Montesa lanza un nuevo modelo, una Montesa 4Ride que llega para ofrecernos una perspectiva a medio camino entre el trial y el enduro, una moto de trial polivalente, una moto de enduro ligera, aún más ágil, lista para acompañarnos y embarrarse en nuestras salidas dominicales fuera del asfalto.
Una moto offroad polivalente que no es una trail, ligera y ágil sin ser una moto de trial y que tampoco está dentro de las motos de enduro más especializadas:
Presentada con motivo del EICMA de Milán la Montesa 4Ride nos ofrece una estética calcada a una moto de enduro pero con cotas más comedidas y una careta, un faro delantero, que delata su origen trialero.
Esta Montesa 4Ride cuenta con el propulsor de 260cc y 4 tiempos heredado de las Montesa Cota 4RT260 y la Race Replica aunque ha sido debidamente adaptado a su nuevo uso contando además ahora con un depósito de combustible de mayor capacidad, de 4,4 litros frente a los de menos de 2 litros de las motos de trial.
Frente a la báscula nos encontramos ante un conjunto de 85 kg que, aunque bastante ligero para su enfoque es, claro, más elevado que el que nos ofrecen sus hermanas más trialeras.
Sus suspensiones ofrecen un largo recorrido y su posición de conducción nos invita a adoptar una postura considerablemente más relajada que en las variantes específicas de trial, contando incluso con una guantera bajo el asiento.
Estamos por tanto ante una moto que se posiciona en un punto intermedio entre lo que nos ofrece una moto de enduro y lo que nos ofrece una moto de trial. Una perfecta alternativa para aquel que quiere adentrarse en el terreno offroad sin caer en variantes más radicales y específicas.
Su comercialización está programada para el próximo mes de febrero. Se fabricará en la planta de Santa Perpètua de Mogoda.