Mientras los japoneses ya nos han empezado a mostrar todas sus cartas en lo que respecta a sus futuros coches de hidrógeno, ¿qué es lo que tienen que decir al respecto los alemanes? De momento muchos guardan cautela. Un responsable de Bosch afirmaba esta semana que la tecnología no será viable hasta 2025 (ver noticia en Reuters). Pensemos que hay que crear una red de distribución de hidrógeno y que su rentabilidad energética, frente a alternativas como el eléctrico de baterías de ion de litio, es como mínimo muy cuestionable. Pero eso no es una excusa válida para no ir vislumbrando el futuro de la tecnología y ahí es donde Ingolstadt ha querido estar presente con el prototipo Audi A7 Sportback h-tron quattro. ¿Cómo sería un sedán de lujo, un Audi A7, alimentado con hidrógeno? ¿Y si además pudiera recargar su batería de litio para obtener una pequeña autonomía eléctrica “pura”?
El Audi A7 Sportback h-tron quattro gozaría de una mecánica eléctrica potente, de 170 kw (230 CV), repartidos en diferentes motores eléctricos cuya configuración permitiría disponer de tracción a las cuatro ruedas sin una conexión física entre ambos ejes. Este detalle es muy importante, por el ahorro de peso y espacio que puede suponer, algo primordial en un vehículo que necesita hacer sitio a unos contenedores de hidrógeno presurizados.
Una autonomía muy superior a la de la mayoría de los eléctricos
También resulta muy interesante que esta tecnología permita una autonomía de hasta 500 kilómetros, según el ciclo europeo, con una recarga completa de los depósitos de hidrógeno. El Audi A7 Sportback h-tron quattro consumiría un kilogramo de hidrógeno cada 100 kilómetros, en un proceso que consume oxígeno y libera vapor de agua, en definitiva, en un proceso limpio y carente de emisiones contaminantes locales. Es un proceso muy limpio y eficiente, eso es cierto, pero también hay que tener en cuenta el coste energético – y no solo económico – de la generación del hidrógeno, de su tratamiento y de su distribución. Esa es la incógnita más importante que tenemos para valorar si de verdad esta tecnología es sostenible.
Lo mejor de dos mundos: la pila de combustible y el híbrido enchufable
Para rizar el rizo, Audi ha añadido un componente que nos encanta. El Audi A7 Sportback h-tron quattro también goza de tecnología híbrida enchufable, es decir, además del sistema de pila de combustible, de sus motores eléctricos y de sus depósitos de hidrógeno, contará con una batería de ión de litio de 8,8 kWh de capacidad, que puede recargarse de forma sencilla y rápida en cualquier toma eléctrica. Esa batería permite una autonomía eléctrica de hasta 50 kilómetros, de manera que en los desplazamientos cortos del día a día podría prescindir del hidrógeno acumulado en sus depósitos.
Fuente: Audi
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