Aston Martin no va de farol y en sólo unos años veremos un modelo de producción del Aston Martin RapidE que hace apenas unos meses conocimos como concept car. El fabricante británico ha anunciado de forma oficial un acuerdo de colaboración con la firma china LeEco para fabricar este primer eléctrico. Con este acuerdo Aston Martin desvela todas sus cartas en su plan para meterse de lleno en el mercado de los coches eléctricos y frenar el crecimiento de Tesla.
El acuerdo estratégico con el fabricante chino LeEco es un movimiento clave en el futuro de Aston Martin, un futuro que nos dibuja un modelo de producción del Aston Martin RapidE en 2018 y un Aston Martin DBX eléctrico en 2019 o 2020. Estos modelos están destinados a convertirse en la alternativa a los Tesla Model S y Tesla Model X, modelos que ya están en el mercado y que están disfrutando de un notable éxito en ventas sin ningún tipo de competencia directa.
La firma china LeEco tendrá un papel protagonista en los Aston Martin eléctricos, y es que ellos serán los encargados de fabricar los propulsores eléctricos y las baterías. El ensamblaje final se realizará en la fábrica de Aston Martin en Gaydon, pero el corazón de estos deportivos eléctricos será 100% de origen chino.
Tras conocer el Aston Martin RapidE, muchos pensaron que estábamos ante un globo sonda lanzado por Aston Martin, pero hoy tenemos la prueba de que los planes de electrificación ya están en marcha. Las buenas relaciones entre Aston Martin y China tampoco son casuales, y es que la firma británica Aston Martin Lagonda pretende crecer hasta las 7.500 unidades anuales, un plan muy ambicioso donde el mercado de China y los acuerdos con los fabricantes locales serán clave.
Fuente: Aston Martin
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