¡Qué bonito es el condenado! Aunque si eres un delincuente, y te toca huir del nuevo Ford Police Interceptor Utility, estoy seguro de que no lo verás con los mismos ojos. Ford nos cuenta cómo han desarrollado la última máquina creada para servir y proteger a los ciudadanos. En el año 2000 se creaba una comisión de consejeros, con experiencia en labores de seguridad y en las diferentes agencias estadounidenses, para desarrollar el vehículo de patrulla definitivo. Y este nuevo Interceptor basado en el Ford Explorer es el resultado de muchas de las peticiones que estos 25 expertos solicitaron a Ford para mejorar las labores policiales. Peticiones que redundaron en 10 tecnologías y curiosidades muy frikis, de las que te hablaremos a continuación.
Ford asegura que actualmente gozan del 55% del mercado de vehículos policiales de Estados Unidos. Sus coches se producen en la factoría de ensamblado de Chicago, junto con el resto de unidades de Ford Taurus, Ford Explorer y Lincoln MKS destinadas a particulares. Una vez ensamblados, o parcialmente ensamblados, se trasladan a una factoría aledaña en la que se completa la adaptación policial.
1. Dos motores. A gusto del consumidor. Para satisfacer las demandas de las diferentes agencias que solicitarán el nuevo Ford Police Interceptor Utility se ofrecerán dos alternativas mecánicas, un 3.7 V6 atmosférico de 304 CV y un 3.5 EcoBoost V6 (turbo) de 365 CV. Ford asegura que en las pruebas preliminares se ha tenido muy en cuenta la mejora de sus prestaciones y que su puesta a punto ha sido pensada para dar la talla en persecuciones de alta velocidad.
2. Cambio automático con «Modo Persecución». En vez de un modo deportivo al uso, este vehículo policial contará con lo que Ford ha denominado como «Modo Persecución». Básicamente es un modo deportivo, que busca una reacción más agresiva del cambio bajando o subiendo marchas para desarrollar sus mejores prestaciones. Se activa automáticamente cuando detecta una frenada de emergencia o aceleraciones muy intensas por parte del conductor.
3. Asistente para facilitar la maniobra del contrabandista. Ford no nos cuenta exactamente cómo funciona, pero sí nos adelanta que el software del control de estabilidad y, sobre todo, el cambio, han sido preparados para facilitar la maniobra del contrabandista. Esta maniobra consiste en circular marcha atrás, por ejemplo, en el transcurso de una persecución y realizar un giro brusco de 180º para circular en el mismo sentido de la marcha, pero con la marcha directa engranada. Entendemos por lo tanto que el cambio es capaz de pasar de marcha atrás a directa en un movimiento rápido, sin necesidad de pasar por Neutral o Parking.
4. Llantas de acero y frenos ventilados. En un coche policial como este no es nada práctico utilizar unas llantas de aluminio con acabado espectacular. Lo más práctico es utilizar una llanta de acero. Ford ha intentado que el diseño de estas llantas facilite la refrigeración de un equipo de frenos mejorados, por si la cosa se pone fea y la persecución se alarga más de lo previsto.
5. Neumáticos de patrulla. En general, todo el coche se ha perfeccionado para ofrecer un buen rendimiento en condiciones complejas, para no quedar atascado en una salida de la carretera, algo común en una persecución – al menos en esas que vemos en Youtube – y a la vez rendir bien en alta velocidad. Los neumáticos también han sido creados para atender a las exigencias del trabajo policial. Según dice Ford sus neumáticos llegan a durar más de 50.000 millas, unos 80.000 kilómetros. Tendremos que preguntarles cómo lo hacen para conseguir esa durabilidad en un SUV de su tamaño y su peso.
6. Un alto grado de personalización. Ford cuenta que sus vehículos policiales se distribuyen en 80 mercados internacionales y que existen 125 opciones diferentes (combinaciones de vehículo y equipamiento) y multitud de accesorios, que van desde los adhesivos de la carrocería, hasta la iluminación y la sirena.
7. 25 combinaciones de sistemas de iluminación. Según la agencia que solicite un Interceptor y según sus necesidades, esta podrá escoger de entre 25 sistemas diferentes de iluminación de emergencia, que ya no solo se limita a la barra horizontal del techo, sino también a los LED integrados en el lugar de los antiniebla, en la parrilla frontal y en los retrovisores. En Ford dicen que se sentían nostálgicos y dejaron un modo de iluminación intermitente blanca, como en los vehículos policiales de antaño.
8. Modo vigilancia, un robot que vigila tus espaldas. Si por casualidad un agente está despistado o se queda dormido haciendo labores de vigilancia, con este modo el coche es capaz de avisarle si se aproxima alguien por la trasera del vehículo y de bloquear automáticamente las puertas y cerrar las ventanas.
9. Maletero con trampilla y bloqueo con temporizador. Permite acceder al maletero desde el interior y recoger los artilugios propios que se suelen guardar en este sitio para ejercer la labor policial.
10. Cámara trasera con sistema de lavado. Los agentes podrán equipar una cámara trasera que mostrará las imágenes en una pantalla de 4″ u, opcionalmente, en el propio retrovisor interior. En ambos casos contaría con un sistema de limpieza automático.
Fuente: Ford
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