Peugeot acaba de presentar el restyling de sus modelos 3008 y 5008, una revisión con la que ambos deberán afrontar los próximos dos o tres años hasta la llegada de sus respectivos sutitutos. De momento no hay un cambio de plataforma, sino retoques estéticos y de equipamiento.
Los cambios son suficientes para dar una imagen más fresca a ambos modelos, e incluyen diversos aspectos que vamos a repasar en detalle, pero también vamos a contaros qué tal van los motores HDI de 115 CV y HDI de 150 CV en estos dos familiares, que hemos tenido ocasión de probar. Empezamos.
Novedades en los Peugeot 3008 y 5008 para 2014
Empezamos pasando revista a las novedades que incorporan estos dos familiares, antes de detallar las impresiones de conducción que nos transmitieron ambos vehículos.
En el Peugeot 3008 la principal novedad es estética. Exteriormente, observamos un nuevo frontal, alineado con la estética más reciente de la marca y que incluye ahora luces diurnas led. La trasera recibe una sutil revisión de las ópticas, que dentro de la misma forma muestran ahora otro dibujo interior.
En el apartado de equipamiento, el 3008 añade ahora a sus opciones la cámara de visión trasera, el sistema de detección de obstáculos y el freno de aparcamiento eléctrico. Se añade también un sistema de medición de aparcamientos que nos dice si el coche cabe o no cabe en un estacionamiento al pasar junto a él. No es el aparcamiento autónomo que ofrecen otras marcas, pero ayuda.
El Head-up display (la pantalla transparente que se eleva tras el volante) es ahora multicolor (antes era monocromo en naranja). Siempre he sido fan de este tipo de displays resumidos y el de Peugeot se ve ahora mejorado. Nuevos colores, tapicerías, llantas y pequeños detalles interiores completan los cambios introducidos.
En lo que respecta al Peugeot 5008, las novedades van en la misma línea con un frontal muy renovado, similar al del 3008, con algunos cromados nuevos y luces diurnas led. En equipamiento incorpora el Head-up display (idéntico al de su hermano el 3008) que incluye el distance alert. También dispone de asistente para arranque en pendiente y una cámara de visión trasera, cuya imagen se muestra en la pantalla central al engranar la marcha atrás.
La caja de cambios manual pilotada recibe también la correspondiente actualización para ambos modelos, denominándose ahora ETG6 (ya conocida en otros modelos de Peugeot y Citroën) y que no es sino una reprogramación de la anterior CMP para hacerla más rápida en general y más suave en maniobras.
En la gama de motores no hay novedades, estando disponibles dos gasolina THP de 120 y 155 CV y tres diésel de 115 CV, 150 CV y 163 CV (este último sólo con cambio automático tradicional) tanto en el 3008 como en el 5008. La versión Hybrid-4 sigue disponible en el 3008 como turbodiésel híbrido con tracción integral y 200 CV.
Conducción del Peugeot 5008 2014: espacioso, frugal, cómodo y soso
Comenzamos la jornada de pruebas con un 5008 Allure HDI 115 CV con cambio manual de 6 velocidades. Mi intención era haber probado el nuevo cambio automático ETG6 (manual pilotado) pero Peugeot no puso ni uno solo a nuestra disposición. Curioso.
El Peugeot 5008 es un familiar de 5 + 2 plazas, orientado a un rodar tranquilo y cómodo. El motor HDI de 115 CV, que se llevará bastante más de la mitad del total de ventas, me ha dado la misma sensación en este coche que en otros modelos del grupo: tan ahorrador como anémico.
Sobre el papel, 115 CV deberían ser suficientes para mover el coche con cierta soltura, pero lo cierto es que la respuesta es bastante floja en bajos, carece de verdadero vigor en regímenes medios, y a regímenes altos donde extraemos toda su potencia hace un ruido tan feo que rápidamente nos obliga a subir una marcha y comenzar de nuevo.
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Mi conclusión es que el motor es suficiente para una conducción tranquila y económica (la conducción que hace casi todo el mundo casi todo el tiempo) pero insuficiente para hacer un adelantamiento con garantías a un camión que vaya rápido. Si te gusta sentir el empuje al pisar y además disfrutas conduciendo, claramente no es el coche y claramente tampoco sería el motor adecuado. Si necesitas transportar numerosas personas y objetos con el mínimo coste, continúa leyendo.
En lo tocante a manejo y comportamiento, la dirección es muy liviana, hasta el punto de que parece desconectada del tren delantero, lo que elimina de raíz la diversión que pudiese quedar al volante. Es una pena, porque el bastidor está muy bien plantado sobre una suspensión confortable, pero con un excelente equilibrio entre comodidad y comportamiento. Pena de dirección, insisto.
