Mitsubishi ha renovado al Mitsubishi Outlander PHEV, ha introducido nuevos detalles de diseño, ha mejorado aspectos estructurales de su parte ciclo, nuevos detalles en su habitáculo… y ha dado forma a un producto aún más redondo, polivalente y realmente interesante si tenemos en cuenta que, por 35.020 euros podemos poner en nuestro garaje un coche realmente bien resuelto con la capacidad de alcanzar más de 50 km en modo totalmente eléctrico. Ya hemos tenido la oportunidad de conocerlo, de probarlo y esto son cuatro motivos por los cuales es una buena idea poner al Mitsubishi Outlander PHEV en tu garaje:
1.- Un SUV grande con una buena imagen
No podemos perder de vista que, más allá de su conjunto híbrido, más allá de esta tecnología, el Mitsubishi Outlander tiene otros tantos argumentos que pasan por un lado por una imagen de SUV robusto, de grandes cotas que además nos ofrece un habitáculo con una buena habitabilidad, perfecto para viajar hasta 4 adultos, con un maletero más que correcto, buenos ajustes y calidades además de un buen aislamiento que se ve reforzado por el hecho del silencio mecánico del conjunto eléctrico.
Mitsubishi nos habla de más de 100 mejoras que inciden por un lado en una carrocería más rígida, en nuevos ajustes para la suspensión, un mayor aislamiento, ligeros retoques en sus propulsores (mejor eficiencia gracias a menores fricciones internas) y un habitáculo en el que aparecen nuevos asientos con una nueva tapicería en un acabado mixto de cuero y alcántara, iluminación ambiental LED, un nuevo diseño para la consola central o un nuevo volante multifunción calefactado.
Estéticamente el Outlander PHEV 2016 se diferenciará del resto de la gama en una nueva moldura para el pargolpes delantero, un tono oscuro para la parrilla cromada, los embellecedores de las luces antiniebla acabados en negro piano o las llantas de aleación de diseño específico. Además también cuenta con una antena con diseño “aleta de tiburón”, el paragolpes trasero se encuentra acabado en el mismo tono que la carrocería, aparece una inserción cromada en las taloneras y los pasos de rueda están acabados sin moldura.
2.- Un único nivel de acabado, bien resuelto si tenemos en cuenta su precio:
Mitsubishi sólo comercializará el Mitsubishi Outlander PHEV con un único nivel de acabado, un acabado Kaiteki que nos propone una buena dotación de equipamiento en la que nos encontramos con climatizador bizona, ayuda al aparcamiento con sensores en los paragolpes delantero y trasero, alarma, sistema de cámaras 360º, sistema multimedia con pantalla táctil y navegador, llantas de aleación de 18 pulgadas, ópticas LED, retrovisor interior fotosensible, asientos, control de crucero adaptativo, sensores de luz y lluvia, bluetooth, toma USB, portón trasero eléctrico y volante calefactado.
3.- Hablemos de su precio: Mitsubishi ha preparado una agresiva campaña comercial para multiplicar notablemente las ventas de esta versión:
El Mitsubishi Outlander estará disponible con un precio de partida de 35.020 euros resultante de, por un lado una campaña de de 8.975 euros y por otro un descuento del Plan MOVEA de 3.700 euros. Si has hecho bien las cuentas verás que el descuento disponible supera los 12.000 euros.
Con este descuento nos encontramos con que este MY2016 es 5.000 euros más barato que su predecesor y además es 2.275 euros más barato que su equivalente diésel, pero además se sitúa en una posición ventajosa entre los SUV con mecánicas convencionales como el Mazda CX-5 o el Volvo XC60 (buscando acabados parejos).
Durante 2014 Mitsubishi vendió 208 unidades del Outlander PHEV, alcanzando las 389 unidades en 2015, año en el que Mitsubishi vendió un total de 9.707 unidades. Es el híbrido enchufable más vendido y en 2016 la marca quiere experimentar un sólido crecimiento basado en el Outlander, teniendo presente que se esperan comercializar un total de unas 1.000 unidades de esta versión, así como unos 1.400 Outlander diésel y 400 gasolina, una alternativa que conoceremos en el próximo mes de febrero.
4.- Pero… ¿qué pasa con su mecánica híbrida?
