Skoda se adentra en el segmento de los compactos. Lo hace por primera vez y de la mano del nuevo Skoda Rapid Spaceback, que llegará a nuestro país abreviado como Skoda Spaceback, reduciendo las cotas posteriores de la berlina, del Skoda Rapid, para dejarnos ante una alternativa situada entre el Skoda Fabia y el Skoda Octavia, con un enfoque económico y con el espacio como principal virtud. Dispuesto a conquistar a un público más joven, con un protagonismo absoluto, al menos esperado, frente a la berlina.
Viajamos hasta Italia, hasta Verona, para ponernos tras el volante del Skoda Spaceback, pare ver qué tal le sienta el cambio estético respecto a la berlina y conocer los detalles de su comercialización en España, donde tiene ya un precio de partida de 11.830 euros, plan PIVE y promoción de lanzamiento incluida.
¿Qué cambia en el Spaceback respecto a la berlina?
La diferencia entre el Skoda Rapid y el Skoda Spaceback es evidente. Desde su frontal hasta el pilar posterior todo se mantiene intacto, incluido su habitáculo. Al llegar al pilar C la caída desemboca en una nueva zaga que respecto a la berlina se ve reducida en 18 centímetros incidiendo en su contra en el espacio disponible para el maletero pero ganando a su favor una imagen más favorecedora para un público más joven.
Estos 18 centímetros menos nos dejan con un maletero que pasa de unos considerables 550 litros en la berlina, como referencia en el segmento en este aspecto, a un maletero de 415 litros, situándose ahora en un punto intermedio, superando por ejemplo al nuevo Mazda 3, con 350 litros, al Renault Mégane o al Volkswagen Golf, con 370 litros, pero por detrás del nuevo Peugeot 308, con 470 litros o el Honda Civic, con 477 litros.
Sus cotas interiores no varían, tampoco la disposición de sus elementos, su ajuste o diseño. Tampoco la oferta de motores ni elemento mecánico alguno salvo el esquema de suspensiones trasero con una nueva amortiguación que no difiere demasiado respecto a lo probado anteriormente en la berlina.
Dinámicamente: el 1.6 TDI de 105 cv como excelente compañero mecánico
Sabiendo que los cambios respecto a la berlina no son demasiado drásticos, contando con la misma plataforma, con las mismas mecánicas y con una dotación de amortiguadores nueva para el tren posterior que aparentemente no transmite profundas diferencias, nos ponemos en marcha con el nuevo Skoda Spaceback por el norte de Italia.
Teniendo en cuenta que sólo un día antes de embarcar hacía Verona me había podido poner al volante del Seat Toledo 1.6 TDI de 90 caballos, en Verona me puse al volante del mismo bloque, el 1.6 TDI de 4 cilindros, pero en esta ocasión con una potencia de 105 caballos, asociado a una transmisión manual de 5 velocidades. Con un comportamiento bastante parejo entre ambos, se nota por supuesto el extra de potencia de esta alternativa aunque a fin de cuentas la esencia, el carácter fundamental de ambas mecánicas es compartido.
La sonoridad mecánica en el habitáculo está bastante contenida (sobre todo en movimiento), no así desde el exterior, pero en líneas generales aún no mostrándose perfecto en este sentido afronta con buena nota un aspecto en el que a priori podríamos pensar que se ha buscado ahorrar.
Un buen nivel de confort sonoro en marcha queda acompañado por una suspensión que se muestra bastante cómoda, sin pecar de excesivo balanceo, así como un dirección y un tacto de la palanca del cambio con un tacto correcto, en ambos casos, no le podemos reprochar pega alguna, ni por una excesiva asistencia a la dirección ni por recorridos poco guiados o un tacto brusco en el caso del cambio. Se comportan ambos de manera intachable, no así como cambio DSG, disponible con la mecánica de 90 caballos, que sí me transmitió cierta brusquedad en determinadas situaciones.
Sin llegar a quedarse “muerto” antes, la entrega de potencia llega desde las 1.500 rpm, ofreciendo entonces una escalada bastante enérgica. Las recuperaciones también son bastante correctas y desde 5ª podremos adelantar sin necesidad de reducir una marcha.
