Hace tan solo unos días ya os decíamos que Carlos Tavares ha llegado a la dirección de PSA Peugeot Citroën con ganas de transformar el grupo automovilístico francés en algo nuevo, en una empresa irreconocible, altamente rentable y por lo tanto con un enfoque de producto muy diferente del actual. Ya os avanzamos algunos de los detalles de la hoja de ruta de PSA con Tavares y hoy ya podemos adelantaros su nombre y muchísimos detalles muy importantes acerca del devenir de Citroën y Peugeot, como el reposicionamiento de ambas marcas y la separación completa de DS como fabricante premium independiente de Citroën. Agárrense a sus asientos.
La hoja de ruta de los próximos años se llama Back in the Race y cubrirá el periodo desde 2014 a 2018. Carlos Tavares piensa sobre todo a corto plazo, en salir de una situación complicada, pero también a largo plazo. Citroën y Peugeot reducirán su gama de productos casi a la mitad de aquí a 2020. Se trata de un recorte progresivo y espaciado en el tiempo que por lo tanto no debería afectar dramáticamente a sus ventas, sobre todo si tenemos en cuenta que se centrarán especialmente en los nichos más populares y rentables.
En 2020, PSA debería tener una gama limitada a 26 productos con un enfoque variopinto, complementarios y en ningún caso manteniendo la rivalidad existente hoy por hoy entre los modelos Peugeot y Citroën. Para la gama DS, Tavares tiene un plan ambicioso, potenciar su independencia, libertad y exclusividad liberándolo del sello Citroën.
Resulta interesante que en un plan urgente y cortoplacista en muchos aspectos, Tavares no esté preocupado por las ventas a corto plazo de DS sino por su crecimiento a largo plazo. Es consciente de que una marca no nace y crece exponencialmente en unos años, que la tradición, incluso para una sección de una marca con solera como Citroën, es importante para cautivar al cliente.
Está claro que DS aún tardará en alcanzar un volumen de ventas importante. Pero también estamos convencidos de que, por su enfoque, Carlos Tavares cree en ella por el alto potencial de alcanzar un gran margen de beneficios por cada modelo que salga de fábrica, también por su versatilidad a la hora de reutilizar plataformas del grupo.
PSA también avisa que de aquí a 2020 triplicarán sus volúmenes en China gracias a la alianza con Dongfeng y que habrá un nuevo posicionamiento en Rusia y Latinoamérica. No han dado detalles concretos, pero en esa búsqueda de una mayor rentabilidad es probable que desaparezcan modelos. En los próximos meses desarrollarán un nuevo plan de negocio al respecto enfocado única y exclusivamente en recuperar la rentabilidad.
Peugeot y Citroën también intentarán aumentar su presencia en África y el Mediterráneo y buscar nuevos mercados.
En lo tocante a España como productor importante de PSA, toca cruzar los dedos. Los cambios son delicados para el entramado industrial de constructor, especialmente si estos son tan grandes como plantea Carlos Tavares. No se ha confirmado que vayan a existir nuevos movimientos en las factorías españolas, pero la hoja de ruta de Back in the Race avisa de que habrá inversiones en todas las factorías para mejorar la productividad y también una carrera de fondo para reducir stocks e inventarios.
Fuente: PSA Peugeot Citroën
En Diariomotor: La hoja de ruta de Carlos Tavares: seis pasos enfocados a convertir a PSA Peugeot Citroën en un constructor rentable