domingo (previsión de soleado), lo que nos sitúa ante un escenario en el cual las escuderías se han limitado a hacer algunos kilómetros mientras el tiempo y las circunstancias mejoran.
Nico Rosberg conseguía el mejor tiempo del día (1’32”248, más de 20 segundos menos que Ricciardo por la mañana), seguido a corta distancia por los dos hombres de Milton Keynes, concretamente Mark Webber y Sebastian Vettel, y por este orden. A los que seguía Paul Di Resta sobre un Sahara Force India notablemente bien posado en pista, quien quedaba por delante de Lewis Hamilton, el segundo Mercedes AMG.
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