Puede que no conozcáis al Suzuki Capuccino. Fabricado entre 1991 y 1997, era un pequeño roadster diseñado para cumplir con las normativas Kei Car japonesas, con grandes beneficios fiscales a la hora de su compra. Un pequeño biplaza de orientación deportiva, con un pequeño motor tricilíndrico de 660 cc y 64 CV. Puede ser un motor muy reducido – de nuevo, los límites para los Kei Car entran en acción – pero con un peso de sólo 725 kg y una distribución de pesos perfecta, era un coche muy divertido y ágil.
No he mencionado unos pequeños detalles: motor central, tracción trasera, cambio manual, turbo. Muchos cambios fueron necesarios para adaptar el coche a las normativas europeas, y sólamente se vendieron en el Viejo Continente 1.110 unidades hasta el año 1995, cuando cesó su costosa importación. Con todo, ha sido un coche muy apreciado por sus dueños y muy alabado por la prensa en su momento. Según algunos rumores provenientes de Japón, el Suzuki Capuccino podría estar pronto de vuelta.
Las reglas para los Kei Car no han cambiado, por lo que no podrá ser más largo de 3,4 metros, y seguirá limitado a 64 CV. En un mundo donde ya ni los urbanos más básicos tienen 64 CV puede parecer un coche muy poco potente e inútil, pero si se mantiene fiel al simpático concepto original sería todo un juguete. En caso de ser un Kei Car Suzuki muy posiblemente se asociaría con otro fabricante para compartir los costes de desarrollo de un vehículo casi exclusivamente dedicado al peculiar mercado doméstico japonés.
Lo que no está claro es que se mantenga fiel a su concepto original, es posible que crezca y gane en potencia. En ese caso, hablaríamos ya de todo un deportivo digno de jugar con grandes como el Mazda MX-5, Alfa Romeo 4C o Toyota GT 86. Hablamos de especulación pura y dura sin base real, pero un deportivo así pondría a Suzuki en el lugar que se merece, como fabricante de vehículos muy dinámicos y poco conocidos. Los Suzuki Swift Sport o los Kizashi son de lo mejor de su segmento en cuanto a placer de conducción.
Rumores, sólo rumores y especulación. Al menos vienen acompañados de dos recreaciones en las que se muestra el aspecto que podría tener el coche. Y lo cierto es que si una hipotética versión de producción se llega a parecer mínimamente a los renders, estaríamos ante un coche como poco llamativo. Especial atención a las jorobas traseras, el aspecto deportivo del habitáculo o el orgánico frontal. Seguiremos informando si hay más noticias acerca del renacimiento de este interesante minideportivo.
Fuente: autoevolution
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