Desde que Pirelli sustituyera en 2010 a la japonesa Bridgestone como proveedor único de neumáticos para la Fórmula 1, su principal problema ha sido la aparente desafección federativa que por reglamento, imposibilitaba el necesario probado de las gamas anuales sobre vehículos que cumplieran con los requisitos normativos vigentes.
Si rizando el rizo, Pirelli se estrenaba en El Circo habiendo sondeado las posibilidades de su producto sobre un monoplaza cedido por Toyota (TF109), un coche que respondía literalmente a otra época de diseño y prestaciones muy diferentes a las de 2010 (usaba KERS y doble difusor cuando el primero permanecía en suspenso y el segundo había sido erradicado), la situación se ha prolongado conforme transcurrían las sucesivas temporadas, originando, como sabemos, innumerables y desgradables contratiempos.
Cansada de este estado de cosas y sin duda apremiada por los acontecimientos habidos en Silverstone 2013, la italiana amenazaba a finales de la sesión pasada con hacer de su capa un sayo, como vulgarmente se dice, si la FIA y los equipos no se implicaban en el desarrollo de los compuestos, a resultas de lo cual, a mediados de este último diciembre, por primera vez desde que Pirelli formara parte del deporte, varios equipos probaron con su coches por aquel entonces actuales, los compuestos que iban a ser utilizados durante la temporada 2014.
Así, lejos de tener que recurrir a subterfugios como el que originó el Pirelligate de mayo pasado, y con el apoyo explícito de la Federación y las escuderías, la milanesa daba inicio a una nueva etapa de relación con la Fórmula 1 que a tenor de los resultados ofrecidos por la gama para este año en los entrenamientos de pretemporada, celebrados como sabemos en Jerez de la Frontera y el circuito de Sakhir, ha resultado un éxito rotundo.
En sintonía con este nuevo estado de cosas, Pirelli, tras recibir el placem correspondiente (el acuerdo se ha logrado en Bahrein entre el 27 de febrero y el 2 de marzo) anunciaba recientemente su programa de pruebas con la temporada lanzada, calendario en el que cada equipo, con los monoplazas con los que está disputando el campeonato, disfrutará de una jornada de pruebas en la que podrá testar las gomas en una experiencia que para la italiana resultará crucial por cuanto arrojará infinidad de datos para la mejora y desarrollo de sus compuestos.
De manera que los próximos 8 y 9 de abril rodarán tras el Gran Premio de Bahrein, Caterham, Mercedes y Williams. Semanas después, una vez concluido el Gran Premio de España (13 y 14 de mayo), lo harán Sauber, Toro Rosso, McLaren y Force India; y con posterioridad al Gran Premio de Gran Bretaña (entre el 8 y 9 de julio) serán Ferrari, Lotus, Red Bull y Marussia las que tengan oportunidad de hacerlo.
Así mismo, tras la última prueba del año, el Gran Premio de Abu Dhabi (del 25 al 26 de noviembre), están previstas dos jornadas en las que los equipos que así lo soliciten, podrán disfrutar de los prototipos para la temporada 2015.
En Diariomotor: Williams Martini Racing