En pleno centro de Madrid, en el añejo “barrio de las letras”, con la estación de atocha marcando el horizonte, se ha presentado la nueva generación del MINI Clubman, una nueva generación que ya hemos podido conocer, que ya hemos podido conducir y que nos propone un importante salto: con este modelo MINI se adentra en el segmento de los compactos premium, ¿nos habrá convencido el salto generacional del MINI Clubman?
Un salto generacional que vale por un salto de segmento
El nuevo MINI Clubman ha cambiado considerablemente con este salto generacional. Ha crecido y ha perdido la característica puerta de apertura suicida para ganar por el camino una nueva pareja de puertas convencionales, convirtiéndose ahora no sólo en un modelo más práctico, más racional… sino también en coche dispuesto a adentrarse en un nuevo segmento para la firma: el de los compactos.
Más allá de cambio de segmento, de esta evolución, debemos fijarnos en esa evolución de sus puertas, en la aparición de las puertas posteriores en detrimento de una puerta de apertura suicida que desde el lado del copiloto le confería una peculiaridad a la ya de por si marcada personalidad MINI, ¿el motivo? Hacer de este nuevo MINI Clubman un coche menos polarizado y hacer aún más racional la compra del modelo más racional de MINI.
A título personal he de confesar que soy un auténtico detractor de este cambio. Me encantaba la puerta de apertura suicida, me parecía además muy acorde a la filosofía MINI, a esa carga de identidad, a ese “Not normal” que blandieron desde la marca tiempo atrás como eslogan.
No sólo tiene más puertas, también es más grande:
Vale, el nuevo MINI Clubman ha crecido y ha ganado unas nuevas puertas por el camino, pero ¿cómo se siente en términos de diseño el cambio? ¿Cuáles son las cotas de este nuevo MINI Clubman?
Comenzando por su diseño, por la línea de este nuevo MINI Clubman, nos encontramos con unos trazos de aspecto más redondeado que los de su predecesor. Sus nuevas cotas están realmente bien armonizadas y se siente quizá un poco menos “touring” que su predecesor.
Sin duda la zaga es el punto más llamativo. Sus ópticas encargadas de enfatizar la anchura, los tiradores, el “Clubman” sobre el portón…
El nuevo MINI Clubman cuenta con una longitud de 4.25 metros, una anchura de 1.8 metros y una altura de 1.44 metros, siendo su distancia entre ejes de 2.67 metros.
Si comparamos estas cotas con el MINI 5 puertas nos encontramos con que es 270 mm más largo y 90 m más ancho, contando además con una batalla mayor, 100 mm más grande.
Su maletero es de 360 litros y puede aumentar hasta los 1.250 litros si plegamos sus asientos.
Interior MINI y cotas más que correctas:
Me encanta el habitáculo de los MINI, el diseño de su salpicadero. Me encanta esa pantalla central del sistema multimedia con el marco LED lumínico, con la paleta de colores escogida para los menús del mencionado sistema multimedia. La gestión del climatizador, el volumen, la velocidad… todo actúa sobre el LED que recorre la circunferencia central… y me encanta como le queda.
La calidad del interior de MINI es indiscutible. Buenos detalles por doquier, buenos ajustes y calidades… Desde ese botón de arranque de inspiración aeronáutica a los reposacabezas, acabados con la Union Jack, pasando por las inserciones en aluminio de su salpicadero o el sistema de luz ambiental. Me encanta el interior de MINI y claro, este nuevo MINI Clubman no iba a ser una excepción.
Los cromados, lo mandos en forma de interruptor, los diseños redondeados de multitud de detalles, el buen cuero de su tapicería… el buen hacer en lo que a acabados se refiere se plasma incluso en el fondo de los huecos portaobjetos, cubiertos de una superficie antideslizante acabada con un aspecto similar al tartán.
En lo que concierbe a su habitabilidad nos encontramos con unas buenas plazas delanteras en las que bien se siente el extra de anchura de esta nueva alternativa y unas plazas posteriores lógicas y con un tamaño más que correcto en términos de altura y espacio longitudinal.
Su maletero también nos ofrece una capacidad de carga aprovechable y con 360 litros se posiciona en la media de los compactos, parejo por ejemplo al BMW Serie 1, ligeramente por encima por ejemplo de un Mercedes Clase A.
Pero… ¿cómo se siente dinámicamente este nuevo MINI Clubman?
En esta primera toma de contacto hemos tenido la oportunidad de probar un MINI Cooper Clubman, una alternativa que cuenta con un motor sobrealimentado gasolina de 3 cilindros y 1.5 litros que desarrolla una potencia de 136 caballos. Nuestra ruta discurre por parte del centro de Madrid y el noroeste más próximo a la capital, algún puerto, alguna zona de curvas, autopista…
Me sorprende desde los primeros metros la suavidad de rodadura, la suavidad de la entrega de su propulsor y el buen aislamiento de este MINI Clubman. Rodando a ritmos altos sólo entorpece levemente la acústica interior cierto ruido aerodinámico próximo a los marcos delanteros, pero la experiencia de rodadura, el confort en marcha es realmente alto.
