Citroën se adentra en el nutrido segmento de los SUV a golpe de innovación. Llega el Citroën C4 Cactus y lo hace calcando prácticamente en su totalidad todos los rasgos que lucía el modelo conceptual de mismo nombre presentado por la marca en el pasado Salón de Frankfurt.
Una imagen cargada de aire fresco, moderna y apostando por las líneas sencillas que llega con un habitáculo que no se queda ni un paso atrás respecto a la imagen exterior, con nuevas soluciones de diseño en el segmento, motores gasolina PureTech y diésel BlueHDI y un consumo medio de partida en la gama de 3.2 l/100 km.
¿Sorprenderá a nivel de ventas y se hará con una buena cuota de mercado entre los SUV del segmento C?
Propuestas innovadoras y un moderno diseño desde luego no le faltan.
Su diseño: apostando por las líneas sencillas para lograr un aspecto moderno
Citroën ha apostado por las líneas simples, por superficies claras, sin nervios que interrumpan sus paneles, sin acentos que rompan la superficie de aspecto limpio, sin músculo o notas discordantes con el aspecto sencillo que se promulga en cada rincón del Citroën C4 Cactus.
Sorprende encontrarnos con los AirBumps llevados a producción. Esta propuesta de Citroën aboga por cubrir laterales y menor medida el frontal y el paragolpes trasero con microcapsulas de aire recubiertas por una superficie elástica, lista para ofrecer una protección a la carrocería frente a roces, impactos… pero al mismo tiempo, lista también para ofrecer un nuevo punto de personalización, estando disponible en cuatro colores: negro, gris, duna y chocolate, al mismo tiempo que la carrocería se ofrece en 10 tonos y 3 ambientes para su habitáculo.
Respecto al modelo conceptual el principal cambio en su diseño llega por la adopción de un pilar central en su ventanal lateral, pero es digno de reconocimiento el haber llevado a producción de una manera tan fiel el modelo conceptual, sin perder un ápice de modernidad por el camino.
Un doble conjunto óptico en su frontal con especial protagonismo a las ópticas rasgadas, luces de diseño 3D en su zaga y en general, una silueta y una apuesta estética de difícil comparación en el segmento de los C-SUV.
En cifras, el Citroën C4 Cactus cuenta con una longitud de 4.16 metros, con una anchura de 1.73 metros y una altura de 1.48 metros, contando con una distancia entre ejes de 2.60 metros (la batalla es igual a la del Citroën C4). Aunque no se da una cifra exacta por ahora, se señala a que su peso es de 200 kg menos que el de un Citroën C4, por lo que podemos pensar en unos 1.000 – 1.100 kg. Su maletero es de 358 litros.
Su habitáculo: la arriesgada apuesta de diseño continúa. Un salpicadero de líneas sencillas, prescindiendo de consola central y las plazas delanteras inspiradas en un sofá
Si su exterior irradia un diseño moderno su habitáculo no se queda atrás. Un diseño horizontal con la mínima superficie frontal que busca prescindir además del tradicional puente y consola central para dejarnos con una pantalla de 7 pulgadas como principal protagonista, sin perder de vista que para la clásica instrumentación se apuesta también por una pantalla digital. Por concepto es irremediable no acordarse de la configuración interior del BMW i3, lo que dice mucho a favor de la apuesta por la innovación en diseño de la marca francesa.
Desde la pantalla táctil central quedarán articuladas la gran parte de las funciones, incluyendo además del apartado multimedia (con radio digital y música en streaming) y la navegación (con la posibilidad de optar por la ruta con menor consumo de carburante y análisis de las condiciones de circulación), con el control del limitador-regulador de velocidad, el teléfono, un manual del coche y servicios conectados (con conexión 3G).
Precisamente de la mano de esta función de servicios conectados nos encontramos con aplicaciones que nos guiarán hasta la gasolinera más próxima o más barata, la posibilidad de buscar un hotel o un restaurante a través de las Páginas Amarillas y Trip Advisor, información del estado de la circulación en tiempo real a través de Michelin y Coyote…
Además de la configuración de su salpicadero no perdemos tampoco de vista la de las plazas delanteras, inspiradas según Citroën en un sofá, algo que queda patente en el espacio central cubierto por un tapizado que une las dos plazas delanteras. Como exclusiva mundial, Citroën recurre a un nuevo airbag para el acompañante en el techo que permite dotar a la guantera delantera de una nueva disposición.
Sus mecánicas: por ahora una incógnita
Citroën se ha reservado los detalles de las mecánicas del Citroën C4 Cactus. Por ahora sabemos que contará con motores gasolina PureTech y motores diésel BlueHDI de última hornada, pero sin más información sobre niveles de potencia o arquitecturas. Eso sí, ya nos advierte de un consumo de 3.2 l/100 km para la versión más eficiente de su gama.
Como ayudas a la conducción sí se ha confirmado ya la cámara de marcha atrás, el sistema Park Assist (encargado de facilitar la búsqueda de aparcamiento y de realizar la maniobra automáticamente), el sistema Hill Assit de ayuda a la salida en pendiente y el sistema eTouch de asistencia localizada y llamadas de urgencia.
Una nueva filosofía en Citroën
El Citroën C4 Cactus no sólo supone una nueva apuesta en el segmento SUV por parte de Citroën, sino que además es el encargado de sentar las bases y dar paso a la nueva filosofía de la marca, al nuevo camino de su línea de productos.
Con la gama DS encargada de ofrecer el lado más “premium” de Citroën, la propuesta que con el Cactus nos presenta la firma incide, tal y como señalan desde la marca, en ofrecer al cliente más diseño, más confort y más tecnología útil, todo ello a un precio más económico y con nuevas formas de comercializar el producto. Buscando paralelismos en esa filosofía de “ofrecer más a un precio económico”, podemos pensar en Citroën con un enfoque similar al de Skoda dentro del grupo VAG.
Con el C4 Cactus Citroën ofrecerá dos curiosas opciones de compra, apostando por la compra con un precio mensual fijado y sobre todo un curioso formato de compra por kilómetro, pero además, busca una nueva relación con el cliente apostando por un mayor cuidad en el que no faltará el contacto en un plazo de 24 horas con los clientes insatisfechos, devolver el coche lavado después de cada paso por el taller y una aplicación, Citroën Advisor, que busca una mayor transparencia, pudiendo compartir con esta aplicación la opinión sobre un punto de venta de la marca.
Desde Citroën lo definen ya como “una alianza de la creatividad y la tecnología al servicio del bienestas” y “una nueva era”.
Fuente: Citroën
En Diariomotor: Cuenta atrás para el Citroën C4 Cactus: ¿innovador o desmesurado?