Resulta curioso, cuanto menos, el caso de BMW. Es una de las pocas marcas que no se ha dejado engatusar por el señuelo de las pantallas táctiles, que ha confiado en los últimos años toda su estrategia de equipos de entretenimiento a su interfaz giratoria iDrive en la consola central. Yo soy fan de esa idea. Siempre me oiréis (y me leeréis) decir que la idea de una interfaz giratoria es mucho más cómoda, precisa y segura, que la mayoría de las pantallas táctiles del mercado. Ahora bien, repentinamente BMW ha decidido que el uso de pantallas táctiles es una buena idea. Una idea genial si añadimos funciones gestuales a los comandos táctiles, es decir, comandos que podrás seleccionar agitando tus manos en el aire. Y el encargado de estrenar esta y otras muchas tecnologías no será otro que su buque insignia, el BMW Serie 7.
La idea me parece brillante. Pero por responsabilidad editorial me voy a poner el sombrero de escéptico. Escéptico, porque aunque la idea de manejar el equipo de entretenimiento de un coche moviendo las manos en el aire, como si estuviera jugando con los amigos a la videoconsola, me resulta interesante y divertida, pero ¿qué hay de la seguridad?
Vayamos por partes. Empecemos analizando lo que podremos hacer con esta pantalla gestual con imágenes reales del sistema que utilizará la nueva generación de BMW Serie 7. Por cierto, olvídate del aspecto del salpicadero y el volante, BMW lo ha cubierto con camuflaje para que no veamos su diseño hasta que lo presenten definitivamente. Lógico.
Acerca tu dedo para descolgar el teléfono, da una palmadita hacia la derecha, con desdén, para no descolgarlo y rechazar la llamada. Muy cool, ¿pero esto no podíamos hacerlo ya con un botón instalado específicamente en el volante? El botón en el volante, por lo que veo, sigue (ver imagen).
Hacer ceros con un dedo para subir o bajar el volumen del equipo de sonido. Una vez más el volante ya está equipado con un botón específico para realizar tal cosa. En cualquier caso, sigue siendo muy cool ir conduciendo y hacer ceros con un dedo para subir o bajar el volumen.
Desplazarnos con dos dedos por el menú de funciones. Aquí la cosa va mejorando. Es cierto que esto es muy cómodo hacerlo con la interfaz iDrive giratoria de toda la vida. Pero si el reconocimiento es preciso, cómodo y seguro, me parece una idea interesante.
Podrás seleccionar elementos a distancia.
Pero también hacer clic pulsando la pantalla, por ejemplo para seleccionar un botón del teclado numérico, como en cualquier otro sistema táctil del mercado.
Los selectores del climatizador también serán táctiles.
Otro de los detalles que ya vemos en este vídeo es la presencia de una pantalla que además de táctil es capacitiva y precisa, permitiendo movimientos de dos dedos para arrastrar y ampliar, o alejar, por ejemplo manejando el navegador.
Dicho lo cual, me reservo mi opinión acerca de si este sistema será un gran bluff, o un futuro estándar que cambiará por completo nuestra interacción con el coche. No creo que BMW sea el tipo de marca que lanza globos sonda, que prueba tecnologías para «ver que sucede», y que al primer problema, retrocede. Menos aún cuando esta tecnología la estrenará su modelo más lujoso, su berlina de representación, el BMW Serie 7.
Por otro lado, BMW no es la única marca interesada en esta tecnología. Entre BMW y Volkswagen van a disputarse el mérito, que en los tiempos que corren sinceramente no me parece para tanto, de ser las primeras marcas en incorporar pantallas táctiles que no reconocen el movimiento de tus manos, y no requieren contacto con tus dedos, para ejecutar comandos.
De hecho, Volkswagen estrenará esta tecnología en un envase muy diferente, en una furgoneta, la nueva Volkswagen Transporter T6.
Fuente: BMW
En Diariomotor: Control táctil y reconocimiento de gestos para el próximo BMW iDrive