Al primer giro de volante aprecias esa dirección tan MINI, con peso y directa, aprecias también el cambio MINI, de recorridos cortos y bien guiados y unas suspensiones firmes, prometedoras. Todos los mandos saben a MINI, pero claro, ya no estamos ante un pequeño utilitario de 3 puertas, el incremento de cotas se nota, repercutiendo un chasis que en los cambios de virajes se muestra ligeramente más lastrado, una sensación que aparece también en las frenadas.
No, no es que el MINI Clubman tenga una mala dinámica, ni mucho menos, me gustan todos esos elementos, la mencionada dirección, sus duras suspensiones, pero hay que comprender que ya no estamos hablando de un coche pequeño, con la agilidad en el cambio de reacciones que ello implica, sino que estamos hablando de un compacto y ante tal nuevo segmento, cumple realmente bien en el apartado dinámico.
Entrando en la valoración de su propulsor, unas pequeñas notas previas a una prueba de mayor duración, cabe elogiar el comportamiento de este tres cilindros. De aceleración suave y progresiva ascendencia, de escasas, muy escasas, nulas, vibraciones y una confortable melodía, bien atenuada, este tres cilindros nos ofrece un comportamiento realmente capaz para el día a día ofreciéndonos además cruceros a muy buen ritmo y una aceleración no penalizada a pesar de sentir unos desarrollos del cambio algo largos.
Me gustó este propulsor y me parece que es una opción realmente lógica para aquel que busca hacer de este MINI Clubman su coche principal ahora que es ya un compacto.
¿cómo queda conformada por ahora la gama del nuevo MINI Clubman?
Por motorización y precio la gama del MINI Clubman queda conformada de la siguiente forma:
Gasolina
MINI One – 3 cilindros, 1.5 litros – 102 cv – 23.800 euros
MINI Cooper – 3 cilindros, 1.5 litros – 136 cv – 26.200 euros
MINI Cooper S – 4 cilindros, 2 litros – 192 cv – 29.900 euros
Diésel
MINI One D – 3 cilindros, 1.5 litros – 116 cv – 24.800 euros
MINI Cooper D – 4 cilindros , 2 litros – 150 cv – 28.400 euros
MINI Cooper SD – 4 cilindros, 2 litros – 190 cv – 31.900 euros
Como equipamiento de serie no falta el volante deportivo en cuero, el climatizador bizona, el sensor de luz y lluvia, bluetooth, paquete de iluminación interior, paquete de compartimentos y ordenador de a bordo, contando desde el acabado One y One D con los faros antiniebla y las llantas en 16 pulgadas.
Como equipamiento adicional en los Cooper y Cooper D se añade la radio visual Boost, los faros LED y los faros antiniebla también en LED mientras que los Cooper S y Cooper SD además cuentan con el volante multifunción y llantas de 17 pulgadas junto a los aditivos estéticos propios de esta alternativa.
A mayores MINI ofrece dos líneas de equipamiento adicional, los paquete Chili y Pepper, que cuentan con los siguientes elementos y los siguientes precios.
Paquetes Chili y Pepper:
¿Por qué un MINI Clubman?
Toca a fin este primer cara a cara con el nuevo MINI Clubman, este primer encuentro. Aparcamos en la última planta de un céntrico hotel madrileño y nos dirigimos de nuevo a ese local de industrial aspecto que bien le valió a MINI para la producción de las fotos oficiales y para rodar el sport que se emitirá a nivel mundial.
Vuelvo a decir que me muestro detractor de ese cambio de puertas, de la desaparición de la puerta de apertura suicida. La primera generación del MINI Clubman me encantaba sí, pero claro, con esta nueva generación el público es más amplio.
Convertido en compra racional, convertido en compacto, el MINI Clubman nos ofrece ahora mayores cotas de habitabilidad y carga para convertirse así en una opción a tener más presente a la hora de elegir un compacto de enfoque premium, contando además como valor añadido toda esa personalidad, ese diseño, marca de la casa.
Por tanto la respuesta a “¿Por qué un MINI Clubman?” parece sencilla. Si estas buscando un compacto no generalista, una alternativa más refinada, de cuidados detalles y además te gusta el diseño MINI, te gusta su imagen, el MINI Clubman es la respuesta. Ya no tendrás problemas de espacio interior, no tendrás que pasar a tus acompañantes por detrás de los asientos, por una escueta puerta suicida y su maletero será más que suficiente para el día a día.