Es uno de los jaleos del día. Automovilistas Europeos Asociados alerta de irregularidades que afectan a todas las multas comunicadas por edictos en el último año, por la DGT, por el Gobierno Vasco, por el Servei Catalá de Tránsit y por 1.152 ayuntamientos. Irregularidades que, según esta asociación, hacen que la sanción sea inválida, ineficaz, y no tenga valor legal alguno. El problema en cuestión está en el TESTRA, en el Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico, el sistema informático en el que los conductores pueden consultar las sanciones de tráfico desde que se introdujera a finales del año 2010. Es probable que hoy hayas podido leer el siguiente titular «7 millones de multas de tráfico a la basura«, el mismo con el que introducía su denuncia del caso Automovilistas Europeos Asociados (AEA). Pero, ¿es eso cierto?
El problema no es otro que la publicación de las sanciones en el TESTRA sin que figure la fecha en la que el edicto fue emitido. Hablamos de un dato muy importante, porque de él dependerán los subsecuentes plazos legales a los que nos debemos acoger si optamos por el descuento por pronto pago, o por emitir un recurso.
Esa es la versión de AEA, puesto que la Dirección General de Tráfico ya se ha adelantado (vía Europa Press) y ha declarado que en los edictos del TESTRA sí aparece la fecha en la que se publicó el anuncio (tanto en la cabecera de cada página del edicto, como en la parte baja del PDF que se puede descargar).
Por otro lado, hemos de tener en cuenta que la mayoría de esos 7 millones de multas notificadas vía TESTRA han sido comunicadas utilizando otros cauces, como la notificación mediante correo postal en el domicilio del infractor, o la persona a nombre de la cual esté registrada el vehículo.
Aún hay más. La DGT asegura que el TESTRA es solo un servicio informativo y que el medio oficial, que también se puede consultar por internet, es el Tablón Edictal Único del BOE, en el cual aparece detallada la fecha de publicación del edicto. Ninguna novedad. Una asociación de automovilistas encuentra un defecto que puede ser susceptible de la anulación de multas, y Tráfico encuentra una justificación que evita que ese defecto pueda anular cualquier multa.
Ante lo alegado por la DGT, mucho nos tememos que la oposición de oponerse al pago de las multas que propone AEA no va a prosperar. En cualquier caso, no por ello podemos olvidarnos de que la DGT debe velar por el rigor en la comunicación de las sanciones, porque de ello depende el respeto de la inocencia y los derechos de los conductores.
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