Estoy hastiado de lo políticamente correcto o, mejor dicho, de esa doble moral que promueven nuestra sociedad moderna. Anunciar un deportivo haciendo lo que hacen todos los deportivos, ir rápido, está mal visto. Hacer apología de la velocidad es poco menos que un delito. Me cabrea que los reguladores pongan límites a la creatividad, e incluso decidan retirar de la circulación un anuncio, como es el caso del de los nuevos BMW M4 Cabrio en Reino Unido. Un anuncio que aún por encima se basa en el vídeo más calmado y aburrido que recuerde de un M. Sinceramente, no sabría diferenciar este anuncio, aparentemente de un deportivo descapotable con todas las letras, del de cualquier utilitario de 70 CV. Si hubieran reducido el corte a diez segundos y solo apareciera una mano cortando el viento, me hubiera parecido mucho más sugerente y evocador que esto.
Así las cosas, el regulador independiente de la publicidad en Reino Unido declara que este anuncio “fomenta la conducción temeraria”, lo cual es “socialmente irresponsable”. Temerario es aguantar un minuto más de esa canción, el riff machacón y el grito metalero fácil. Temerario es ver a un BMW M4 Cabrio rodando en el circuito de Ascari, marcándose alguna que otra cruzada, sin escuchar el rugido del motor y el sonido del neumático marcando de goma el asfalto.
Irresponsable es pensar que por el mero hecho de anunciar un deportivo, en circuito y haciendo lo que hacen todos los deportivos, se va a transmitir un mensaje inadecuado a la sociedad.
Imagino que en BMW habrá hecho tanta gracia destrozar este anuncio, para dejarlo tal y como puedes ver más arriba, como a nosotros verlo. Para poder emitirlo en la página web de la marca en Reino Unido han tenido que autocensurarse hasta límites incomprensibles. Y aún así, el regulador emite una queja y aboga por su retirada. Evidentemente, BMW no ha tardado demasiado en responder con los mismos argumentos que a nosotros nos han llevado a definir a este anuncio como el más aburrido que recordemos de un M.
Es evidente que todo el vídeo, o gran parte de este, está rodado en el Ascari Race Resort, en Ronda, provincia de Málaga. BMW declara que no cruzan líneas continuas, que la velocidad nunca supera los 119 km/h y que el atuendo del protagonista que conduce el BMW M4 y el casco deja claro cuando se debe practicar una conducción deportiva, o cruzar la trasera, y cuando no. Pero el regulador, una vez más, piensa que no han dejado demasiada clara esa línea, esa diferenciación. Y que incluso debajo de la música machacona que han escogido en la edición del vídeo, el sonido del coche acelerando es audible. Sí, el sonido del coche es audible…
Resultado: la autoridad competente para la regulación de la publicidad no acepta las súplicas del BMW y este vídeo no podrá emitirse en la página web de la marca en Reino Unido.
Por suerte no vivimos en Reino Unido. Por suerte, o por desgracia, BMW no nos paga por mostraros este vídeo. Por eso mismo nos quedamos con el vídeo original de los BMW M3 y BMW M4 Coupé en Ascari, el que nos llegó a la prensa, que sin ser perfecto, sí me parece mucho más apropiado y coherente con un M.
Pero evidentemente si lo que queremos es un anuncio evocador, que de verdad venda prestaciones y la rabia que todos esperamos en un BMW M4, nos quedaremos con el vídeo superior, el famoso vídeo de la pista de drifting en el portaaviones.
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Fuente: BMW | ASA Reino Unido
En Diariomotor: BMW transforma un portaaviones en la pista de drift definitiva
