Hace tiempo que Aston Martin se subió al carro de las ediciones especiales, en ocasiones de tirada limitada, de sus deportivos y grandes turismos, de la distinción y la exclusividad que otorgan ciertos homenajes históricos y detalles que en ocasiones podrían parecernos demasiado atrevidos para un gentlemen, un sir británico, un Aston. La excusa para obsequiar a sus clientes en esta ocasión con una edición especial basada en el Aston Martin Vanquish ha sido el 60 aniversario de la formación de Aston Martin Works, del traslado de su fábrica a la instalaciones de Newport Pagnell, en Buckinghamshire, donde entre 1955 y 2007 se fabricaron más de 15.000 vehículos.
El Aston Martin Vanquish Works 60 Aniversario pretende rendir un sentido homenaje a ese acontecimiento sucedido hace ahora seis décadas y por ello la sección que se encarga de los pedidos más exclusivos de sus clientes, Q by Aston Martin, ha preparado seis unidades, una por cada década, que están pensadas como futuro clásico de coleccionista.
Fibra de carbono y detalles en amarillo
El detalle más irreverente y llamativo lo tenemos en la decisión de Aston Martin de ataviar a esta edición especial del Vanquish con reflejos amarillos en su carrocería, en las características branquias de las aletas delanteras, y en sus llantas de aleación de 20”. Ninguno de estos seis Aston Martin será exactamente igual que el anterior.
Sabemos que cada uno empleará diferentes acabados de carrocería, revestimientos interiores y tapizados, aunque la tónica dominante de todos ellos seguirá siendo el detalle amarillo de llantas, branquias y costuras en el habitáculo, y el empleo de fibra de carbono en muchos detalles interiores y exteriores.
La mecánica del Aston Martin Vanquish permanecerá inalterada. Hablamos de un V12 de 6.0 litros y 565 CV asociado a un cambio automático Touchtronic, de tercera generación, con ocho velocidades, y colocado justo encima del eje trasero. Hablamos de un 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y de una velocidad punta de 295 km/h. Las versiones estarán basadas en los Aston Martin Vanquish coupé y en su homólogo descapotable, el Aston Martin Vanquish Volante.
Un relicario sobre ruedas
Aston Martin también se ha permitido llevar su homenaje y el culto a sus clásicos hasta sus últimas consecuencias, hasta el fetichismo y el culto a las reliquias. El detalle extrovertido e irreverente de sus llantas amarillas contrasta con la brillante idea que habrían tenido de aprovechar el metal que un día formó parte del pistón de alguno de sus deportivos más populares para dar forma a los botones y las interfaces giratorias que nos encontramos en la consola central de esta edición exclusiva.
Ese metal empleado en estas interfaces giratorias ha sido fundido directamente de pistones pertenecientes al DB 2/4 MK II (1955-1965), el DB5 (1965-1975), el V8 Coupé (1975-1985), el V8 Vantage X-pack (1985-1995), el V8 Vantage Supercharged (1995-2005) y el Vanquish original (1995-2005).
Fuente: Aston Martin
En Diariomotor: Cien años de belleza, cien años de potencia y superación. Por los siglos de los siglos, Aston Martin.
