EE.UU. es el reino del automóvil por excelencia y creedme, lo sigue siendo. La estructura de las ciudades y los pueblos está ideada con el automóvil como herramienta indispensable. En muchos lugares de EE.UU. es imposible siquiera hacer la compra sin tener un vehículo. Como no, fueron los inventores de los «Drive-Thru» y los «Drive-In«, un concepto de negocio en el que no tienes que bajarte del coche para recibir un producto o servicio. Los McAuto son la punta del iceberg. A continuación os contamos 12 cosas que puedes hacer en EE.UU. sin bajarte del coche.
1) Comprar café
Los bancos tienen «Drive-Thru» populares, pero no son nadie en comparación a la afluencia de consumidores motorizados que experimentan cadenas como Dunkin’ Donuts o Starbucks Coffee. He llegado a ver colas de diez o más coches cuando vivía en EE.UU., esperando para comprar café y bollería en localizaciones suburbanas de estas cadenas de comida rápida. Eso sí, ten cuidado cuando compres el café, porque los cafés están extremadamente calientes. Ya ha habido demandas millonarias al respecto, y ningún coche viene ya sin posavasos.
2) Ir al banco
Es habitual que la mayor parte de bancos en zonas suburbanas de EE.UU. tengan uno o dos carriles «Drive-Thru». En ellos puedes ingresar tus cheques – aún la forma de pago más común en el país teóricamente más avanzado del mundo – u ordenar pagos. También puedes retirar efectivo en los cajeros automáticos que los bancos suelen colocar para los clientes que no desean bajarse del coche. Curiosamente, el primer negocio «Drive-Thru» de EE.UU. fue un banco, y la única operación que se permitía a través de la ventanilla era hacer depósitos.
3) Comprar fast-food y comértela en el coche
La trinidad de los «Drive-Thru» no estaría completa sin las cadenas de comida rápida, o comida basura. McDonald’s, Burger King, Wendy’s, In-n-Out, Five Guys, KFC, Popeye’s… cualquier establecimiento de comida rápida que se precie debe venderte comida a través de una ventanilla, sin que tengas que levantar el trasero del coche, no sea que te vayas a cansar. Después puedes comer la comida en el coche, y con un poco de suerte, conseguirás ser una estrella de YouTube, como el gran Daym Drops.
4) Casarte
El día más especial de tu vida, y lo puedes experimentar desde el confort del asiento de tu coche. Como no podría ser de otra manera, las únicas capillas «Drive-Thru» del mundo están situadas en la ciudad del pecado, Las Vegas. Una de ellas, llamada «A Little White Chapel», ofrece matrimonios por sólamente 75$ y está abierta las 24 horas del día. Por si a mitad de la noche te entra el antojo de casarte, claro está. Lo que quizá no termino de ver es la calidad de los matrimonios que puedan formarse de esta manera.
5) Comprar medicamentos
Las farmacias con «Drive-Thru» son un negocio habitual en EE.UU. Son grandes cadenas – como Walgreens o CVS, te sonarán si has visitado los Estados Unidos – y permiten a sus clientes comprar medicinas con prescripción a través de una ventanilla en la parte trasera del establecimiento. Lo curioso es que las farmacias han ampliado tu modelo de negocio a todo tipo de artículos de droguería y alimentación. Incluso venden tabaco en algunos establecimientos. Me duele la cabeza de pensar en la contradicción.
6) Cargar el coche de alcohol hasta arriba
EE.UU. es un país mucho más extraño de lo que parece, os lo aseguro. Aunque tiene una de las leyes más duras del mundo con la conducción bajo los efectos del alcohol, es el paraíso de las licorerías con «Drive-Thru». Se llaman «Beer-Through», «Brew-Through» o «Pony Keg», según la región en la que se encuentren. Puedes comprar decenas de cajas de cervezas, pequeños barriles de cerveza o botellas de licor de alta graduación. Eso sí, aunque estés muy tentado no se te ocurra consumir una sola cerveza al volante.
7) Acudir a un funeral
En Michigan y en Compton (California) – localidad conocida por su crimen y peligrosidad, dicho sea de paso – es posible rendir tus últimos respetos a los fallecidos sin bajarte del coche. Varios tanatorios han inaugurado servicios «Drive-thru» en los que se expone el féretro con el fallecido a través de una cristalera, situada al lado de un carril habilitado para el paso de vehículos. He de reconocer que me he quedado bastante descolocado con este tipo de negocio, desconocía su existencia al completo.
8) Practicar tu religión
Son habituales las misas «Drive-In» en ciertas partes de Estados Unidos, especialmente en Texas – ¿por qué no me sorprende?. Las iglesias suelen habilitar un gran aparcamiento o superficie frente a un púlpito en el que el sacerdote imparte la misa. Es un concepto similar al de los autocines, donde cada coche cuelga de su puerta un altavoz a través del que se emiten las palabras del sacerdote. Algunas iglesias también ofrecen ventanillas express para confesiones «Drive-Thru». Os juro que no es broma.
9) Comprar armas
La segunda enmienda de la Constitución estadounidense autoriza a todo ciudadano a tener armas de fuego con las que proteger a su familia y propiedades. La relación de amor con el automóvil es sólo equiparable a la relación de amor de algunos americanos con las armas, especialmente en estados rurales. En Texas – no podía ser otro lugar – hay un negocio llamado «Double Shot Liquor and Guns», donde además de comprar bebidas alcohólicas, puedes comprar armas y munición real. ¿Genialidad o auténtica locura?
10) Ver una película
A nadie creo que sorprenda esta. Los cines tipo «Drive-In» o autocines han sido un icono de la cultura popular estadounidense y fueron tremendamente populares durante los años 50 y 60, donde era el lugar de recreo favorito de muchos jóvenes. Pensad en cualquier película ambientada en la época y un autocine terminará apareciendo tarde o temprano. Cada coche tiene un espacio asignado, un altavoz se cuelga de la puerta para que podamos escuchar la película y podemos encargar palomitas y bebidas para comerlas en el propio coche.
11) Visitar un club de striptease
El Climax Club de Pennslyvania ya está cerrado desde hace años – tras el fallecimiento de su dueño – pero hubo una época en la que fue famoso por ser el único club de striptease «Drive-In» de Estados Unidos. Los coches eran llevados a la parte de atrás del local, previo pago de un importe de dinero. En la parte trasera había una ventana con forma de diamante en la que una bailarina actuaba para los clientes que no querían bajarse del coche, haciendo las cosas que se suelen hacer en los clubs de striptease.
12) Ir a hacerse una revisión al médico
El Stanford Hospital & Clinics en California estableció hace unos años un carril «Drive-Thru» para urgencias médicas. Está especialmente habilitado para pacientes contagiosos, que no llegan a entrar al hospital, evitando el contagio de otras personas. Curiosamente, este experimento ha sido un éxito, llegando a reducir los contagios en el hospital y reduciendo el tiempo de espera de los pacientes enormemente. No todos los «Drive-Thru» son monumentos a la vagancia humana, algunos son incluso útiles para la sociedad.
Fuente: TheFW | TIME
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