Bien, dejamos casi para el final lo más interesante de este Mitsubishi Outlander híbrido, su conjunto mecánico, un conjunto conformado por un motor gasolina de 2 litros de cubicaje que desarrolla una potencia de 121 caballos, un motor eléctrico delantero de 82 caballos y 137 Nm de par, un motor eléctrico trasero de 82 caballos y 195 Nm, un generador de 70 kW y un sistema de baterías de iones de litio. Su transmisión es automática y la disposición de un bloque eléctrico en el tren posterior le brinda una tracción total, denominada Super All Wheel Control, a este Outlander híbrido.
En total la potencia conjunta es de 203 caballos, cuenta con una autonomía en modo eléctrico de 52 km, marca un 0 a 100 km/h de 11 segundos y su velocidad máxima es de 170 km/h, homologando un consumo medio de 1.8 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 42 g/km, teniendo presente que este ciclo de homologación se realiza partiendo con las baterías totalmente cargadas.
Durante mi prueba pude rebajar incluso ese consumo medio, marcando un consumo de 1.7 l/100 km en un trayecto en el que no faltó circulación urbana, autopista y carreteras secundarias, aunque obviamente este consumo se llevo a cabo en unas condiciones de circulación ecológica.
En la práctica real el Outlander PHEV nos ofrece un buen recorrido eléctrico idea para aquellos que realizan un trayecto entre su viviendo y el trabajo inferior a esos 50 km que nos propone el fabricante como autonomía eléctrica máxima. Esto nos permitiría recorrer en modo totalmente eléctrico este trayecto, con el consiguiente ahorro económico que supone, haciéndolo además acompañados por un grato silencio mecánico y una suavidad de uso realmente elogiable.
Los argumentos dinámicos del Outlander PHEV se saldan con unas aceleraciones un tanto relajadas, pero más que suficientes, así como una transito en el que el volante deja entrever su carácter confortable, en sintonía con unas suspensiones que absorben bien las imperfecciones y cuya mejoría es palpable. Meses atrás pude probar la versión previa a este MY2016 y se notaba un tanto más errático en su paso por curva, adoleciendo un peso que si bien sigue siendo notable es mejor digerido por el reforzado conjunto de este MY2016.
Mención aparte merece su sistema de levas que actúan regulando la incidencia del freno motor. De este modo podemos configurar a golpe de leva la posibilidad de que al levantar el acelerador nos encontremos con una gran retención, una casi frenada que repercutirá muy positivamente en la carga de las baterías, así como por el contrario reducir la presencia de este freno motor para, aún cargando menos las baterías, disponer de una marcha más fluida articulada alrededor de 5 niveles de incidencia.
La configuración de su mecánica, los híbridos condicionantes de su dinámica, nos invitan a circular con el Outlander PHEV buscando “pelea” constantemente contra la entrada en funcionamiento del motor gasolina, procurando cargar las baterías en cada deceleración, en cada pendiente descendente para poder disfrutar seguidamente de unos cuantos kilómetros adicionales en modo totalmente eléctrico.
Por todo lo anterior: el Mitsubishi Outlander PHEV es una compra realmente recomendable (siempre que estés valorando un SUV en este rango de precios y se adecue a tus desplazamientos diarios su sistema híbrido):
Toca dejar valencia tras el breve encuentro con este Mitsubishi Outlander PHEV. Por delante la intención de probarlo más a fondo en algún próximo encuentro, en nuestras pruebas habituales de mayor duración, pero he de reconocer que me monto en el AVE de vuelta a casa con una grata sensación con este modelo.
Hace sólo unos pocos días me ponía al volante del Toyota RAV4 Hybrid y este Mitsubishi Outlander PHEV me parece una alternativa más tentadora. Su sistema híbrido esta realmente más evolucionado, es más complejo y nos ofrece un funcionamiento más palpable, pero además es competitivo en precio, calidades, habitabilidad… aunque claro, todavía no tenemos un precio definitivo para el RAV4 Hybrid.
Me parece una excelente opción para aquellos que busquen un SUV de buen tamaño, una excelente forma de entrar en el mundo de las mecánicas híbridas, más aún si tus trayectos habituales se emplazan en esos 52 km de autonomía eléctrica.
Si además vives en Madrid el Mitsubishi Outlander PHEV es un buen arma para hacer frente a las prohibiciones de circulación por contaminación, además de poder acceder al carril BUS-VAO-ECO o no pagar la zona azul/verde de aparcamiento regulado.
Galería de imágenes del Mitsubishi Outlander PHEV:
