Puede parecerte absurdo. Tal vez lo sea. Pero existe una batalla encubierta entre fabricantes alemanes por demostrar quién tiene los mejores faros. Tan sencillo como eso. Para comprender la batalla, hay que ser conscientes del carácter y la dedicación de los ingenieros alemanes. La primera escaramuza, se libró en el ámbito de los faros láser. Cuando creíamos que Audi había colado un gol por la escuadra a BMW, lanzando un Audi R8 LMX con faros láser, llegaba el BMW i8 e introducía opcionalmente esta tecnología, adelantándose por muy poco. De nuevo BMW ha vuelto a adelantarse en una batalla que pensábamos se llevaría Audi, que en Frankfurt ya nos anticipaba una tecnología que veremos en sus productos muy pronto. Pero, de momento, el primer modelo del mercado en utilizar pilotos OLED será el BMW M4 GTS. ¿Y por qué es tan interesante esta tecnología?
Aunque pienses que los pilotos traseros de un coche apenas dejan margen para la innovación, que está todo inventado, los fabricantes aún tienen por delante diferentes retos para mejorar la tecnología empleada en ellos. Lo deseable es que estos pilotos gocen de buena visibilidad, sean compactos y ligeros, eficientes, no se calienten en exceso ni se fundan, y además se adapten a las caprichosas formas que busca cada fabricante para definir su imagen de marca. Al parecer, los pilotos OLED son capaces de superar en todos estos aspectos a los pilotos LED, o los basados en lámparas incandescentes.
¿En qué consiste entonces la tecnología OLED empleada por el BMW M4?
A diferencia de la iluminación LED, que exige una serie de puntos LED situados estratégicamente para crear una silueta en los pilotos traseros, los sistemas OLED (diodos orgánicos emisores de luz) se basan en capas muy finas con semiconductores que son capaces de crear una iluminación homogénea. Este efecto puede emularse utilizando LED convencionales, pero la gran ventaja de estos OLED es que desde la electrónica el fabricante puede jugar con la iluminación de cada módulo haciendo que esas siluetas cambien dinámicamente. De manera que con ellos es relativamente sencillo crear indicadores de dirección progresivos, o luces de freno progresivas, muy atractivas visualmente, y sobre todo intuitivas, para que los vehículos que nos preceden sepan hacia donde nos dirigimos o estén advertidos del peligro de una frenada de emergencia.
La tecnología OLED empleada en el BMW M4 GTS garantiza que sus pilotos traseros también sean más ligeros y compactos. El grosor de una lámina OLED es de 1.4 milímetros.
Como ya os decíamos, se espera que esta tecnología del M4 GTS la hereden otros modelos de BMW y que, por su naturaleza, no sea tan cara e inaccesible como los faros láser. Por otro lado, Audi también planea su lanzamiento en los próximos modelos, y muy probablemente el año que viene tengamos noticias de algún lanzamiento que estrene sus primeros pilotos traseros OLED.
Fuente: BMW
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