Desde el puesto de conducción, el Rapid Spaceback nos deja con la misma sensación de “honestidad” a la que nos han acostumbrado en la marca. Parece como si este coche, con el que apenas hemos recorrido unas decenas de kilómetros, fuera nuestro coche de toda la vida. Todo se encuentra en un rápido e intuitivo movimiento de mano, algo a lo que sin duda contribuye la continuidad de elementos del grupo VAG. El asiento es cómodo y el entorno, aunque con una mayoría de plásticos duros, no nos transmite una sensación de falta de calidad. Todo lo contrario gracias a un buen nivel de ajuste.
Buen nivel también de espacio, tanto en las plazas delanteras como en las traseras, permitiendo viajar con comodidad a 5 adultos de estatura media. El maletero se ve penalizado sí y ya no nos encontramos con el gran argumento a favor que nos ofrecía la berlina, quedando ahora en la media del segmento.
En líneas generales, la conducción del Spaceback, tal y como ocurre con el Rapid y con el Toledo, es sencilla, pero totalmente eficaz. No ofrece alarde alguno, pero tampoco carencias notables, algo que podemos aplicar también a su acabado. Como es habitual en las presentaciones, dado los recorridos y la necesidad de probar el vehículo no podemos ofrecer un consumo que sirva de referencia real.
El Skoda Spaceback en España
Fuerte apuesta la de este modelo para España frente a la berlina, tanto que desde la marca esperan que de cada 10 Skoda Rapid que se vendan en España 8 sean Spaceback, aunque podemos achacar estas cifras en nuestro mercado a la presencia del Seat Toledo.
Promocionado el Skoda Spaceback tendría un precio de lanzamiento promocionado y con el Plan PIVE incluido de 11.800 euros para el Spaceback TSI de 85 caballos con el acabado Active y de 12.990 euros para el Skoda Spaceback 1.6 TDI de 90 caballos.
Precio, mecánicas y acabados del Skoda Spaceback
El Skoda spaceback cuenta con 3 niveles de acabado para España:
* Active: el acabado de acceso ofrece ya 6 airbags, llantas de 15 pulgadas, elevalunas electricos delanteros, luces diurnas, ESC, aire acondicionado, cierre centralizado y faros antiniebla.
* Ambition: Sobre el acabado Active aparece el MaxiDot (la pantalla del ordenador de abordo situada en la instrumentación), detalles en cuero, lunas tintadas, elevalunas traseros, sistema de sonido Swig con toma USB, el control de cruceroy el volante multifunción.
* Elegance: añade sobre el acabado Ambition las llantas de 16 pulgadas, el climatizador bizona y el sistema de telefonía bluetooth.
Junto a estos acabados Skoda ofrece diferentes paquetes, encontrándonos con el paquete Dynamic, añadiendo cuero a la palanca de cambio y del freno de mano, asientos deportivos en blanco y rojo o negro y plata, pedales de acero y molduras en piano blanco o negro; el paquete Interior, en el que se añade redes portaobjetos en los asientos delanteros, soportes multimedia y una papelera que se acopla a la moldura de la puerta; el Paquete Active añadiendo al acabado Active los elevalunas posteriores y llantas de aleación 15 pulgadas por 240 euros, el paquete Ambition que añade al acabado del mismo nombre llantas de aleación de 16 pulgadas, sistema Bluetooth y volante multiifunción con mandos para el bluetooth por 565 euros o el Paquete Elegance que suma al acabado superior llantas de 17 pulgadas, sensor de aparcamiento trasero, reposabrazos posterior y eSP+ por 215 euros.
Las alternativas Green tec, añaden neumáticos de baja resistencia a la rodadura, Start&Stop y el sistema de recuperación de energía en la frenada.
En el acabado Ambition y Elegance se incluye un panel de instrumentos con molduras de nuevo diseño disponibles en grafito, plata, piano blanco y piano negro.
Entre los extras nos encontramos con el sistema de navegación Amundsen con un sobrecoste de 535 euros, el techo panorámico por 765 euros, los asientos delanteros calefactables por 225 euros, el paquete Xenón por 400 euros o llantas de 17 pulgadas por 205 euros.
La gama del Skoda Spaceback para España, sin promociones, queda conformada de la siguiente manera:
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