¿Recuerdas aquella escena de la famosa película de Alejandro Amenábar en la que Eduardo Noriega corría por una Gran Vía completamente vacía, y sin un solo coche? Esa situación podría producirse a partir del 1 de febrero, con la entrada en vigor de un nuevo Protocolo para Episodios de Alta Contaminación por NO2 2016 que plantea la posibilidad, incluso, de restringir el 100% del tráfico en las calles madrileñas. Por suerte para los conductores, y para la salud de los madrileños, este protocolo pretende precisamente evitar que se alcance un escenario tan catastrofista, que indudablemente generaría grandes problemas para los que vivimos en la capital española. ¿Y qué condiciones han de darse para que lleguemos hasta tal punto?
El ejecutivo madrileño ha aprobado un nuevo texto, un nuevo Protocolo de medidas a adoptar durante Episodios de Alta Contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2), que precisamente se centra en intentar atajar los problemas con mayor antelación, para evitar que las restricciones se endurezcan. Este protocolo entrará en vigor el 1 de febrero de 2016, en sustitución del protocolo anteriormente aprobado por el anterior ejecutivo, que entró en vigor en marzo de 2015.
Escenario 1:
Si hasta ahora eran necesarios dos días consecutivos de preaviso, o un día con nivel de aviso, para comenzar a tomar medidas, ahora bastará con un día de superación del nivel de preaviso para que comiencen las restricciones. También se ha endurecido la definición del nivel de pre-aviso. Bastará con que dos estaciones cualesquiera de una misma zona superen los 180 microgramos/m3 durante dos horas consecutivas para iniciar las restricciones.
Restricciones: se limitará la velocidad a 70 km/h en la M-30 y los accesos a la ciudad, en ambos sentidos, dentro de la M-40. Se promocionará el transporte público.
Escenario 2:
Tras dos días seguidos de nivel de pre-aviso, o un día de aviso, es decir, con dos estaciones cualesquiera de una misma zona superando los 200 microgramos/m3 de NO2 durante dos horas consecutivas, las restricciones serán mayores.
Restricciones: a las restricciones del Escenario 1 se sumará la prohibición de que los vehículos no residentes aparquen en las plazas del SER (Servicio de Estacionamiento Regulado) en toda la ciudad. Estarán exentos de la restricción los destinados a personas con movilidad reducida, los que gocen del distintivo «cero emisiones» y los servicios esenciales.
Escenario 3:
Con dos días seguidos de aviso, comenzarán las restricciones más polémicas, las relacionadas con paridad de matrícula.
Restricciones: el interior de la M-30 solo será accesible por el 50% de los vehículos. En los días pares, estará prohibida la circulación de vehículos con matrículas pares. En días impares, la prohibición se aplicará a los vehículos con matrícula impar. Estarán exentos la prohibición motocicletas, triciclos y ciclomotores.
Escenario 4:
Entrará en funcionamiento tras tres días consecutivos de nivel de aviso, o un día de nivel de alerta, es decir, con tres estaciones de una misma zona superando los 400 microgramos/m3 de NO2 durante tres horas consecutivas.
Restricciones: la restricción del tráfico al 50% de los vehículos, por matrículas pares, se extenderá del interior de la M-30 a la propia M-30. También se restringirá la circulación de taxis libres.
La situación excepcional, y más restrictiva de todas, se produciría en el caso de que se cumplieran las siguientes condiciones:
– Se ha alcanzado el escenario 4
– Persisten las superaciones del nivel de aviso o de alerta
– La previsión meteorológica es desfavorable
– Las medidas aplicadas no han reducido la concentración de contaminantes (lo cual es obvio, si se ha alcanzado el máximo nivel de contaminación previsto en el protocolo)
Por Decreto, el Delegado de Medio Ambiente y Movilidad declararía la restricción de la circulación en la almendra central de Madrid, y la propia M-30, del 100% de los vehículos.
Es evidente que la probabilidad de que esto suceda es muy baja. En estos momentos deberían darse las peores condiciones posibles, en las que confluyeran una meteorología muy desfavorable, y unos niveles de contaminación muy superiores, incluso, a los que ya vivimos durante los últimos episodios de alta contaminación. Y además de eso sería necesario que las restricciones tomadas no solventaran el problema de contaminación.
Fuente: Ayuntamiento de Madrid
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