Como sabréis, cada navidad el equipo de Top Gear publica un DVD de la mano de Jeremy Clarkson. El desafío del presente año se cierne en un viaje de Venecia a Pau durante siete días, en los cuales podremos ver algunas de las mejores monturas del momento.
Jezza arranca desde Venecia a los mandos de un Mercedes SLS AMG Black Series, el pata negra de la división deportiva de Mercedes, que se enfrentará cara a cara con el Ferrari F12 Berlinetta elegido para la ocasión por Richard Hammond. Un V12 italiano contra un V8 alemán… seguro que ambos tienen unas cuantas cosas muy interesantes que contar.
El viaje de ensueño al que todos nos hubiese gustado realizar prosigue en Monza durante su segunda jornada. En el mítico circuito aparecen en escena el todopoderoso Pagani Huayra que se enfrentará al Porsche Cayman. Un duelo totalmente disparatado en el que el benjamín de Porsche apenas tendrá armas suficientes para hacer frente al dios del viento. Cuando parece que Clarkson está totalmente entregado al Cayman aparece el Huayra y claro… las comparaciones son odiosas. Hasta que aparece The Stig…
La ruta continúa hasta Mónaco, a bordo de un Volkswagen Golf GTI y un Ford Fiesta ST. Mientras el GTI presenta sus características señas, el Fiesta aparece como una alternativa más ligera e igualmente placentera de conducir. No te hagas mucho cuerpo a ellos porque, una vez en Mónaco, deciden cambiar de monturas y subirse respectivamente en el Bugatti Veyron Grand Sport Vitesse y el Lamborghini Aventador Roadster, mientras pasean por las calles del Principado.
Los desafíos continúan y en escena aparecen un bonito Ford Model T y un Jaguar E-Type propiedad de Richard Hammond, dispuesto a hacerle sombra a su “hijastro”, el Jaguar F-Type V8, antes de sorprendernos con un desafío entre artilugios a dos ruedas y otros de mar…
Tras una pelea de barro a bordo de unos Z4 y 350Z, el viaje finaliza en su última etapa con un cara a cara entre un Aston Martin Vanquish y un Porsche 911 Carrera S, dos GT de altos vuelos que enamoran a nuestros protagonistas respectivamente. No falta ahora una revisión a fondo de ambos vehículos, en carretera y circuito.
El final de la historia ya la sabéis… ¿verdad? Jezza y Hammond circulaban por Francia a más de 140 km/h en un tramo limitado a 90 km/h cuando fueron cazados por los Gendarmes franceses. Tuvieron que pagar la multa en el acto y sus carnets de conducir fueron decomisados, junto con la prohibición de conducir en Francia durante los tres próximos meses…
Lo mejor es que no te pierdas el vídeo. Como siempre, no tiende desperdicio.
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¡Gracias a David por la pista!
Fuente: Streetfire
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