Últimamente, especialmente en una categoría como esta, la de los pequeños GTI, lo habitual es que los motores sigan una evolución muy concreta, la de reducir cilindrada y aumentar potencia gracias a la sobrealimentación. El proceso inverso, el seguido por el SEAT Ibiza Cupra, es poco común. El deportivo para todos los públicos, y todos los bolsillos, acaba de actualizarse. Y lo ha hecho con cambios realmente importantes, más allá de unos retoques cosméticos, y la llegada de nuevo equipamiento. Abandona el anterior 1.4 TSI, con turbo y compresor volumétrico, para optar por un 1.8 TSI con turbocompresor que alcanza los 192 CV de potencia (es el SEAT Ibiza más potente hasta la fecha) y que, definitivamente, será el aspecto más importante que defina las prestaciones y la diversión que promete este modelo.
Nosotros ya lo hemos probado. Estos días hemos podido conducir el SEAT Ibiza Cupra 2015 en carretera, e incluso en un tramo de curvas – cerrado al tráfico – realmente divertido. Pero antes de ofreceros nuestras impresiones, preferiría que hablásemos en profundidad de este motor.
¿Por qué SEAT ha escogido este bloque? No existe una única respuesta para esta pregunta. Pero sí podríamos resumir con la idea de que este motor es, sin duda, el más adecuado para un utilitario picante. El SEAT Ibiza Cupra es más potente, pasa de 180 a 192 CV de potencia, su par también se ha visto incrementado, ahora goza de un motor más lineal y elástico, y con un sonido más evocador. Todo ello da como resultado un coche más divertido, que aún así es mucho más versátil a la hora de mantener un buen compromiso entre confort y practicidad en el día a día, y por supuesto deportividad.
Seguro que ya lo estabas pensando. El SEAT Ibiza Cupra ha seguido los pasos del Volkswagen Polo GTI presentado hace un año. El de Volkswagen también sustituyó su motor 1.4 TSI por un 1.8 TSI de 192 CV. Las sinergias en el Grupo Volkswagen no pueden pasarse por alto aunque, en cualquier caso, SEAT nos recuerda que toda la puesta a punto del Ibiza se ha llevado a cabo en su centro técnico de Martorell.
Si estás intentando decidirte por un Ibiza Cupra o un Polo GTI, es posible que encuentras un aspecto muy obvio que te ayude en tu decisión. El Ibiza Cupra, que hasta ahora se comercializaba con cambio DSG, solo estará disponible con un cambio manual de seis relaciones. El Polo GTI sí está disponible con cambio DSG, además de la alternativa manual. El gran problema existente en la elección del cambio automático con este motor está en el hecho de que, por limitaciones técnicas, el par máximo esté limitado a 250 Nm. Eso es un gran handicap, si tenemos en cuenta que el Ibiza Cupra con cambio manual llega a un par máximo de 320 Nm.
Aunque existen diferentes versiones de este cambio DSG, las cuales pueden lidiar con motores más potentes, y con un par mayor a la salida del cigüeñal, en el Polo GTI se emplea el DSG de seis relaciones, con dos embragues multidisco bañados en aceite, limitado a 250 Nm. SEAT, por su parte, de momento prefiere comercializar el Ibiza Cupra solo con un cambio manual. Y aunque no se descarte la llegada de un DSG, tampoco tenemos datos que nos inviten a pensar en que ese lanzamiento se vaya a producir.
Como ya os decíamos, el motor 1.8 TSI alcanza los 192 CV de potencia entre 4.300 y 6.200 rpm. Con este dato ya estaréis imaginando que es un motor agradecido cuando lo estiramos hasta la línea roja del cuentarrevoluciones. Su par máximo, de 320 Nm, lo entrega entre 1.450 y 4.200 rpm. Este es otro dato muy a tener en cuenta. Su aceleración es contundente, pero sin altibajos, y entre su respuesta inmediata, y la contundencia con que empuja en todo el rango de revoluciones, nos permite utilizar marchas largas sin que sintamos falta de empuje.
