El mundo de los coches de superlujo está repleto de extras de altísimo valor, en algunos casos superior al de un buen coche. Pero posiblemente el extra que se lleva la palma es el Mulliner Tourbillon del nuevo Bentley Bentayga. Se trata de un reloj Breitling automático que podemos situar entre las dos toberas centrales del salpicadero. Una pieza de lujo que reemplaza al Breitling – más convencional – que el Bentayga equipa de serie. Pero este reloj es muy especial: cuesta 200.000 euros, casi tanto como el resto del coche.
El Breitling Mulliner Tourbillon es un reloj automático de primer nivel. Realmente se basa en el Mulliner Tourbillon, un reloj de pulsera encargado por Bentley a Breitling, y que se se vendió en exclusiva edición limitada por un precio de 150.000 euros. No debería extrañarnos el precio de estos carísimos relojes, en el fondo son piezas construidas a mano con tolerancias micrométricas, y a menudo emplean materiales como oro o platino, cuando no hablamos de diamantes o piedras preciosas que llevan su valor por encima de las 7 cifras.
El Mulliner Tourbillon que se monta en el Bentayga podrá estar basado en el mecanismo del reloj de pulsera, pero es un reloj diferente. Su carcasa está construida a partir de un bloque mecanizado de oro macizo . Un bloque de oro – que puede ser oro blanco o rosado – macizo, en el que se encaja una esfera engarzada con diamantes, ocho para ser más concretos. Los números y agujas tienen un tamaño superior para garantizar su buena visibilidad. Estoy seguro de que su esfera también es personalizable a gusto del cliente.
Un cliente que va a desembolsar casi 200.000 euros por un reloj que si no se usa, agota su reserva de movimiento y se detiene. Es necesario «dar cuerda» a este reloj. Y lo hace un mecanismo automático cada hora, girándolo dos veces en sentido antihorario. Pero también hay un pequeño botón que podemos pulsar para hacerlo girar a voluntad. Atentos a su funcionamiento, en un pequeño vídeo grabado por Chris Harris:
Ahora bien, espero que si te compras un Bentayga lo tengas bien guardado en tu garaje. Porque si alguien «te lo abre» se podría llevar algo más que una radio.
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