Takata sigue generando importantes quebraderos de cabeza a la industria del automóvil, con el caso de los airbags defectuosos a los cuales se atribuye el fallecimiento de decenas de pasajeros. La noticia de la mañana la tenemos en la confirmación de que las últimas llamadas de revisión de Toyota también han llegado a Europa. El número de vehículos llamados a revisión en España sería de 124.832 coches, pertenecientes a las gamas Corolla, Yaris y Avensis, y fabricados entre abril de 2003 y diciembre de 2008.
La noticia la publicaba Automotive News, de la mano de un portavoz de Toyota en Europa, que habría adelantado que el número de coches llamados a revisión en Europa alcanzaría las 1.729.000 unidades. Los países más afectados serían Reino Unido (214.115 unidades), Alemania (212.898), Italia (159.456), Rusia y Bielorrusia (133.676), España (124.832 coches) y Francia (114.078). Recordemos que hace unos semanas se daba a conocer la mayor llamada a revisión de la historia, más de 34 millones de coches, también por el mencionado asunto de los airbag Takata.
A tenor de la habitual transparencia del fabricante japonés en lo concerniente a temas de seguridad y llamadas a revisión, imaginamos que no tardará en llegar un parte más detallado sobre los modelos afectados.
¿Cuál es el problema de los airbag de Takata?
Recordemos que en los últimos meses el caso de Takata ha generado gran preocupación en el sector. Y no es para menos. Y aunque de momento el país más afectado, y también preocupado por el problema, sea Estados Unidos, con las investigaciones que está llevando a cabo la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), en Europa no parece que vayamos a quedarnos fuera de un problema que nos recuerda la importancia de extremar la vigilancia de los sistemas de seguridad de nuestros automóviles.
El problema de los airbag de Takata fue localizado en la degradación de los actuadores, especialmente en condiciones de alta humedad. Esos actuadores, que habitualmente nos salvan la vida inflando el airbag gracias a una pequeña carga explosiva, habrían evidenciado un defecto que produce una explosión más violenta y que en algunos accidentes habría proyectado trozos del soporte del airbag y su estructura, en forma de metralla, contra la cara del conductor y su acompañante. Con lo cual, estaríamos ante un problema realmente grave, hasta el punto de haber sido asociado con algunos fallecimientos en accidentes que, a priori, no revestían un peligro mortal para sus ocupantes.
Por nuestra parte, y aunque el problema en nuestro continente no esté tan extendido como en Estados Unidos, solo esperar que en Europa, tanto los fabricantes, como las administraciones públicas, se tomen el asunto con la misma diligencia que está actuando la NHTSA en Estados Unidos.
En Diariomotor: Sin precedentes: 34 millones de coches llamados a revisión por airbags Takata defectuosos