Aunque la mayoría de las aplicaciones del coche conectado siguen presentándose desde el plano teórico, Delphi anuncia algunas de tecnologías que comenzarán a introducirse este año, incluyendo el esperado Super Cruise del nuevo Cadillac CTS 2017, que estará dotado de conducción semi-autónoma, para recorrer largas distancias en carretera sin la intervención del conductor. La pregunta del millón es la siguiente, ¿tendré que comprarme un coche premium, el último grito tecnológico, para disfrutar de estas soluciones? Según Delphi ya están trabajando en un sistema aftermarket que podrá equipar cualquier conductor en su automóvil, aunque este de serie no estuviera dotado de este grado de conectividad. Mientras tanto, Delphi acaba de contarnos en el CES 2016 cómo pretende conectar a peatones y coches para evitar atropellos.
La tecnología de coche conectado de Delphi pretende abogar por la conectividad en 5 ámbitos bien diferenciados:
– Comunicación coche a coche. Conseguir que todos los coches estén conectados entre sí, y sean capaz de «verse», aunque no exista contacto visual entre ellos.
– Comunicación entre coches y señales de tráfico. Esta tecnología comunicará a nuestros coches con la infraestructura que le rodea, por ejemplo para saber el estado de los semáforos, y anticiparnos a las luces en ámbar o en rojo, y evitar que nos los saltemos. Funcionaría mediante conexiones inalámbricas de corto alcance.
– Ver detrás de las esquinas. Implantar un sistema con el que técnicamente podamos detectar si otros coches se aproximan a una intersección. Esto es especialmente interesante para intersecciones con ángulos complicados.
– Coche compartido. Delphi querría potenciar la idea del coche compartido, no solo como negocio, bajo los servicios que ya hemos visto en Europa, como car2go, sino como estrategia para compartir gastos entre amigos o familiares. De manera que gracias a esta tecnología pudiéramos localizar el coche en cualquier momento y reservar un viaje.
– Comunicación entre coche y peatón. Como implantar un chip a todos los peatones no parece una solución razonable, Delphi ha ideado un microchip que podría ir instalado en cualquier teléfono móvil. De esta forma los coches no solo podrían percatarse de nuestra cercanía, incluso sin contacto visual, o en un hipotético fallo de los sistemas de reconocimiento de imágenes actuales, sino que incluso alertaría al conductor de que un peatón se encuentra cerca de nosotros, o en nuestra trayectoria, mientras está distraído jugando con el teléfono o enviando mensajes por Whatsapp.
Estas estrategias para el coche conectado podrían introducirse, según Delphi, muy pronto. Y este fabricante asegura que muy pronto comenzará a suministrar a constructores de automóviles con tecnologías capaces de ofrecer estas funcionalidades.
Fuente: Delphi
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