Matthias Müller, Jefe de Porsche, ha confirmado el que era un secreto a voces en el futuro de la firma alemana: la futura generación del Porsche Boxster y Porsche Cayman estrenarán una nueva generación de propulsores bóxer de cuatro cilindros y sobrealimentación mediante turbocompresor. Esta nueva mecánica alcanzará potencias de hasta 400 CV, lo cual podemos entender como un plan de renovación de los actuales bóxer de seis cilindros y aspiración atmosférica.
Porsche no ha ofrecido más detalles en relación a esta nueva familia de mecánicas, teniendo como única pista la confirmación de que el nuevo Porsche Macan también recibirá una nueva mecánica de cuatro cilindros turboalimentado antes de que finalice el presente año 2014. La llegada de esta nueva mecánica abre un nuevo abanico de posibilidades en la gama de Porsche, quedando descartado – por el momento – que estos nuevos cuatro cilindros lleguen al Porsche 911 en su próxima generación.
El futuro de los Boxster y Cayman es sobre cuatro cilindros
Sea como fuere, la hoja de ruta de Porsche en el futuro de sus modelos está claramente influenciada por las tendencias del downsizing donde la sobrealimentación, la inyección directa y los sistemas de parada y arranque automática serán la tónica general apostando por un reducción paulatina del número de pistones y la cilindrada.
Al mismo tiempo, la hibridación también jugará un papel fundamental en el futuro de Porsche. El sistema híbrido enchufable desarrollado para el Porsche Panamera S E-Hybrid cobrará vida de igual forma en el Porsche Cayenne y más tarde contará con variantes específicas para otros modelos como el Porsche Macan o la futura berlina por debajo del Porsche Panamera. Tampoco hay que descartar la idea de ver un Porsche 911 híbrido, un movimiento que Porsche ya confirmó a medio-largo plazo haciendo uso de la evolución que está sufriendo la tecnología generación tras generación.
La llegada de las nuevas mecánicas bóxer de cuatro cilindros no significará, ni mucho menos, la desaparición de los motores bóxer de seis cilindros en Porsche, aunque podemos descartar por completo el ver de nuevo un Boxster o un Cayman de seis cilindros y aspiración atmosférica en la próxima generación que hará su debut en no más de dos años.
Por otro lado, la presentación del Porsche 919 Hybrid para disputar las 24 Horas de Le Mans haciendo uso de un motor V4 de dos litros y turbocompresor, servirá a Porsche para dar alas al regreso de este tipo de mecánicas a su gama tras el uso de motores de cuatro cilindros en modelos como el Porsche 944 o 968.
Fuente: Autoweek
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