Koenigsegg es el único fabricante automovilístico que cuenta con un coche producido en serie cuyas llantas estén fabricadas íntegramente en fibra de carbono. El Koenigsegg Agera es a todas luces uno de los superdeportivos más codiciados del planeta por muchas de las innovaciones que emplea en su creación, y hoy conocemos cómo la fibra de carbono se transforma en llanta.
Si espectacular es conocer como el atronador escape del Agera está fabricado en Titanio haciendo uso de la única impresora en 3D creada para ello, conocer de primera mano cómo es el proceso de fabricación de cada llanta de fibra carbono es todo un lujo que de nuevo nos traen nuestros colegas de Drive. Un verdadero regalo poder contar con el propio Christian Von Koenigsegg para explicarnos de primera mano cómo la idea de ser únicos en el mundo le llevó a apostar por la confección a mano de llantas de fibra de carbono.
La eterna ambición de Christian Von Koenigsegg por hacer de sus modelos los máximos exponentes tecnológicos ha llevado a Koenigsegg a contar entre sus logros más importantes con innovaciones como la suspensión TripleX, el uso en serie de sistemas de impresión 3D, la próxima aplicación de válvulas neumáticas o las avanzadas técnicas con las que ya esculpen cualquier pieza a partir de fibra de carbono.
Del compromiso de encontrar una menor masa suspendida y la necesidad de ofrecer un feeling nunca antes visto en un automóvil capaz de alcanzar los 440 Km/h, Koenigsegg se aventuró en solitario en la idea de instalar de serie llantas de fibra de carbono. El drástico ahorro de peso y la elevada resistencia estructural junto a una nula capacidad de deformación han hecho que el diseño ideado por Koenigsegg haya creado precedentes en la industria.
El proceso, realizado de forma artesanal al igual que todos y cada uno de los elementos que componen el Koenigsegg Agera, comienza con el uso de matrices que servirán como negativos del diseño final. Como si de láminas adhesivas se tratara, la fibra de carbono es depositada trama a trama por parte de un operario con su pericia como única herramienta. Tanto la precisión en la elaboración del patrón final como en la estructura son obra exclusiva del buen hacer de los trabajadores de la marca sueca.
La fibra de carbono empleada en la fabricación de las llantas recibe el nombre de Prepeg y es muy similar a la que se emplea en Fórmula 1. Cada una de las llantas de carbono instaladas en el Koenigsegg Agera One:1 tiene un peso inferior a los 6 kilogramos – lo que supone un ahorro de peso del 40% respecto a una llanta de aleación de Aluminio . y es tan mínima la necesidad de equilibrado que sólo con el uso de la válvula metálica de inflado se consigue el balance óptima en cada llanta.
Fuente: Drive
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