Cada vez que nos deja un modelo que por unas u otras razones ha captado nuestra atención y nos ha gustado mucho, el equipo de Diariomotor no puede evitar sentir cierta tristeza. Eso es precisamente lo que nos sucedía cuando nos enterábamos que el Honda CR-Z acaba de cesar su comercialización en los concesionarios españoles. Honda había apostado quizás por un concepto demasiado atrevido, un coupé compacto pero de dimensiones muy reducidas, que limitaban sus plazas traseras hasta el punto de que este 2+2 era más bien un biplaza con dos plazas traseras de desahogo. Por no hablar de una mecánica tan peculiar como un sistema híbrido asociado a un cambio manual. Siempre pensamos que su chasis pedía a gritos un motor más potente con el que de verdad daría el do de pecho.
A partir de este mes de octubre la gama Honda en España prescindirá del Honda CR-Z, pero también de otro híbrido – el Honda Insight – que no supo plantar cara al Toyota Prius, amo y señor de su categoría. La sección española de Honda ha optado por centrar toda su estrategia comercial en el verdadero revulsivo de la marca en Europa, el 1.6 i-DTEC. Precisamente es este nuevo diésel de 120 CV, presente en los modelos Honda Civic y CR-V, el responsable de que sus ventas estén creciendo este año en nuestro país pese a la caída general de las matriculaciones que está sufriendo el sector. Las unidades de Honda Insight (6) y Honda CR-Z (8) matriculadas en lo que llevamos de año prácticamente se pueden contar con los dedos de las manos.
Evidentemente su desaparición del catálogo español no es ninguna sorpresa, y era solo cuestión de tiempo que se produjese esta noticia.
Nos dejarán dos híbridos muy interesantes por numerosas razones. El Honda Insight, junto con el Prius, fue uno de los pioneros de una nueva generación de híbridos nacidos en el País del Sol Naciente con aptitud transgresora y diseños muy poco convencionales: trasera tipo Kammback, pasos de rueda traseros carenados en su primera generación… También nos demostró que un híbrido no tenía por qué ser tan caro, pero la tecnología del Prius y el músculo comercial y publicitario de Toyota impidieron su éxito en este mercado.
Un concepto que no se ha vuelto a repetir: el coupé híbrido deportivo con cambio manual
Por otro lado, el Honda CR-Z, nacido con el pecado original del que para muchos debía ser el heredero del clásico Honda CR-X y el Civic del Sol y el atrevimiento de una combinación que ningún otro ha vuelto a repetir, una mecánica híbrida asociada a un cambio manual. Nos gustó su diseño, su concepto innovador y lo divertido que resultaba por la chispa eléctrica que, tal y como apuntaba mi compañero Sergio, hace las veces de un improvisado turbo que actúa desde que tocamos el acelerador (el incremento de par del motor eléctrico es instantáneo). Pese a su escasa potencia (124 CV antes de su última actualización recibida en 2013) no necesitaba más caballos, aunque siempre pensamos que ese chasis hubiera sido capaz de rendir al máximo significativamente más potentes. Habremos probado decenas de híbridos, prácticamente todos los que han pasado por los concesionarios españoles, pero seguro que coincidiréis con nosotros en que de entre todos ellos, el Cr-Z es uno de los más peculiares.
Hasta hace prácticamente unas semanas, aún se atendían reservas del Honda CR-Z desde 21.800 euros. A partir de ahora, aquellos que quieran llevarse un Honda CR-Z tendrán que recurrir al mercado de ocasión, que por cierto nos deja ofertas la mar de interesantes. El precio de un CR-Z de 2011-2012 con unos 20 o 30 mil kilómetros ronda los 13.000-14.000 euros.
Fuente: Honda
En Diariomotor: Prueba del Honda CR-Z [2010] | Prueba del Honda CR-Z “facelift” [2013]