El cambio tiene un tacto agradable, mecánico y amortiguado, pero la palanca está algo alta y los recorridos son muy largos entre marcha y marcha, lo que le resta agrado de uso. Unos recorridos tan largos tienen el efecto psicológico de que estamos conduciendo un coche muy grande, no sabría explicar por qué.
Por lo que respecta a calidad y acabados, el coche se mantiene en la línea del anterior con una calidad percibida en la media segmento y tal vez algo por debajo de la tendencia de la propia marca. Algunos plásticos duros (baratos) aquí y allá, unos satélites algo pobres tras el volante y un tacto y sonido general que nos dejan más bien indiferentes completan un producto espacioso, funcional y económico, pero no sobresaliente, ni remotamente Premium.
Finalmente, lo que más destaca en este coche no ha cambiado: la posibilidad de manejar 7 asientos individuales que se pueden desplazar y plegar fácilmente de uno en uno, la posibilidad de montar tres sillas Isofix en la fila central (o dos, manteniendo una cómoda plaza adicional). La última fila con dos asientos de emergencia (sólo aptos para niños) nos puede sacar de un apuro, pero a efectos prácticos no se utilizará casi nunca y además anula totalmente el maletero. Por cierto, Peugeot la regala a partir del cambio de modelo sin coste adicional.
La conclusión es que las novedades introducidas en el 5008 le ayudarán a mantenerse vivo en este competidísimo segmento, pero lo harán aún más los importantes descuentos que desde este momento ya ofrece la marca en toda la gama, que ahora mismo parte de los 16.900 € para este mismo motor con acabado Access (básico).
Conducción del Peugeot 3008 2014: sutil lavado de cara
En la segunda parte de esta toma de contacto, tuvimos ocasión de probar un Peugeot 3008 Active HDI 150 CV con cambio manual de 6 velocidades, aunque las fotografías corresponden a la versión Hybrid-4 que fue la que pudimos retratar.
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Lo primero que nos llama la atención es que este motor, cuyas ventas se prevén mucho menores que el HDI de 115 CV es notablemente superior en su rendimiento.
El coche se aprecia ágil, con una aceleración vigorosa y recuperaciones muy solventes en cualquier marcha, hasta el punto de hacernos pensar que podría mover un desarrollo algo más largo en sexta. Tal vez la aerodinámica lo impediría, pero intuitivamente ese último desarrollo parece bastante corto.
La dirección del 3008 sí tiene una resistencia más natural, lo que hace posible que al menos cierto nivel de información sobre el tren delantero llegue hasta nuestras manos.
Con una suspensión también más firme que la de su hermano el 5008, el 3008 es mucho más divertido de conducir, aunque la palanca de cambios tiene unos recorridos igual de largos que en el 5008, lo que le quita algunos puntos.
Con respecto al anterior 3008, prácticamente nada parece haber cambiado en el terreno dinámico. Es un coche muy agradecido en el que la motorización ideal es, a mi modo de ver, este HDI de 150 CV, capaz de moverlo con agrado en cualquier circunstancia y muy superior a la versión de 160 CV (lastrada por un cambio automático que engulle todo el par) y también a la de 115 CV (orientada a la máxima eficiencia pero a costa de demasiados caballos).
Nada ha cambiado en espacio interior o versatilidad, por lo que sigue siendo un coche con una habitabilidad bastante justa, incluso más pequeño interiormente que el recientemente presentado 308, con la salvedad del maletero.
Sus plazas traseras nunca han sido un prodigio de espacio y la flexibilidad de su interior es prácticamente nula, no permitiendo ni siquiera desplazar la banqueta trasera longitudinalmente para ganar maletero (tampoco es que haya mucho margen para eso, todo hay que decirlo).
Lo que sí mantiene intacto este renovado 3008 es ese feeling semi-premium en el habitáculo, en el que el puesto de conducción conjuga una distribución original y atractiva con determinados elementos cromados aquí y allá que componen un conjunto convincente. Incluso juraría que el “asa” de la consola central ha dejado de hacer el molesto ruido que la caracterizaba.
En definitiva, con estos pequeños cambios estéticos el Peugeot 3008 debería mantenerse vigente para los próximos dos o tres años en los que, acompañado de descuentos crecientes, seguirá siendo un top ventas en el mercado nacional, a partir de ahora con un precio base de 16.900 € (en versión Access HDI 115 CV) idéntico al del 5008.
En Diariomotor: Peugeot 3008 Allure 2.0 HDI 163CV C.C. Automático a prueba | Peugeot 3008 Hybrid4 a prueba |