Aunque pueda parecer una situación poco habitual, la ocupación de plazas de garaje ajenas está a la orden del día. Pensemos en lo molesto que puede llegar a ser que un día accedas a tu garaje y te encuentres con que tu plaza está ocupada por el coche de un vecino, o en el peor de los casos, por un vehículo abandonado. Al tratarse de un recinto privado la indefensión del afectado aumenta, la grúa municipal no tiene jurisdicción y en muchos casos la única solución que queda es esperar y acudir a los tribunales para solucionarlo.
De llegarse a tal punto, ya hay jurisprudencia que apunta a que el denunciado, ese molesto vecino que aparca su coche en nuestra plaza de garaje, podría enfrentarse a una condena por falta de coacciones y la correspondiente indemnización por los daños ocasionados. Hace apenas unos días la audiencia de Granada condenó con 400 euros al propietario de un vehículo por aparcar repetidamente su coche en la plaza de su vecino. El Juzgado de Instrucción advirtió al demandado de que la reincidencia podría costarle una condena mayor y que en tal caso ya no estaríamos hablando de falta, sino de un delito.
Aunque la ocupación de garajes seguirá produciéndose, veredictos como este ayudan, al menos, a reducir la sensación de indefensión de los que los han sufrido. El condenado tuvo que pagar una multa por la ocupación de 20 días con indemnización de 20 euros al día, una cantidad superior a la de un alquiler de varios meses en la zona e incluso a la de la mayoría de los parking públicos cercanos.
El problema es y seguirá siendo que en la mayoría de los casos el afectado no llega al punto de iniciar un proceso judicial, puesto que generalmente la situación se soluciona contactando con el propietario del coche y el proceso hasta llegar a los juzgados generalmente es demasiado tedioso e incómodo. Al menos el afectado de esta noticia ya no tendrá que preocuparse por la ocupación de su vecino. De persistir en su conducto su vehículo podrá ser retirado por orden judicial y entonces se enfrentará a una condena mayor.
La moraleja de esta historia es que si un vecino ocupa tu garaje y no logras ponerte en contacto con él para que solucione la situación “por las buenas”, es importante iniciar el proceso judicial cuanto antes para que esta situación tan incómoda no se prolongue durante demasiado tiempo. Y, por supuesto, nunca recurrir a tomarte la justicia por tu mano puesto que al final podrías convertirte en el mayor perjudicado del proceso judicial.
Fuente: Granada Hoy
En Diariomotor: 400.000£, el precio de dos Vanquish, por el garaje más caro de Reino Unido