Esto lo comprobamos rápidamente, en cuanto nos enfrentamos a un tramo muy revirado y cerrado al tráfico. En un tramo de subida, con curvas muy cerradas, e incluso horquillas, te esperas jugar mucho con el cambio, con segunda y tercera. Eso es lo divertido, y lo que puedes hacer con este Ibiza Cupra. Pero rápidamente te percatas de que en casi todo el tramo puedes circular sin reducir a segunda, y sin perder tiempo, porque aún manteniéndote a un régimen medio, y casi bajo, siempre te vas a encontrar en un régimen de revoluciones dulce, y adecuado para salir con energía de cada curva.
El SEAT Ibiza Cupra acelera de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y alcanza los 235 km/h de velocidad punta. Son cifras muy respetables, que están entre las mejores de su categoría y que superan a las de pequeños GTI de su potencia (e incluso más potentes). Pero estaréis conmigo en que lo importante de un utilitario picante no es únicamente que haga el 0 a 100 km/h en unas décimas menos, sino la diversión en su conducción.
El 1.8 TSI utilizado por el SEAT Ibiza Cupra cuenta con inyección directa de combustible, FSI, pero también un sistema de inyección indirecta que inyecta el combustible al final del colector de admisión. Esta inyección indirecta trabaja en condiciones de carga parcial, mejorando levemente la eficiencia, para reducir el consumo de combustible en el día a día. Aunque el Ibiza Cupra se anunciase con un consumo homologado en torno a los 6,0 litros/100 kilómetros, esta cifra aún no podemos considerarla a rajatabla, en tanto SEAT (y el Grupo Volkswagen) se encuentra actualmente revisando la homologación de emisiones de CO2 y consumos de sus modelos por una reconocida irregularidad en los procesos de certificación.
La inyección del sistema FSI ha aumentado su presión, con respecto al motor utilizado hasta ahora, de 150 a 200 bares, realizando entre dos y tres inyecciones por ciclo. Este motor también emplea alzado variable de válvulas en dos fases, en el árbol de admisión y de escape, y con un ajuste del ángulo de giro de 30 o 60 grados.
SEAT también nos ha hablado de las optimizaciones que se han realizado en este bloque para mejorar la gestión térmica. El motor cuenta con un sistema de dos válvulas rotativas de alta velocidad y un motor eléctrico para conseguir que el aceite alcance la temperatura de servicio con mayor rapidez, y que el líquido refrigerante pueda ajustar su temperatura, y su capacidad para disipar el calor, en función de la carga y la velocidad del motor, entre 85º y 107º Celsius.
El motor 1.8 TSI también se ha rediseñado, con un rotor de turbina más resistente, que soporta temperaturas de hasta 980º. Esta nueva aleación ha contribuido a que el nuevo motor, aún gozando de un mayor desplazamiento, sea más ligero que el utilizado en su predecesor. El peso total de este bloque es de 133,4 kilogramos.
Otro de los aspectos que más nos ha gustado de este motor, y en general del SEAT Ibiza Cupra, lo tenemos en la sonoridad. Es un motor gratamente silencioso en bajas, cuyo sonido gana personalidad (y decibelios) a medio régimen, para convertirse en toda una delicia cuando pasamos del régimen medio, al alto, al que solo será necesario que lleguemos cuando de verdad queramos practicar una conducción más deportiva. En ese régimen se obtiene un sonido muy contundente y deportivo, sin adulterar. Un sonido de admisión, especialmente evocador en reducciones, y sin añadidos de escape. Este aspecto me parece realmente interesante, en una época en la que la sobrealimentación ha llevado a muchos fabricantes a obtener el carácter sonoro de sus deportivos en la salida de escape, con sistema de mariposas y válvulas que garantizan gorgoteos y detonaciones. Ese no es el caso del Ibiza Cupra, que goza de un sonido con carácter, pero natural, alejado de cualquier tentación de buscar un toque macarra.
De momento esto es todo. En los próximos días os seguiré hablando del SEAT Ibiza Cupra y de nuestras impresiones de conducción.
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