El Chevrolet SS aún no ha sido formalmente lanzado, pero ya está obteniendo buenas reviews por parte de la prensa especializada que lo ha podido probar. Esta musculosa berlina es un producto directamente importado de Australia, donde se comercializa como Holden VF Commodore en versiones HSV (Holden Special Vehicles) de hasta 580 CV de potencia. En muchos aspectos, es un sucesor directo del Pontiac G8, de nuevo un Holden Commodore con logotipos de Pontiac. Por desgracia, el Pontiac G8 fue un auténtico fracaso comercial.
Se estimaba que se iban a vender entre 20.000 y 30.000 unidades anuales del Pontiac G8, y no se llegó ni a la mitad de las estimaciones más pesimistas. El Chevrolet SS es un vehículo de nicho, una potente berlina con motor V8 cuyo público objetivo es en gran parte entusiastas de los muscle car y nostálgicos de los años 70. Chevrolet ha fijado un objetivo de ventas mucho más conservador para este australiano expatriado: 3.000 unidades anuales. Un objetivo que esta vez sí que parece fácilmente superable.
Se cree que el precio de venta rondará los 40.000$, vendrá muy equipado de serie y bajo el capó ofrecerá un motor 6.2 LS3 V8 con 415 CV de potencia, asociado a una caja de cambios automática de seis relaciones. Todo parece indicar que si las previsiones de ventas se superan – y con General Motors invirtiendo en el marketing de este producto de manera nootable – se valore la opción de un Chevrolet SS más radical. El SEMA Show ha sido el ejemplo, con varias versiones de aspecto más deportivo presentadas.
Una nueva versión no sólo tendría un aspecto más deportivo, sino que bajo el capó podría montar una versión sobrealimentada del motor 6.2 V8, un LSA con una potencia de hasta 580 CV. Además, estaría asociado a una caja manual de seis relaciones. Como General Motors tiene tantos propulsores diferentes incluso un 7.0 LS7 V8 sería posible, con una potencia de 505 CV. Una versión “a la Camaro Z/28” del Chevrolet SS sería toda una golosina. Por desgracia todo son rumores, y la realidad es que el SS es un vehículo de nicho.
No obstante, el coste de desarrollo sería casi nulo, puesto que en Australia el Commodore HSV ya es la versión de altas prestaciones de la gama Commodore. Sólo una pequeña adaptación sería necesaria. Por el momento nos mantenemos a la espera y soñamos con este futuro. Por su parte, el BMW M5 dormirá un poco menos tranquilo esta noche.
Fuente: Motor Trend
En Diariomotor: Chevrolet SS, la vuelta a los orígenes de la berlina deportiva Made in USA